Nunca Es Tarde Para El Amor

Mientras su hermano conversaba con unos conocidos que se había encontrado ella había tomado la mano de Vivian y había caminado hasta la mesa del fondo donde estaba su hermana al llegar a ella con voz delicada dijo Fernanda la chica se paró de inmediato y abrazó a su hermana con mucha ternura no podía creer que estuviera allí por qué no me avisaste que estabas aquí y José tampoco me dijo nada era una sorpresa dijo Victoria entre risa.

Ya el pelo de su hermana no era rojo ahora tenía un castaño claro el cual la hacía lucir muy bien y elegante Gustavo que estaba a un lado de su esposa miró a victoria con sorpresa la mujer ahora se miraba radiante incluso podía jurar que más joven se acercó a su cuñada y le regaló un fuerte abrazo gusto de verte aquí. 

El hombre se levantó dándole la bienvenida es un placer de tenerte aquí mientras Vivían y Fernanda seguían abrazadas la señora Raquel caminó con elegancia a donde estaba Victoria y también le dio la bienvenida luces hermosa. Mientras Victoria se levantaba para abrazar a la cumpleañera miró hacia el lado izquierdo y ahí estaba Enrique. 

Vitoria intentaba concentrarse en la conversación que estaba teniendo con la señora Raquel, pero era imposible tenía la mirada puesta en un solo lugar mientras Enrique tomaba la mano de una mujer rubia muy hermosa Victoria tuvo que parpadear varias veces porque no lo podía creer el hombre ni siquiera la había visto, pero ella se preguntaba quién era la mujer su hermana no podía ser por la forma en que él le sostenía la mano. 

Con mucha sutileza preguntó el hombre de aquella mesa se me parece a alguien que conozco su hermana giró hacia donde estaba mirando ella, es el primo de Gustavo Enrique de la torre Quintero ella sostuvo la respiración su corazón se detuvo por un momento su lágrima las contó quedando completamente pálida, Enrique de la torre volvió y repitió sí es uno de los empresarios más conocido su empresa de tecnología es un éxito, pero tiene mucho otros negocios el hombre sabe invertir muy bien su dinero. Bienes y raíces en hotelería y turismo y en todo lo que tú puedas llamar inversión.

Vivian giró rápidamente y cuando miró a Enrique y miró de quién estaban hablando la chica iba a hablar, pero Victoria rápidamente apretó fuertemente su mano y solo con la mirada que ella le había dado había entendido el mensaje luego volvió y preguntó y la chica que está a su lado es su esposa respondió Fernanda por cierto muy engreída para mi gusto cree que todo el mundo está por debajo de ella. 

En serio es casado y yo que pensaba que los hombres multimillonarios no se casaban tan rápido, pues te equivocas querida hermana pequeña ese hombre que ves ahí está felizmente casado y por lo que se dicen ama muchísimo a su esposa.  Victoria se paró de la mesa con una sonrisa fingida que Fernanda que la conocía muy bien se había dado cuenta de eso, pero lo primero que ella pensó es que era porque su hermana no estaba acostumbrada a ese mundo.

Mientras victoria pedía disculpas para ir al baño vivían se levantó también la chica iba a hablar, pero ella le dijo no digas nada simplemente toma mi mano con fuerza para yo darme cuenta de que estás a mi lado mientras caminaba en busca del baño se encontró frente a frente con franco un hombre que llevaba muchísimo tiempo sin saber de él que a pesar de sus 42 años seguía luciendo guapo el hombre había quedado sorprendido de verla ahí y verla más hermosa que nunca. 

Victoria dijo el, ella no le había bajado la mirada lo seguía mirando fijamente y entre más lo miraba se daba cuenta que ya ese hombre en su vida no significaba nada señor de la torre Vicky estás preciosa quieres tomar algo claro que sí, pero en este momento estoy tratando de encontrar un baño en esta inmensa casa ahora me doy cuenta por qué nunca encajaría en tu vida somos de mundo diferente y no te juzgo por eso lo siento en ese entonces era un hombre demasiado inmaduro. 

mientras Diana de la torre llegaba con una voz chillona a la mesa de Enrique sin saludarlo pues su primo nunca había sido santo de su devoción, la mujer siempre había estado interesada por Andrés pero al meterse con su sobrino el hombre ni siquiera la había volteado a mirar ni una sola vez.

Andrés levantó la mirada miró a Victoria a un lado de la mujer que había robado su corazón Enrique podemos hablar dijo el hombre parándose rápidamente de la mesa el hombre soltó la mano de su esposa y al estar solo con Andrés qué es eso tan importante que quieres hablar conmigo.

Pensará que me estoy volviendo loco, pero no es así acabo de mirar a Victoria y a mi pequeña, Enrique recorrió el salón con la mirada, pero no la vio y pensó que Andrés estaba volviendo loco te lo juro que la acabo de ver el hombre miraba por todo el lugar volvió a su mesa y tomó la mano de su esposa nuevamente, pero no dejaba de mirar por todo el lugar mientras victoria salía del baño y caminaba nuevamente a su mesa la miró. 

Al entrar al baño Victoria le temblaban las manos no sabía cómo estaba haciendo para no llorar tenía rabia frustración y todas las emociones encontradas entendía muchas cosas inconclusas ahora las entendía muy bien. Al llegar a la mesa nuevamente se había sentado y a pesar de que trataba de no mirar a la mesa de Enrique era imposible no hacerlo la mirada de él había conectado con la de ella esa mirada era de desilusión rabia.

Enrique sabía que tenía que hablar con la mujer y mientras más pensaba no sabía cómo hacerlo Andrés se había parado de la mesa y había llegado a la mesa de Victoria había saludado a Fernanda como siempre y a Gustavo,, pero en la mirada de Gustavo había una advertencia hacia él, el hombre lo mirará a Vivian tan hermosa en ese momento lo único que deseaba era abrazarla y besarla con pasión,, pero en la mirada de la chica había la misma desilusión que había en la mirada de Vitoria.

En ese momento había sonado su copa con su esposo Antonio a un lado y Gustavo había tomado la mano de su esposa dirigiéndose a un lado de sus padres, al mirar que su hermana ya no estaba quedó mirando Andrés sabes algo algunas veces decidimos engañarnos a nosotros mismos yo viajé kilómetros para encontrarme con un hombre que ya está casado que no sé por qué ni la razón la cual pienso averiguar ocultó su verdadero origen utilizando su segundo apellido y no diciendo que era un de la torre ahora me siento la mujer más engañada.

Mientras decía esas palabras una lágrima traicionera rodó por su mejilla la cual rápidamente limpio camino con rapidez hasta llegar a donde estaban haciendo el brindis y entre la multitud se sintió mareada necesitaba aire fresco mientras todos brindaban ella caminó con lentitud al hermoso jardín, y se quedó un largo rato mirando hacia la nada.

Enrique al mirar que Victoria había salido había decidido seguirla y al llegar a un lado de ella no sabía cómo comenzar a hablar, pero ella ya había olido su perfume y sin girarse solo dije eres casado eres de la torre eres una mentira dijo entre lágrimas y cuando giró hacia donde estaba él solamente había sentido que todo le daba vuelta perdiendo el conocimiento.