Pétalos De Rosas (Omegaverse)

Alyosha aún miraba al chico inconsciente en su cama, la puerta de su habitación fue tocada y se dirigió abrirla, encontrando allí a Leo

- Joven el médico ya llegó

- ¿Y por qué no lo haces pasar?

Leo se retiró y al rato entró un hombre de unos treinta años, llevaba una bata blanca y un pequeño portafolio. Alyosha le señaló al chico en la cama y este se acercó a tomarle el pulso y hacerle una pequeña revisión

- ¿Dice que entró en celo y se desmayó?

- Si, eso pasó

- Ya veo, le voy a inyectar un inhibidor para que le pase

- ¿No le causará efectos secundarios?

- Esperemos que no

- Por qué si es así seria mejor esperar a que despierte para darle uno vía oral

- No creo que eso pase, esté tranquilo

No podía ocultar su preocupación pues sabía que tan horrible eran los efectos de esas inyecciones. Vio como le inyectaba el líquido de a poco

- ¿Algún motivo por el cual entró en celo?

Alyosha negó

- Estaba en su ciclo

- Ya veo, su desmayo parece como si lo hubieran causado, listo ya está

- ¿Estará bien?

- Si, escuche bien, si presenta malestares adversos comuníquese conmigo de inmediato

- ¿Cuándo despertará?

- A causa del desmayo y por el inhibidor que actúa como calmante le cálculo que despertará mañana

- ¿Tanto tiempo?

- Si, ahora mismo solo duerme, y es lo mejor, trate de no liberar feromonas cerca de él o de que alguien más lo haga, puede ser malo

- Entiendo, ya le pago

Al rato volvió a entrar y lo tapó bien para que no sintiera frío, puso a un nivel bastante bajo la calefacción y salió. Al rato llegó Adrik

- Volví, hola Alyosha

- Hola hermano

- ¿Y tu ratoncito?

- Dijo que tenía migraña

- Que mal, ¿querrá comer?

- Yo le cocine algo se tomó una pastilla y se fue a dormir

- Eso es horrible

- Si, dejémoslo descansar

- Vale pidamos comida a domicilio, se me antoja sushi

- Igual, llama

Ambos comieron y recogieron el desorden, si Adrik no conociera al mil por ciento a su hermano diría que estaba bien, pero como lo conocía tan bien como si fuese él mismo, sabía que algo pasaba, su voz era tan neutral, su mirada estaba perdida y por si fuese poco vaso de whisky que acababa era vaso nuevo que servía

- ¿Te pasa algo?

No iba a delatar a ese mocoso, solo negó y le dio un leve golpe en el brazo a su hermano sonriente

- Tranquilo, te preocupas mucho

- Tú me preocupas

- Gracias, sírvete un whisky acompáñame

Al rato supo distraerse en lo que hablaba con su hermano, al caer por completo la noche subió a su habitación para verificar al Omega, dormía plácido en aquella cama que era su cama, aún tenía su uniforme pero obviamente no se lo iba a quitar, pero se tomó la libertad de quitar sus zapatos

- Descansa mentiroso

Iba a dormir en la habitación de Yury pero al final decidió quedarse allí para estar al pendiente de ese mentiroso

🌹🌹🌹.....

Yury comenzaba a despertar ya había un poco de claridad en el lugar, tal vez ya era de mañana, vio debajo de las sábanas dándose cuenta que estaba con el uniforme, su vista era algo borrosa

- Mi cabeza

- Ya despiertas, buenos días

Miró hacia el gran ventanal viendo al ruso de espaldas, al girar estaba serio, y algunos recuerdos vinieron a su cabeza del día anterior, ya sabía que era Omega tal vez por eso su rostro tan serio

- ¿Te sientes bien?

- Solo duele algo mi cabeza

- Que bien ¿puedes ponerte de pie?

- Si- suspira y se sienta- Alyosha disculpa

- Supongo que no importa, no te preocupes, cuando gustes puedes ir a tu habitación si te incomoda

Claro que no le incomodaba, al contrario, pero se paró tomó sus zapatos y caminó hacía su habitación, su vista poco a poco se adaptaba, fue descubierto y de la peor manera, y Alyosha no quería escucharlo. Decidió ir a su escuela, al salir vio a Adrik sentado en la sala

- Hola niño bonito ¿cómo seguiste?

- ¿Cómo seguí?

- Si, Alyosha me contó que ayer llegaste con migraña, ¿ya todo bien?

- Si, ya me pasó, bueno ya me voy, adiós

- Vale cuídate

Quiso despedirse de Alyosha quien venía bajando las escaleras pero este lo ignoró, la verdad no se sentía nada bien al ser tratado así por aquella persona que para él era especial

Al llegar a la escuela estaba bastante apagado, hablaba poco y de vez en cuando se perdía en sus pensamientos, sus amigos querían preguntar pero se veía tan mal y lo que pensaron era que tal vez había sido rechazado, en el receso estaba en la azotea de la escuela algo triste

- Hola Yury ¿todo bien?

