La Apuesta De Angel

Era una mañana cálida, Ángel estaba en su habitación esperando a sus amigas, y ahí llegaron ellas.

Tocaron la puerta de la habitación, entraron. Victoria y Celeste la miraron fijamente y dijeron:

-¡Hola acá estamos amiga!

Las jóvenes se sentaron en la alfombra en el piso formando una especie de círculo, y empezaron las confidencias.

La habitación de Ángel se sentía como un refugio después del caos que fue el día en la hacienda de la familia. Ángel suspiró al ver a sus amigas ¡todas juntas !

-No creo que salga más de esta casa -dijo, mirando al techo.

Victoria cruzó los brazos.

-A ver, cuéntenme qué está pasando aquí realmente, pero con lujo de detalles.

La puerta se abrió de golpe,y apareció Iris, la hermana menor de Ángel.

-¡A mí no me dejen afuera, tu lo prometiste Ángel! Y se sentó en el círculo.

Ángel tomó aire, suspiró y habló:

-Les voy a contar todo lo que pasó con Leo en el campo. Pero primero, el principio de todo:

" la apuesta"…

Contó cada detalle, cómo se sintió,porque lo hizo y que todo lo había escrito en su diario. Los ojos de sus amigas se abrieron cada vez más. Celeste asintió, con lágrimas en los ojos, mientras asentía en todo el relato de su amiga ,luego contaba también con ella de su papel en todo esto y su encuentro con Enzo.

Victoria exclamó:

-¡Wow, chicas, esto parece una película! Pero te pasaste un poco amiga , mi familia y yo nos estamos quedando en el hotel de Drago él tío de Leo , estás vacaciones de verano hasta que regresemos a Italia.Te aseguro que vemos a Leo todo el día, trabajando mucho a la par de su tío , organizando también lo de Italia el negocio de su madre ahí, luego también lo otro ,ya ustedes entienden, hicieron muchos cambios en la mafia en Italia. Y él está muy cambiado no es el mismo chico que llegó a esta ciudad.

Iris suspiró.

—¡Ay, qué hermoso! ¡Su primer beso!

Ángel interrumpió:

—¡Basta, hermana deja el romanticismo por una vez ! Esto se me fue de las manos, no me hagas sentir peor Victoria , no quiero seguir con esto, se terminó.

Celeste asintió.

-Yo tampoco, Ángel. Me bajo de este juego, ¡no puedo más!

Ángel la miró.

-Sí, amiga, es el final. Ya lo escribí en mi diario: gané la apuesta, él cayó. Y listo, se acabó.

- ¿Y eso te hace sentir mejor Ángel, escribir eso en tu diario?- soltó Celeste

Victoria frunció el ceño.

—¿Y qué le vas a decir a Leo? No entiendo…¡fuiste una apuesta! ¿y te gané?

Ángel endureció la mirada.

-Nada, no, no me siento mejor Celeste, pero él lo merecía, o era lo que pensé cuando comencé con esto.Le voy a decir que el beso fue un error , nada más.Se suponía que esto me haría sentir súper feliz de verlo perder y humillado.- Y bajo la mirada.

Iris preguntó con curiosidad:

-¿Pero te gustó el beso?¿ que sentiste hermana?

Ángel evitó la pregunta.

-¡Qué les voy a decir! Son mis amigas… Les diré que no me sale nada hoy, estoy confundida -dijo, con la voz muy nerviosa.

Celeste se lamentó:

-¡Es que te lo dije, amiga! Esto era peligroso… ¿Y cómo miro a Enzo a la cara? Le mentí, actué… No puedo… Y cuando me besó, ¡yo también morí, sin ser la protagonista de nada de esto! Si se entera me va a odiar de igual forma , son amigos ellos.

Victoria suspiró.

—¿Será que algún día me darán un beso a mí?

Iris sonrió con picardía.

-¿De quién, amiga…? ¿Marcos será el galán?

Ángel y Celeste gritaron al unísono:

-¡Victoria, estás enamorada de Marcos!

Victoria se puso roja.

-Sí, amigas, lo confieso. Es él el dueño de mi corazón, pero para él no existo… Me ve como una amiga, nada más. Su amor no me pertenece a mí. Y miró a Ángel, pero ella no se dio cuenta de la indirecta.

-Pero no hablemos de mí, ¿Qué harán chicas, ustedes saben que la otra semana es el cumple de Leo, y Cata está preparando la fiesta, no pueden no ir, sus padres sospecharan que algo pasa- dijo Victoria

Ángel se tapó la cara con las manos, que desastre y tenemos que ir ¿no?

-¡Ay, el cumpleaños de Leo! ¿Cómo voy a hacer eso? Solo debo hacer que se aleje de mi… Se suponía que esto no sería así… —Lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas.

Sus amigas la abrazaron con fuerza.

-Es una pesadilla, chicas -dijo Ángel, con la voz muy triste.

Celeste asintió.

-Sí, para mí también…pero hay que ir.

Levantó la mirada al cielo y dijo:

-Ángel, sabés que te quiero mucho.Pero te pasaste con tantas mentiras, tantos inventos, ¡y yo te seguí en esta locura! Soy igual de culpable .-Que Dios nos ayude ese día del cumpleaños de Él y que nunca se enteren de nada de esto, Aún no creo que Enzo se haya fijado en mi y me odiara si se entera de todo este circo.

En ese momento, el celular de Victoria sonó.

-Chicas, es mi papá,me tengo que ir, ya vinieron por mí -dijo, agarrando su mochila.

Se despidió rápidamente y salió de la habitación. Lo que no notó es que, en el apuro, ¡se había confundido de mochila y se había llevado la de Ángel!

Poco después, Celeste e Iris también se fueron.

Ángel se acostó en su cama, agitada mentalmente. Se tocó los labios, recordando los besos de Leo. La habían afectado demasiado, más de lo que quería admitir. No quería aceptarlo por ahora.