Samira, una joven y apasionada estudiante de literatura, nunca imaginó que su vida cambiaría drásticamente en un instante. Un viaje a las Vegas y una traición amorosa, la lleva a casarse con Frederick, un poderoso abogado y jefe de la mafia, conocido por su frialdad y determinación.
Al principio, Samira se resiste a aceptar su nueva realidad, pero a medida que conoce a Frederick, descubre un lado oculto de él que la hace cuestionar todo. A pesar de los peligros que conlleva estar cerca de él, Samira comienza a sentir una atracción irresistible hacia Frederick.
Sin embargo, su amor no será fácil. Terceros en discordia, incluyendo rivales de la mafia y personas del pasado de Frederick, intentarán separarlos por todos los medios. ¿Podrá Samira superar sus miedos y confiar en Frederick lo suficiente como para estar juntos? ¿O la oscuridad que rodea su mundo los separará para siempre?
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Cap 16 - Eres mí esposa nuevamente
Simón …
Después de enterarnos que mí hermana estaba en las Vegas por su propia voluntad, me sentí triste, a pesar de que no pasábamos tiempos juntos como cuando éramos niños, aún así ella era mí melliza y la extrañaba
Ya no era lo mismo sin ella, quería salir corriendo y viajar a las Vegas para buscarla, pero sabía que sería en vano, era su decisión y debía respetarla
Un nuevo día comenzaba, después de dos días sin ir al colegio, por estar preocupados buscando a Samira, hoy retomaba de nuevo
Me levanto, me preparo tranquilo y luego bajo a desayunar
Al llegar a la sala ahí se encontraba toda mí familia excepto Samira
Llegué a la mesa y me quedé observando el asiento que ocupaba ella en la mesa y me entró la nostalgia de volver a verla
Con tristeza me siento en mí lugar y comienzo a desayunar en silencio. A decir verdad todos estaban en silencio, se ve que no solo a mí me afectaba la ausencia de mí hermana, pero no nos quedaba más que acostumbrarnos
Termino de desayunar, me despido de todos y salgo de mí casa para la universidad
Al llegar ya se encontraban Ian y Santino en la puerta esperándome. Ian al verme se acerco rápidamente
— ¿Sabes algo de tu hermana? Hoy vi que leyó todos los mensajes de WhatsApp que le envié y cuando le volví a escribir ya me marcaba un solo tilde, ¿Será que me bloqueó? — me pregunta Ian desesperado
— No lo sé, déjame ver — le digo tomando mí teléfono y revisando el chat de mí hermana — Acá veo que su última conexión fue anoche a la media noche, pero como nos llevamos 4 horas de diferencia su última conexión allá sería a las 8 pm — le digo
— Escríbele Simón, quiero saber si me bloqueó o solo lo tiene nuevamente apagado al teléfono — me dice con desesperación
— Ian acá son las 7:30 de la mañana, eso quiere decir que allá en las Vegas son 3:30 am, ella está dormida aún — le digo para que entienda que es inútil mandarle ahora
— Mándale igual, no sé, el buenos días, solo quiero saber si a ti te marca los dos tildes — me dice y yo suspiro y le escribo a mí hermana
📨 — Hola preciosa, buenos días, ¿Cómo estás? — le mando a mí hermana y enseguida me saltan los dos tildes, el de enviado y el de recibido
Ian al ver los dos tildes, tira su mochila al piso con enojo y frustración, eso significaba que mí hermana lo había bloqueado
— Ian, lo mejor será que te vayas olvidando de mí hermana, ella ya tomó la decisión de comenzar una nueva vida allá en las Vegas junto con ese hombre — le digo para que deje de tener esperanzas donde no las hay
— Simón, yo amo a tu hermana, ¿tantos años enamorado de ella para que todo termine así? — me dice él y justo cuando estaba por responderle llegan Camil y Julieta junto a nosotros
— ¿Ahora te lamentas? Fuiste tu Ian quien empujo a Samira a los brazos de ese hombre — le dice Camil a Ian
— ¿A qué te refieres? — le pregunto confundido
— He recordado lo que pasó esa noche en el casino, estábamos los 6 divirtiéndonos y celebrando y de un momento a otro tú, Ian, desapareciste de al lado nuestro, te busque con la mirada y te vi muy apretado y a los besos con una mujer.