- Hola Shuang, si.... ahh bueno la verdad no, nada está bien

- ¿Le dijiste Alyosha la verdad?

- Ni siquiera alcancé a hablar, y se enteró de la peor manera

- ¿Le contaron?

- Entré en celo

Su voz fue débil quería mantener la compostura pero fallaba, sentía ganas de llorar al recordar las expresiones tan serias del ruso

- ¿En serio? Eso es malo, muy malo ¿pero intentó tocarte?

- No, él me cuidó. Pero se enojó, su mirada era tan fría nunca lo había visto tan enojado, le mentí y no me va a perdonar

Fue abrazado por su amigo como un consuelo, acariciaba su cabeza con cariño

- Por favor no le cuentes a Miko, siento que se preocupa mucho por mi

- ¿Por qué no vas a contarme niño?

La puerta de la azotea se abrió entrando el amigo de ambos omegas

- Ah Miko- baja la cabeza- tú siempre te preocupas mucho por mi, deberías preocuparte por ti de vez en cuando

- Nada de eso, dime ¿te rechazó?

- No, solo estaba serio conmigo

- Entonces aún no te rechaza, niño explícale tus razones, te tiene que escuchar

- No quiere ni verme

- Pero si vas donde el no podrá esquivar tu presencia antes de escucharte

- Shuang tiene razón, si te esquiva entonces estará siendo mal educado

- No lo sé, ya no quiero sentirme así

Escondió su rostro en sus rodillas y sus amigos lo abrazaron

- Entonces mata ese sentimiento, habla con él, solo así sabrás si en verdad vale la pena

Yury sabía que Alyosha no quería verlo y tampoco escucharlo, pero no se iba a dar por vencido iba hablar con él a ver que pasaba

Las clases transcurrieron con normalidad, al final quedaron los tres en el club de repostería haciendo unas donas, al terminar se llevaron algunas para la casa y otras las comieron allí, salieron a la estación para volver a casa

- Nos vemos

- Buena suerte Yury

Al llegar a casa de los Kuznetsov entró notando un completo silencio, dejó la mochila en su habitación y fue a la del ruso, entró y todo estaba solo, la calefacción estaba apagada y el lugar estaba algo frío, entró pero no estaba por ningún lado, se iba a ir cuando salió del baño

- Alyosha

- ¿Qué pasa?

- Nada, ya me iba, disculpa

Tenía tan solo una toalla que tapaba de su cintura para abajo dejando su figura al descubierto, el chico salió sin ser capaz de decirle que quería hablar con él. Cuando el ruso ya se vestía su puerta fue tocada otra vez

- Adelante

- Lo siento, Alyosha ¿podemos hablar? No tomaré mucho tiempo- lo mira- ¿vas de salida?

- No es nada importante, de hecho yo también quería hablar contigo

- Si gustas puedes empezar tú

- Solo es una pregunta, ¿por qué mentiste?

El Omega miró al piso, tragó saliva y aclaró su voz

- Juro que nunca pensé en mentir, pero cuando empezamos hablar me di cuenta que eras el típico alfa mujeriego..... Yo, yo no quería que me vieras como todas las omegas que habían estado en tu cama, y todo estalló cuando peleaste con esa chica, dije que era Beta por que aunque discutíamos llegué a tenerte cariño y quería ser igual para ti.... y lo logré, pero tú solo le tomaste cariño al Yury beta, no al Omega. Y pensé en contarte pero no quería que me esquivaras y me vieras como al resto

- Me tuviste desconfianza

- No te tuve desconfianza, solo desconfiaba de mi mismo, Alyosha perdóname, te voy a entender si ya no hablamos como antes pero solo quiero escuchar que me perdonas

El chico agachó la cabeza, el ruso solo suspiró y pegó en su frente con su dedo como en un principio

- Pero no llores princesa, de todas las personas que he conocido tú siempre vas hacer diferente, y especial, sabes nunca alguien me había dicho que no quería perder mi cariño

- Tonto ruso- le sonríe

- Jum eres especial ratoncito mentiroso ¿y ya no hay más mentiras?

- No

- ¿Seguro?

- Seguro

- Y tranquilo no voy a tratarte igual a otros omegas, y tampoco seré diferente a mi trato anterior

- ¿De verdad?- se emociona

- Si, de verdad- acaricia su frente- bueno y ¿cómo te fue en la escuela?

- Bien

- Me alegra- se acuesta en la cama

El chico solo miraba cada uno de sus movimientos, parte de su cabello aún húmedo caía sobre su frente, ponía una mano en su pecho y sus ojos dorados miraban al techo, Yury se acomodó en la cama y la mirada fue dirigida hacia él

- Creo, que yo también te debo una disculpa

- ¿Por qué?

