Robé Tu Destino

Tatiana: *sostengo con fuerza la toalla que me cubre, no tengo miedo. Pero soy consciente de mi condición y de como me hace ver y me da vergüenza, no es una visita agradable después de todo*.

Nahtaniel: *su rostro refleja lo que piensa y eso solo me hace sentir tristeza. Para mí es alguien importante, independientemente de como luzca*.

Draven: [no debe haber sido fácil para ella vivir de esa manera.]

Nahtaniel: *me levanto y me giro dándole la espalda*.

Tatiana: *se ha dado cuenta de lo que me incomoda, me apresuro a vestirme poniéndome la ropa más holgada que tengo*. ¿Por qué estás aquí?, no te conozco.

Nahtaniel: ¿tienes miedo?

Tatiana: no, fuera de mis sueños nunca he sentido miedo.

Nahtaniel: *no miente*. Me creerías si te digo que soy un hombre lobo.

Tatiana: no lo sé, ¿lo eres?, ¿y eso que tiene que ver conmigo?. ¿Cómo entraste a mi habitación?

Nahtaniel: *está a la defensiva. Señalo la ventana*, entré por ahí. No tengo tiempo para explicarte toda esta situación, pues es algo complicado pero necesito que vengas conmigo.

Tatiana: ¿por qué lo haría?, ni siquiera sé de dónde saliste y ¿por qué yo?. Acaso es alguna broma o una apuesta rara para burlarse de la enferma del pueblo. Si es así solo déjame en paz.

Nahtaniel: no es nada de eso, pero si no vienes conmigo no podré sacarte otra vez de ese lugar. Fue muy difícil hacerlo.

Tatiana: ¿qué has dicho?

Nahtaniel: yo puedo alejar tus pesadillas, solo dame una oportunidad.

Tatiana: esa noche, ese aullido, ¿fuiste tú? y anoche estuviste aquí, ¿no fue un sueño?

Nahtaniel: no lo fue, *me acerco hasta envolverla en mis brazos. Se sorprende, pero no me aleja*. Dame la oportunidad de ayudarte.

Tatiana: *me siento pequeña en su abrazo, el olor que emana de el es delicioso, su calor es agradable tanto que me hace sentir somnolienta. Apesar que dormí bien anoche no puedo evitar cerrar los ojos, me dejo llevar por los latidos constantes en su pecho*.

Nahtaniel: *se está quedando dormida, la tomo en brazos y se aferra con fuerza a mi ropa. Se que esta cansada, no quiero ni imaginar por cuánto tiempo estuvo en esta situación. Salgo de la habitación, el ambiente de este piso es raro. Bajo las escaleras con ella, encontrándome con los demás.

Alina: *no ha perdido el tiempo y mirando la chica en sus brazos su condición es peor de lo que pensaba*.

Angélica: *vemos ha un chico bajar con Tatiana dormida en sus brazos, nunca la vimos con tal tranquilidad al dormir*.

Iván: ¿ella estará bien?

Nahtaniel: lo estará, pero debemos irnos y ustedes vendrán con nosotros.

Angélica: *tomo las manos de mi esposo*. Está bien, si pueden ayudarla los acompañaremos, haremos lo que sea por nuestra hija.

Iván: siempre nos hemos sentido impotentes por no poder ayudarla, así que haremos lo necesario.

Esa misma tarde la familia empacó y se marcharon hacia un destino incierto. Aún con el temor de que pasaría y si podían confiar en esos extraños que aparecieron de repente en sus vidas. Pero a pesar de la incertidumbre veían por primera vez en años una luz de esperanza para su hija. Ya que ambos eran conscientes que si su situación no mejoraba moriría. Se adentraron en el bosque con Alina en frente, la maleza, los árboles, las enredaderas, se alejaban. Abriéndoles camino hacia un sendero que antes no existía, al poco rato llegaron a una hermosa mansión donde una mujer los esperaba afuera.

Elena: bienvenidos, sus habitaciones ya están listas. Acompáñeme.

Iván: ¿dónde dormirá Tatiana?

Nahtaniel: conmigo.

Iván: no lo creo.

Alina: es mejor que permanezcan juntos, ella puede dormir con tranquilidad por su cercanía. Mírala en todo el camino no se despertó.

Iván: lo sé, pero...

Nahtaniel: sé lo que le preocupa y no sucederá.

