Jimena una joven de un pueblo de España vieja a los Estados Unidos en busca de un sueño y una vida próspera, allí luego de estudiar comienza a trabajar para Gabriel, un hombre con un oscuro pasado que logra captar su atención, acompañemos a Jimena para ver qué le depara el destino en esta ocasión
NovelToon tiene autorización de Dayma Sánchez Pérez para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 15
Al otro día como de costumbre el señor Sun vino por nosotros al hotel, yo ya esperaba a mi jefe con todo listo en el lobby y él no tardó mucho en llegar, tomamos asiento en el auto uno al lado del otro y aunque no fue muy comunicativo conmigo en el viaje, algo había cambiado en él con respecto a mí, lo sentía. Ese día en la empresa de moda el trabajo fluyó de maravilla, ya como habíamos limado asperezas entre nosotros todo iba a mejor en el trabajo, teniendo mucha comunicación entre ambos y se notaba el cambio laboralmente hablando.
Ya me hablaba mirándome a la cara, era un gran avance, al principio pensaba que tenía algo raro, ya veo que no era eso, incluso ya pedía mi opinión en lo que hacía, nos funcionamos como un gran equipo ese día, mientras él fotografiaba, yo hacía varias entrevistas a los empleados para tener más información, el trabajo del día fluyó tan bien que terminamos todo en una mañana.
Almorzamos allí, mientras lo hacíamos seguíamos conversando, de pronto mi jefe tenía interés en conocer mi vida y hacia mil preguntas las cuales intenté responder lo más natural posible, pero él cambiaba de tema cada vez que yo le hacía una sobre si vida, así que me mantuve al margen. Está vez cuando terminamos de comer, no regresamos con el señor Sun al hotel, sino que mi jefe pidió un taxi para ambos, me dijo que tenía una sorpresa para mí.
Incrédula y sin entender lo que ocurriría lo seguí, monté en el taxi entusiasmada por conocer de qué se trataba la sorpresa, luego de un rato el taxi se detuvo frente a un centro comercial el Starfield COEX, por mi cabeza pasaron millones de teorías sobre por qué me traería a un centro comercial, pensé que me vestía mal, no acordé a lo que él aspiraba y me había traído para indicarme la que debía comprar, luego pensé que tal vez era para ayudarlo a comprar algún presente a su novia oculta que de seguro la tenía, ya que iba sobrado de guapo.
Puse mis pensamientos en stop y lo seguí, al entrar no podía creer lo q veía, dentro del centro comercial había una gran biblioteca.
- Te gusta, me dijo.
- Me encanta, dije
- Sabía que te gustaría por eso pensé en ti y quise mostrarte el lugar.
No podía creer que recordara que estudié bibliotecología y se haya tomado el trabajo de mostrarme, era una bella función de un centro comercial con una librería de dos plantas, con estantes de trece metros de altura, anduve por el lugar cómo niña pequeña, indagué en cada rincón, incluso me tome varios selfies para luego enviarlo a mis padres y Claudia y vieran tan impresionante idea.
Luego fuimos a por unos helados antes de regresar al hotel, de vez en cuando notaba que me miraba fijo, a veces hasta sonriendo, era un poco bipolar él, pensaba, debido a sus cambios de humor, lo mismo me transmitía que la pasada bien en mi compañía cómo pasaba a un estado triste y melancólico.
Le agradecí tanto por mostrarme el lugar en el regreso al hotel que hasta se sonrojó, estaba feliz de que me gustara lo sé, era un bello gesto de su parte, se podía notar su nobleza y yo creyendo que no le importaban sus empleados, esto demostró que estaba equivocada. Regresamos en taxi al hotel, nos despedimos y fuimos casa uno a nuestras habitaciones, se notaba que mi jefe no sentía lo que yo por él, solo era una persona buena, pasándolo bien en compañía de otra.
Ingresé a mi habitación y tomé un baño relajante, pedí la cena hoy no saldría de aquí, aproveché el resto de la tarde noche para ir clasificando todo el material para la elaboración del sitio, hice un archivo y varias copias. Luego cómo de costumbre llamé a mis padres estuve casi todo el tiempo hablando de la biblioteca del centro comercial, le tuve que enviar las fotos para que me creyeran, estaban contentos por mí y lo que había conseguido y yo feliz por tenerlos a ellos, una familia que me apoya y motiva incondicionalmente en todo.