- Por mi culpa entraste en celo

- Ah eso- se sonroja- no te preocupes

El ruso sonrió ante el rostro todo rojo del chico, quien le dio un leve golpe en el brazo

- Oye ratoncito ¿quieres hacer algo o tienes mucha tarea?

- ¿No ibas a salir?

- No era importante, de hecho sólo iba a distraerme por que odio estar encerrado

- Ah oki

- Si, ¿princesa si yo te invito a salir irías?

- ¿Tú invitarme a mi?

- Si, será solo para distraernos

- ¿Tú y yo?

- Si, tú, ni modo que me lleve al fantasma de la casa mocoso ¿vas o no vas?

- Tonto sarcástico, y no soy un mocoso

- Ah disculpe señor ratón

- Disculpa aceptada

- ¿Vamos?

- ¿Me dejas cambiarme?

- Si, ve, te espero en la sala

Yury fue a su habitación a quitarse su uniforme para ducharse, al salir se vistió como siempre jeans, camisa, un buzo y tenis

- Listo ¿cómo quedé?

- Que ratón más feo

- ¡Oye!

- Mentira, estás lindo ¿te dije que me vuelves loco?

- Si si, y yo te dije que fueras al psiquiatra

- Que frío ¿desde cuándo hay ratones del ártico?

- Desde hoy

Fue tomado de los hombros y sintió un beso en la frente dejándolo sin palabras

- Vámonos

Fue con él y subieron al auto de Alyosha, bastante lujoso pero el más sencillo de todos

- ¿Quiere ir a un lugar en especial?

- El que gustes

- Bien, vamos a divertirnos un poco

Al pasar unos veinte minutos de camino llegaron a una especie de bar, Yury admiró el lugar, Alyosha se dirigió al parqueadero y estacionó el auto, salió junto a Yury y caminaron al lugar

- Yo- sé detiene- no puedo entrar ahí

- ¿Por qué?

- Eso es un bar, y yo aún soy menor

Alyosha lo tomó de la mano y le dedicó una sonrisa

- Tranquilo, es un bar restaurante, a parte vienes conmigo y nadie que venga conmigo se queda afuera

- ¿Seguro?

- Si, ya vamos

Entraron y la música de fondo era suave, nada escandalosa pero si se escuchaba por el lugar, el guardia de la entrada no puso nada de resistencia en dejarlos pasar, Alyosha tenía a Yury de la mano para no perderlo y se dirigió a la barra con él

- Muy buenas tardes

- Buenas tardes

- Ratón ¿qué vas a pedir?

- Ah ¿no hay carta?

- Si

Al rato pidió algo ligero de comer, Alyosha también pidió una picada de carnes con verduras salteadas y papas fritas, de bebida Alyosha pidió un mojito y a Yury le pidió un cóctel solo de frutas

- Está delicioso

- ¿Cierto que sí?

- Si, este lugar es muy tranquilo, llevo años viviendo en Corea y no conocía este sitio

- Ah bueno ya lo conoces

Al rato Alyosha pidió un frappe de ron con coco y Yury terminaba de comer

- Yo pruebo ese frappe

- No, eso es malo para ti

- No seas malo, dame

- Un poquito, abre la boca

El chico abrió la boca y Alyosha llevó el pitillo a su boca

- Que rico, yo quiero uno, pero de café o ¿no hay de chocolate?

- No, no hay para mocosos

- Alyosha- hace carita de cachorro- por favor, es más hago lo que quieras

- ¿Lo que yo quiera?

- Si, solo no te pases

- Jum va, entonces pide uno

- Eres el mejor

- ¿Solo cuando te regalo?

- Si

- Que malo

Al rato ambos solo hablaban y de vez en cuando Alyosha hacía reír o "enojar" al albino

- Creo que ya tengo de nuevo tu confianza tonto

- Y yo la tuya, pero te voy a traicionar

- Jsjs ¿y eso?

- Te voy a llevar a una discoteca

- ¿A mi?

- Si, a ti

- ¡Yo nunca eh ido a una discoteca! ¡Que emoción conoceré una discoteca!

- Jsjs pareces un niño cuando te emocionas

- Es que si estoy feliz, ¿y si puedo entrar? Soy menor lo recuerdas

- Y eso que, ya te lo dije mientras vengas conmigo nunca te quedarás afuera ¿vamos ya?

- Por favor

- Vale, ve saliendo voy a pagar la cuenta

- Si, ¿las llaves del auto?

El ruso se las lanzó y el chico las atrapó para irse a buscar el auto, estaba feliz jamás había pisado uno de esos sitios, ¿cómo serían? Le preguntaría a Alyosha en el camino, abrió el auto y esperó al ruso dentro

- Listo, nos vamos ratoncito

- Si

Alyosha encendió el auto y salieron del sitio, Yury iba bastante emocionado y eso era lindo a ojos del ruso

Continuará.....

Jsjs no quería dejarlos enojados por mucho tiempo, me gustan juntitos. 🤭 Espero les guste este es mi estilo de escritura