Angélica: debes entender nuestra preocupación. Tatiana es mas frágil de lo que se ve y no te conocemos.

Nahtaniel: solo su cuerpo es débil, pero eso cambiará pronto. Este lugar será de gran ayuda para ella. No se preocupen, moriría antes de dañarla. Así de fuerte es el vínculo que nos une.

Elena: ya se están instalado, ¿fue difícil convencerlos?

Alina: fui un poco brusca, pero no había tiempo. Este lugar a llamado mucho la atención, el rugido de Nahtaniel a agitado el pueblo, ahora más que nunca debemos pasar desapercibidos.

Elena: y aún no hay noticias de Alistar, ¿habrá encontrado a la otra chica?

Alina: no lo sé, espero que sí.

Matías: nada, estos días se han mantenido algo alejados de Verónica pero nada.

Richard: hay mucha calma, tanto que no me gusta.

Alistar: debemos estar listos para desaparecer en cualquier momento.

¿?: ¿qué sucede?, para que me hagas venir aquí Dabria. De todos tu misión es la más fácil, solo debes vigilar hasta que llegue el momento.

Dabria: lo sé, pero las cosas han cambiado Lumiel. He sido descubierta.

Lumiel: ¡¿qué?!, ¿cómo?

Dabria: yo tampoco lo sé. Llegaron dos lobos al pueblo y por alguna razón reaccionan a mi presencia, incluso cuando me oculto.

Lumiel: esto cambia los planes, ¿nada de su compañero?

Dabria: no, llegó un vampiro al pueblo pero no es el mate de esa chica. Su comportamiento también cambió, no se han alejado de ella desde que me descubrieron y ahora parecen descuidarla. Me parece sospechoso.

Lumiel: no me gusta este desenlace. Esto cambia un poco los planes, pero es mejor matarla ahora antes que las cosas se compliquen.

Dabria: no fueron esas las órdenes.

Lumiel: lo sé, pero nuestro señor entenderá. No puede haber contratiempos, es mejor eliminarla ahora antes de que pueda salir de nuestro alcance.

Dabria: ¿cómo lo haremos?

Lumiel: ataquemos de frente no podrán contra los dos. Si antes éramos fuerte ahora lo somos más. Después de que esa persona compartiera su poder con nosotros no muchos pueden hacernos frente.

Eleonor: ¿qué es eso?, siento un gran poder cerca.

Matías: ¿también lo sientes?, sí. *Me asomo por la ventana y dos seres caminan por las calles, no les importa que puedan ser vistos por las personas comunes y por su apariencia son demonios.*

Richard: parece que nos atacarán.

Alistar: vámonos, debemos salir de aquí.

Eleonor: tengo una idea, ya que son dos dividamosnos. Verónica dame tu mano.

Verónica: ¿qué planeas?

Eleonor: ganar tiempo, *hago un corte hasta hacerla sangrar y uso magia para que nuestra esencia sea igual, al compartir sangre es más fácil. Ahora a sus ojos habrá dos de nosotras.

Verónica: eso te pondrá en peligro.

Matías: es nuestro deber protegerte.

Alison: yo iré con Eleonor y Matías.

Richard: cuídate.

Alison: lo sé.

Alistar: vámonos, *nos dividimos todos en un grupo de dos.

Matías: * estamos tensos, listos para empezar con la huída. Discretamente sin que Verónica se de cuenta le doy algo a Richard.*

Richard: ¿qué es esto?. *Por el sigilo con que me lo da no quiere que Verónica lo sepa.*

Matías: sabes también como yo que no todos podremos acompañarlos. Cuando estén lejos o hayan perdido de vista a esos dos, vierte esto sobre Verónica. Borrará su rastro, no durará mucho pero si lo suficiente para que lleguen a un lugar seguro. No te preocupes, yo protegeré a tu esposa. Márchate sin preocupaciones.

Richard: lo dejo todo en tus manos. Salimos por la parte de atrás de la casa, me transformo.

Liam/Richard: sube.

Verónica: *me monto sobre el lobo y partimos a toda velocidad. Mi madre también va sobre Alison y mi padre vuela sobre ellas.

Lumiel: quieren escapar.

Dabria: no lo permitiré, pero ¿por qué siento a Verónica en dos lugares distintos?

Lumiel: intentan engañarnos.