Cuando te vi automáticamente la miré a Samira y ella te veía con tristeza y enojo, fue en ese momento que ella se levantó y se lanzó a los brazos de ese hombre — dice Camil y yo la miro sorprendido, ya que yo aún sigo sin recordar nada
— Eso es imposible, yo jamás hubiera besado a nadie que no fuera Samira, estás mintiendo — dice Ian con enojo
— No, no estoy mintiendo, así fue como pasaron las cosas, de no haber sido por tu estupidez esa noche, Samira jamás se habría casado con ese hombre — le sigue diciendo Camil en tono de reproche
Ian aún enojado, tomó su mochila del piso y se fue para dentro del colegio, yo me quedé aún ahí con los chicos antes de entrar
— ¿Y nosotros? ¿Qué pasó esa noche? ¿Cómo terminamos casados? — le pregunto para que me cuente
— No viene al caso eso ahora, lo nuestro fue un error que jamás se repetirá — dice ella enojada y comienza a caminar para la entrada del colegio junto con Julieta
— La cagaste con ella Simón, dudo que después de lo que pasó, ella te perdone — me dice Santino también caminando para la entrada del colegio
Yo me quedé ahí parado maldiciendome por no poder recordar nada de lo que pasó esa noche y cómo terminamos casados con Camil
Pero en algo tenía razón Santino, lo había arruinado todo con Camil al solicitarle el divorcio de esa manera, como si la sola idea de estar casado con ella me repugnara y es todo lo contrario, amaba demasiado a Camil, solo que me asusté demasiado en ese momento y no supe cómo actuar, y ahora la idea de tener una oportunidad con ella era lejana y no creía que algún día terminara junto a ella
Debía pensar en algo para volver a ganarme la confianza de Camil nuevamente, no podía quedarme con los brazos cruzados, si realmente quería estar junto a ella, debía pensar en un plan para reconquistarla
Con ese pensamiento en mente, me fui del colegio directo al registro civil, conocía gente que por un poco de plata me ayudarían con lo que quería hacer.
Al llegar al registro civil entro y me dirijo a una de las oficinas donde estaba Mateo, el que me ayudaría
La idea era volverme a casar con Camil, pero obviamente tendría que ser un secreto, por lo menos hasta que ella firmara
— Mateo buenos días — le digo llegando hasta él
— Simón, ¿qué te trae nuevamente por aquí? — me pregunta saludándome con la mano
— ¿Recuerdas que hace unos días vine con una mujer a solicitar el divorcio? — le pregunto
— Si lo recuerdo, ¿qué pasa con eso? — me pregunta confundido
— Bueno, me equivoque y la cagué, no quería divorciarme de ella, solo tenía miedo en ese momento — le explicó para que entienda
— ¿Y cómo puedo ayudarte yo ahora? — me pregunta confundido
— Bueno, me quiero volver a casar con ella, pero ella está enojada conmigo así que no aceptará voluntariamente. La idea es que prepares el certificado de matrimonio con nuestros nombres, y al mediodía cuando ella salga del colegio, la traeré con una excusa y la haré firmar sin que sepa que nos estamos casando nuevamente — le explicó yo mí plan
— Simón, no se si puedo ayudarte, si mí jefe se entera me despedirá — me dice nervioso
— Te doy un millón de pesos si me haces este favor — le digo yo y él se queda pensando
— Está bien, hagámoslo — me dice y comienza a preparar el certificado matrimonial
Una vez que lo tiene listo, me lo entrega para que yo lo firme y así lo hago
— Tapa mí firma con un papel o una cinta, ella no lo tiene que ver o sospechara antes de firmar — le digo nervioso y ansioso esperando que mí plan funcione a la perfección
Después de hablar un poco más con Mateo y de contarle más o menos cuál era mí plan, salgo del registro civil y vuelvo al colegio, había perdido una hora de clases, pero al menos no perdería las otras materias que tenía más tarde.
