Jesica, es una chica de una familia media, cuando su madre enferma se ve obligada a comenzar con un trabajo como novia por contrato donde conocerá a Max quien la llevará a un mundo de mentiras y dolor
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sexi
En el interior de la casa se reunía la familia de Max, entre ellos se encontraba Joseph, el primo de Max con su novia Micaela, así como otra de sus primas, Eleonora. Esta última había extendido una invitación a una chica llamada Luna, una mujer realmente atractiva que despertaba un notable interés en Max y a otro joven Camilo.
¡Bienvenidos! Espero que tengamos la oportunidad de conocernos mejor, expresó Cristen, la madre de Max, mientras tomaba la mano de Jessica con una actitud amable y acogedora.
Gracias, yo también espero lo mismo, respondió Jessica, esbozando una sonrisa cálida.
¡Hola, mamá! ¡Qué delicioso huele todo! exclamó Max, acercándose a Cristen y dándole un cariñoso beso en la frente.
Vayan a instalarse y a refrescarse un poco, porque el calor está bastante fuerte, comentó Cristen, sonriendo con amabilidad mientras los observaba.
Uno de los hombres tomó las maletas de ambos y Max y Jessica subieron a la habitación donde se alojarían.
—La cama es realmente grande, así que no tendremos ningún problema —comentó Max, con una sonrisa mientras se acercaba a la cama—. Tú puedes cambiarte primero, ponerte tu traje de baño, y yo me daré un baño rápido para que podamos bajar juntos a la playa.
Mientras decía esto, Max comenzó a desabrocharse la camisa, dejando al descubierto su abdomen bien definido, lo que hizo que Jessica, algo sonrojada, apartara la mirada para no fijarse en él.
Jessica abrió su maleta y se sintió completamente paralizada al ver que todos los trajes de baño que le habían empacado eran increíblemente pequeños.
—¡Por Dios! ¡Esto no me va a cubrir nada! —exclamó Jessica, claramente nerviosa, mientras examinaba los diminutos trajes de baño que tenía frente a ella.
Comenzó a buscar en toda su maleta, revisando cada rincón con la esperanza de encontrar algo que le gustara más, pero no tuvo suerte. No había ningún otro traje que le satisfaciera, así que se dio cuenta de que solo podía optar por esos pequeños trajes. Con un profundo suspiro de resignación, decidió entrar al pequeño vestidor que había en la habitación para cambiarse.
Max salió del baño, se secó rápidamente con una toalla y se puso un pequeño short de playa que había dejado preparado.
—¿Estás lista? —preguntó Max a Jessica, con preocupación en su rostro por el fin de semana que le esperaba.
—Aún no, pero enseguida te alcanzo —respondió Jessica, mientras se miraba al espejo con algo de nerviosismo, ajustando su peinado.
—Está bien, pero no tardes demasiado —dijo Max, saliendo de la habitación y dejando a Jessica a solas con sus pensamientos.
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Hola, creí que no vendrías primo.!_ dijo Joseph acercándose a Max.
Ni lo digas esto es una maldita locura, espero y Jessica haga su trabajo bien está vez mi padre no estaba convencido de nuestra relación.!_ dijo Max nervioso mientras le daba un sorbo a su bebida.
Tranquilo, ella lo hará es su trabajo y con lo que le estás pagando, no tendrás ningún problema además tus padres se irán después de éste fin de semana.!_ dijo Joseph.
Ambos se dirigieron hacia la orilla de la playa, donde la brisa marina acariciaba sus rostros.
—¡Hola, Max! ¡Qué gusto verte aquí! —exclamó luna, mientras una sonrisita seductora se dibujaba en sus labios.
—Hola, yo también pienso lo mismo —respondió Max, sonriendo y recorriendo con la vista cada rincón de su figura.
—He oído que vienes acompañado, pero no dudes en buscarme si te apetece divertirte un poco —añadió luna, acariciando suavemente los brazos de Max con una mirada que sugería complicidad.
En ese instante, Jessica salió de la casa. Max quedó boquiabierto al instante; su belleza era tan deslumbrante que, con su figura estilizada y su aire de diosa sensual, capturó la atención de todos a su alrededor.
Joseph, miró a Max sonriendo al ver a Jessica.
Max, miró a Jessica sin poder apartar sus ojos llevaba puesto un top blanco y un bañador gris que lo dejaba sin alimento.
Hola cariño.!_ dijo Jessica con una sonrisa sutil, mirando a Max, que era realmente sexi sin camisa.
Primo no nos vas a presentar a tu novia.!_ dijo Eleonora prima de max acercándose a ellos.
Ella es Jessica.!_ dijo Max tomandola de la cintura sintiendo su piel desnuda y su suavidad.
Hola, Jessica encantada de conocerte.!_ dijo Eleonora amablemente.
Hola, Jessica.!_ dijo Camilo besando la mano de Jessica volviendo el momento incómodo.
Hola, yo soy luna .!_ dijo ella algo molesta por su belleza de Jessica teniendo que saludarla solo para no darse a notar lo celosa que estaba.
Hola, a todos.!_ dijo Jessica sonriendo.
Que les parece si jugamos voleibol._ dijo luna entusiasmada.
Claro yo seré del equipo de Jessica dijo Camilo rápidamente sonriendo.
Yo seré del equipo de Max, dijo luna.
Max, miró a Camilo pues se podía notar sus intenciones y eso le molestaba.
todos caminaron para poder jugar el equipo estaba conformado por dos bandos el de Max y el de Jessica.
Jessica era realmente competitiva así que no se iba a dejar ganar tan fácilmente, Max miraba a Jessica con enojó cada vez es que ya generaba un punto y festejaba con Camilo y Luna.
Una vez que acabo el juego Jessica sonrió mirandolo pues parecía molesto por haber perdido, pero no le dió importancia.
Una vez que se acabó el juego, Jessica camino asta Max para poder calmar el momento Pero el la recibió con un beso tan apasionado que ambos se sintieron raros.
Max no quería parar el beso Pero lo hizo al sentirse raro.
Buen juego.!_ dijo Max mirándola agitada al igual que el, mientras Camilo los miraba.
Tú también, dijo Jessica, tratando de mantener la calma en su voz.
Joseph, los miró y sonrió.
Es hermosa, la novia de Max.!_ dijo Micaela la Novia de Joseph, al ver los besándose.