Un Bebé Oculto

--¿Entonces no lo hiciste? -pregunto Iván mientras me veía sollozar

--No -respondí- No pude hacerlo

--Hiciste lo correcto

--Entonces...¿Te quedarás con el bebé?

--Si -seque mis lágrimas- Me quedaré con el bebé

mis amigos se vieron entre ellos y luego sonrieron

se veían felices

--¿Le dirás al vicepresidente?

--No lo creo, él dijo que no le gustaban los niños y que no quería tener hijos porque no quería gastar la mitad de su fortuna en ellos

--No te preocupes -Izan me tomo de las manos- Nosotros estaremos contigo. Créeme que no estarás sola, yo te ayudaré a criar y amar profundamente a ese bebé

--¿De qué estás hablando ahora? -inquirió Iván

--Quiero ayudar a Roma a cuidar a ese bebé como si fuera mi propio hijo

--Qué tonterías dices -reí- Ya deja de bromear, ya somos adultos

--No estoy bromeado -mostró un semblante serio

--¿Es...estás hablando en serio? -me tembló la voz

no podía hablar en serio

era imposible que un hombre decidiera hacerse cargo de un bebé que ni siquiera era de él

--Cómo lo dije antes, este asunto es solamente mío -dije- No quiero involucrar a nadie más

--¿Y qué harás cuando los síntomas del embarazo sean más evidentes?, ¿qué le dirás a tu jefe cuando tengas que pedir un permiso para ir al obstreta?, ¿y si tu vientre se abulta y él lo nota?

--No lo sé. Realmente no se que haré. Tengo que seguir trabajando en la empresa durante un mes y tres semanas más, así que, aunque se que en ese tiempo mi vientre no crecerá tanto, no sé cómo ocultaré los síntomas y todo eso

--¿El vicepresidente aún no consigue a otra secretaria que ocupe tu lugar?

--No me ha informado de nada, supongo que aún no encuentra a una buena candidata

--Debes salirte de esa empresa lo antes posible -comento Iván- Con tu embarazo no puedes seguir trabajando en exceso y tampoco puedes seguir usando tacones tan altos, ¿y si te llegas a caer?

--Eres un maldito exagerado, se te olvida que he caminado en tacones todos los días durante los últimos años, soy una experta

--Aun así siento que es peligroso, no solo debes cuidar del bebé, sino también de ti

--Estaré bien - traté de tranquilizarlo- Le prometí a este bebé que cuidaria de el hasta el último de mis días, y así será, cumpliré mi palabra y seré una buena madre...

.......

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\*\*Vicepresidente Morgan\*\*

Mis padres sonrieron emocionados

su rostro estaba iluminado y lleno de alegría

sin duda la noticia los había puesto de muy buen humor

--Tienes que casarte con ella -habló mi padre

--No quiero hacerlo -me negué- Aura no es la chica a la que amo

--Pero es la futura madre de tu hijo -argumento- ¿Acaso no quieres que el bebé que viene en camino nazca dentro de una familia amorosa?

--Estoy seguro de que, aunque me casé con ella, no habrá amor entre nosotros

--Pues lo siento Evan, pero es lo mejor que puedes hacer -aseguro mi padre- Tener a ese bebé fuera del matrimonio solo podría en ridículo a la familia Morgan, así que, quieras o no, te casaras con Aura

no pude evitar maldecir en mi interior a Aura

antes estaba deseoso de saber quien era la chica con la que había dormido después de la cena de caridad

pero ahora que se que esa chica se trata de Aura, lo único que quiero hacer es regresar el tiempo atrás

los análisis de sangre que le hicieron en el hospital arrojaron que tenía cuatro semanas de gestación

las cuentas cuadraban

todo encajaba

ese bebé era mío

y tenía que hacerme cargo de él o de ella

ahora con el embarazo, tendría que casarme con ella, llevarla a vivir a mi casa y soporta su horrible voz todos los jodidos días de mi vida

todo estaba arruinado.