LOS REYES DE LA MAFIA

Coma señorita Isabella el señor Alek, no quiere hacerle ningún daño.

Así, entonces dígame por qué me mantiene aquí en contra de mi voluntad secuestrada, yo a él nunca en mi vida lo había visto como se lo he dicho anteriormente.

Eso yo no se lo puedo responder señorita, tiene que hablar con el señor Alex

Como no puedo más con el olor impresionante de esa comida, le digo a la mujer que debe probarla, que solo así es como yo comeré. Sí quiere que coma tiene usted que probar la comida de lo contrario no pienso comer moriré de hambre.

La mujer solo me da una sonrisa, yo jamás le haría daño señorita, pero si usted quiere yo misma preparé la comida, para que usted coma.

Veo que la mujer prueba la comida de cada uno de los platos, que preparó después le digo que si puede salir que necesito darme una ducha, que más tarde comeré, ella solo asiente con la cabeza y sale de la habitación.

Veo que Isabella hizo que mi empleada probara la comida creo que ahora sí empezará a comer, vaya mujer tan terca lo que no entiendo es como supo ese día del incidente que yo traía mi arma conmigo, eso sí ni mis hombres saben que siempre traigo un arma.

Pero ella me la quitó en cuestión de segundos, estoy un poco distraído pensando cuando la veo que se acerca a una de las cámaras queda viendo mueve la cabeza de un lado hacia otro y se comienza a quitar la ropa frente a la cámara, quedando solamente en ropa interior, esta mujer está loca o me está provocando no sé qué pensar.

Porque de ser así lo va a conseguir, no puedo negar que tiene un muy bonito cuerpo hasta que con esa gasa que tiene en el abdomen se me hace ver verla sexy.

Ya me la imagino en la cama debe ser un volcán por estarme imaginando tonterías con ella, estoy más que duro solo me queda más que decirme para mí mismo

Hace mucho tiempo que ninguna mujer, hace que me ponga duro con tan solo verlo por medio de una pantalla de un teléfono.

Lo mejor que debo hacer es dejar de estar viéndola, porque si no esto tendrá consecuencias después, pero creo que ya las tengo así que me voy al baño que tengo aquí en mi despacho, para aliviar las ganas que esa mujer ha provocado en mí

Cuando salí de ducharme me vestí y después probé la comida que la mujer había traído, esa mujer cocina increíble, me comí todo tenía tanta hambre posteriormente, volví a la ventana donde pasé por más de dos horas parada y la playa es impresionante como quisiera salir por un momento e ir a caminar un rato mojar mis pies en el agua no que estoy aquí encerrada y no puedo hacer absolutamente nada, pero tengo que pensar cómo voy a escaparme de aquí solo tengo que esperar el momento, para salir de este maldito lugar y cuando lo logre que se prepare ese tal Alek Petrov

Porque será una guerra, donde solo quedará uno de nosotros dos vivo y, esa seré yo.

Cuando Anthon me avisó, que ya venía con mi hermana le pregunté, por qué se había tardado tanto me dijo que fue porque mi hermana esperaba que yo fuera por ella a la clínica, al no ser así ella se puso a llorar, por suerte logró convencerla su amiga eso es lo único que me gusta que ella, que tenga una amiga.

No meto extraños a mi casa y esa chica no me gusta, desde que la vi varias veces en la clínica ha querido estar cerca de mí. Y eso es lo que no me gusta tal parece que me quiere ligar, pero si sus intenciones van más allá la tendré que correr no me gustan las mujeres ofrecidas me gusta lo difícil.

Cuando Anthon me avisa que ya han llegado me dirijo hacia la salida de la casa, para ir a una de las casas de huésped ahí es donde mi hermana y su amiga se quedarán, así que mi hermana tendrá su propio espacio.

Para ella, el terreno es grande así que mandé a construir varias casas, para cuando tengo invitados ahí se quedan desde que compré aquí a mi hermana le gustó muchísimo el lugar, es muy tranquilo mi hermana adora venir aquí, lo único malo de todo es que ahora no podrá disfrutar de ir a la playa cómo lo hacía antes, pero voy a encontrar la manera de que ella vuelva a caminar así sea lo último que haga en esta vida.

*Sí Isabella Quintana es la culpable, de que ella haya quedado en esa silla de ruedas pagará con su vida, así tenga que enfrentarme a todos los Quintana, cuando les entregue a sus hermanos y a sus a sus padres a su hija en una caja, no soy un hombre de ir matando gente nada más así porque sí, pero si se meten con lo que yo más amo y quiero en esta vida. * Así respondo* *

Cuando entro a la casa veo a mi hermana sentada en esa maldita silla de ruedas. Pero ella se alegra al verme hermano esperabas que fueras a buscarme a la clínica

No pude hermanita, pero me alegro de que ya estés en casa de nuevo

Veo como su semblante de mi hermana cambia, a tristeza eso a mí me causa dolor, por no poder hacer nada por ella trato, de reanimarla empujo su silla de ruedas y la llevó a la habitación, la coloco sobre la cama con cuidado la acomodo, para que tome una siesta mientras llega la hora de la cena descansa hermanita vendré a cenar contigo Irina se encargará de preparar tu comida favorita.

Está bien hermano mayor.

Cuando estoy a punto de salir, me dice dime. Quién es ella por la cual no fuiste a buscarme.

Me quedó sin saber qué responderle, pues me giro con una sonrisa diciéndole. No es nadie. Si tuviera alguien tú serías la primera en saberlo.

Después solo le digo que descanse y salgo de su habitación dándole algunas indicaciones a Anthon, para que se encargue de la seguridad de Marsha, pues no quiero dejarla sola así como está, tengo miedo que pueda intentar algo en contra de su vida, en su estado debo de pensar en todo.