La Amante Del CEO

Observaba con un deje de satisfacción cómo los acontecimientos se desarrollaban según lo planeado. Jang y Seung-ho habían logrado cumplir exitosamente con su parte del plan, dejando a Chen, Sol y Mina completamente vulnerables.

Recostado en mi sillón de cuero, entrelacé los dedos sobre mi regazo, sintiendo una oleada de triunfo. Después de tantos años de ver a Chen ascender en la compañía, finalmente había llegado el momento de ajustar cuentas.

Recordaba con claridad el día en que ese joven ambicioso había ingresado a Corporación Park. Su talento y determinación eran innegables, lo que le permitió escalar rápidamente hasta convertirse en uno de los ejecutivos más importantes. Pero su ascenso también había despertado mi envidia y mi resentimiento.

Mientras Chen ganaba más poder e influencia, yo me sentía cada vez más relegado y menospreciado por el consejo. Mi propia carrera se había estancado, y la llegada de ese joven prodigio solo empeoraba las cosas.

Entonces, cuando Chen comenzó a relacionarse sentimentalmente con Sol, supe que era mi oportunidad. Esa relación era una amenaza para mis propios planes de hacerme con el control de la empresa.

Fue entonces cuando me acerqué a Jang, un viejo conocido mío con una sed de venganza similar a la mía. Juntos, trazamos un plan meticuloso para destruir a Chen y Sol, aprovechándonos de sus debilidades y de los celos que yo sentía.

Ahora, mientras observaba cómo Mina era detenida y acusada de corrupción, no pude evitar sonreír con satisfacción. La mejor amiga de Sol había caído en nuestra trampa, y eso solo haría que Chen y Sol se sumieran aún más en la desesperación.

Pude imaginar sus rostros descompuestos, su impotencia al ver cómo todo se les escapaba de las manos. Después de tanto esfuerzo por mantener su relación a flote, ahora se enfrentaban a la ruina total.

Me puse de pie, alisando mi traje con elegancia. Era hora de dar el golpe final.

Salí de mi oficina y me dirigí a la sala de juntas, donde el resto del consejo me esperaba. Todos me miraron con expectativa, conscientes de que algo importante estaba por suceder.

- Caballeros - comencé, con una voz grave y solemne - Tengo noticias que compartir con ustedes.

Los demás directores se inclinaron hacia adelante, prestando atención a mis palabras.

- Después de una exhaustiva investigación, hemos logrado reunir pruebas contundentes en contra de Chen y Sol - revelé, con un tono triunfal - Sus actos de corrupción y abuso de poder han quedado al descubierto.

Hubo una pausa momentánea, mientras los demás asimilaban mis palabras. Luego, uno de los hombres más veteranos del consejo intervino.

- ¿Qué significa esto, Director Park? - preguntó, con el ceño fruncido - ¿Están usted y el señor Jang detrás de todo esto?

Lo miré con una mirada fría y calculadora, sin inmutarme ante su acusación.

- Señor Kim, le puedo asegurar que todo lo que hemos hecho ha sido en pro de los mejores intereses de la compañía - respondí, con una falsa expresión de seriedad - Chen y Sol representaban una amenaza para Corporación Park, y hemos actuado en consecuencia.

Otro de los directores, el señor Choi, intervino con cautela.

- Pero, Director Park, ¿no cree que esto es demasiado drástico? - cuestionó, con preocupación - Después de todo, Chen ha sido uno de nuestros mejores ejecutivos durante años.

Levanté una mano, deteniendo su discurso.

- Señor Choi, entiendo su preocupación - dije, con una expresión conciliadora - Pero les aseguro que hemos considerado todas las opciones y que esta es la mejor decisión para la compañía.

Los miembros del consejo intercambiaron miradas, algunos de ellos aún parecían dudar. Pero yo sabía que, con el peso de las "pruebas" en mi poder, no tendrían más remedio que aceptar mis términos.

- Entonces, ¿qué propone que hagamos? - preguntó el señor Kim, con resignación.

Sonreí con satisfacción, consciente de que había ganado la batalla.

- Propongo que procedamos a destituir a Chen de su cargo y que se le inicie un proceso judicial por sus actos - declaré, con firmeza - Y en cuanto a Sol, creo que lo mejor será que se mantenga alejada de la empresa por el bien de su reputación.

Algunos de los directores asintieron con cautela, mientras que otros parecían aún reacios a aceptar mis decisiones.

- ¿Y qué hay de la señorita Mina? - intervino el señor Choi, con preocupación - Hemos recibido informes de que también está siendo investigada.

Asentí, satisfecho de que mencionara ese detalle.

- Así es, señor Choi - confirmé, con una expresión grave - Lamentablemente, la señorita Mina también parece estar implicada en este escándalo. Por lo tanto, sugiero que se mantenga alejada de Corporación Park hasta que su situación se resuelva.

Los directores intercambiaron miradas, algunos de ellos parecían incómodos con la idea. Pero sabía que, en última instancia, terminarían aceptando mis decisiones.

Después de todo, yo era el Director Park, el hombre que había guiado a Corporación Park hacia el éxito durante años. Y nadie podría cuestionar mi autoridad.

Con una sonrisa triunfal, me puse de pie, dando por finalizada la reunión.

- Entonces, está decidido - declaré, con un tono resuelto - Procederemos de acuerdo a lo que he expuesto. Que se le informe a Chen y Sol de inmediato.

Los demás directores asintieron, resignados, y se dispusieron a cumplir con mis órdenes.

Mientras me dirigía de regreso a mi oficina, no pude evitar sentir una oleada de satisfacción. Finalmente, había logrado mi objetivo. Chen y Sol habían sido derrotados, y yo me había erigido como el indiscutible líder de Corporación Park.

Nada ni nadie podría detenerme ahora. Era el amo y señor de todo, y nada ni nadie se interpondría en mi camino.