A la salida del colegio decidí poner en marcha mí plan, así que pensé en una excusa para poder llevarla al registro civil sin que sospeche
Parado en la entrada del colegio esperando a que ella saliera, cuandoa la vi salir me acerque a ella rápidamente
— Camil, mí hermana me mandó un mensaje pidiéndome que le retire del registro civil su partida de nacimiento, yo no entiendo mucho de eso, ¿me puedes acompañar? — le digo nervioso esperando que se lo crea
— ¿La partida de nacimiento? ¿Te dijo para que la quería? — me pregunta ella con duda
— No, no me lo dijo, tal vez la necesita por su matrimonio — le digo aún más nervioso
— Si, puede ser, está bien vamos — me dice caminando en dirección a mí auto y yo suspiro de alivio, el primer paso que era llevarla ya estaba completado
De camino al registro civil, ella iba en silencio mirando por la ventana, yo la miraba de reojo y podía notar que se sentía incómoda o nerviosa, ya que no dejaba de jugar con sus dedos
Al llegar al registro civil ambos entramos en silencio y nos dirigimos hacia donde estaba Mateo, este al verme se levanta para saludarnos
— Bienvenidos, ¿En qué puedo ayudarlos? — pregunta haciéndose el desentendido
— Venimos a retirar una partida de nacimiento de la hermana de él, Samira Miller, ella se encuentra en las Vegas en este momento por eso nos mandó a nosotros a buscarla — le dice ella
Yo me mantuve detrás de ella en silencio, solo esperaba que mí plan saliera bien
— Bien, firme aquí por favor — le dice Tomás tapando con otra hoja el título del certificado, ya que en la parte superior decía en letras grandes certificado de matrimonio
— Simón debes firmar tu, ya que es tu hermana — dice Camil mirándome
— Cualquiera puede firmar, ya que la firma es para certificar quien lo retiró — le dice Tomás
— Si, firma tu, es lo mismo Camil — le digo demasiado nervioso
— De acuerdo — responde ella y tomando el bolígrafo, estampó su firma en el papel
Yo sonrió satisfecho y justo en ese momento suena el teléfono de ella
— Es Julieta, voy a ver qué necesita — me dice ella
— Contesta tranquila, retiro el certificado y salgo — le digo yo
Una vez que ella sale del registro civil, Tomás me entrega el certificado matrimonial y yo le agradezco
— Gracias Tomás, la plata ya está depositada en tu cuenta — le digo estrechando su mano en forma de agradecimiento y despedida
Luego de salir del registro civil me acercó hasta el auto donde Camil me esperaba y me subo
— ¿Ya te lo entrego al certificado? — me pregunta ella cuando me ve subir y yo la miro sonriendo
— Claro, ya lo tengo en mis manos y es legal — le digo yo con una sonrisa pícara
— ¿Por qué me miras y te ríes de esa forma? — me pregunta confundida
Yo arranco el auto y comienzo a conducir, para cuando le diga lo que hice ya estemos lejos del registro civil
Varias cuadras más adelante, saco el certificado y se lo entrego. Camil al comenzar a leerlo pega un grito diciendo “que” y me mira con enojo
— ¿Qué carajos es esto Simón Miller? — me dice ella enojada
— Es nuestro certificado de matrimonio mí amor, ya eres mí esposa nuevamente — le digo sonriendo sin dejar de conducir
— Pega la vuelta de inmediato Simón, debemos ir a cancelar este certificado ya mismo — dice muy enojada
— No mí amor, no me divorciare de ti dos veces, está vez es definitivo, eres mí esposa legalmente — le digo decidido sin detener el auto
— ¿Por qué haces esto Simón? Tu fuiste el que se quiso divorciar de mí hace unos días, ¿Por qué haces esta estupidez ahora? — me dice comenzando a llorar
Yo me orillo a un costado de la calle y detengo el auto, luego me giro quedando de frente a ella y la tomó de las manos
— Lo siento Cam, lo siento tanto, se que fui un idiota hace unos días atrás, sentí mucho miedo cuando supimos que nos habíamos casado, y más Ian y Santino gastandome bromas, y me asusté aún más, pero la realidad es que te amo Cam, me senti miserable después de divorciarnos y sabía que si dejaba pasar más tiempo, te perdería para siempre. También sabía que si te decía para que íbamos al registro civil te ibas a negar, por eso te mentí — le digo mirándola a los ojos — Te amo Cam, y no me importa gritarlo a los cuatro vientos y que todos se enteren — continúo diciéndole
— ¿Por qué juegas así con mis sentimientos Simón? — me dice ella sin dejar de llorar
— Perdóname mí amor, dame otra oportunidad y está vez no te fallaré, te lo prometo, te amo y quiero que estemos juntos — le digo y ella me abraza aún llorando
— Yo también te amo Simón — me dice abrazándome
Después de unos minutos abrazados y ella más calmada, nos separamos un poco, la tomó de las mejillas y la beso tiernamente
Esta vez estaba dispuesto a hacer las cosas bien, y el segundo paso sería irnos a vivir juntos .
Simón ...
Camil ...