UN AMOR SIN ETIQUETA🫦

Luciana pidio por los dos, ya que Daniel realmente no había comido antes eso, Luciana reía discretamente, después de rato llevaron la comida, ambos comían en silencio, Daniel disfrutaba la comida.

Realmente es rica esta comida— decía Daniel mirando a Luciana con una sonrisa

Si, esto me hace estar cerca de mi hogar, son típicas comidas de allá, algún día te invitare— le decía Luciana, quien bebia de su limonada...

Si, con gusto iría, me encantaría saber de dónde vienes— decía Daniel, mientras Luciana mostraba una miraba triste...— dije algo malo...

No, no eres tu, solo que me acabo de dar cuenta que no sabes de dónde vengo— decía ella más seria..

No, pero la verdad me encantaría conocerte, eres bonita, inteligente, alegre, y todo de ti me interesaría saber, si tú quieres—Luciana Sonrió Nuevamente

Si, te contaré resumida mi vida, y después nos conocemos bien— Daniel asentía, mientras la miraba con atencion— Mi madre se embarazo, y sus padres la dejaron sola, ella se fue de casa y llegó hasta un pueblo, ahí vivió su embarazo, pero después de aliviarse de mi, al poco tiempo se fue, dejándome ahí en el convento, la madre superiora me registro y bautizo, ella se volvió como mi madre, junto a otras monjas eran mi familia, ahí crecí, estudie, también trabaje cerca del convento, y logré entrar a NYC, y aquí tengo 3 años, estudiando para ser una excelente doctora— Daniel la miraba con una sonrisa— que pasa

Eres increíble, eres admirable, a pesar de todo saliste adelante sola, ahora tienes tu propio hogar y trabajo, y ala vez estudias, realmente eres perfecta— Daniel decía con esos ojos de admiración, que hacían poner nerviosa a Luciana, después de cenar, salieron a caminar al parque cerca de ahi... Caminaban por aquel parque poco iluminado por unas farolas, dónde había parejas, un ambiente romántico, eso era nuevo para Daniel, pero le gustaba, más por qué era al lado de Luciana

Mira ven, vamos alla— Luciana corría hacia un puesto de churros rellenos, parecía niña chiquita algo que le encantaba a Daniel— mira ven pruébalo — le decía Luciana a Daniel, quien probó el churro, sonrió, era de mermelada el relleno, ella comía uno sin nada — te gustaron— Daniel asentí, mientras con una servilleta limpiaba su boca, después caminaban, y al llegar a una heladería, Luciana Compro una Nieve para ambos, ya que Daniel no era mucho de comer dulce, se sentaron en una banca, y jamás notaron que alguien no muy contenta, los estaba observando...

platicaba, y de repente hubo un silencio, no incómodo, un silencio de tranquilidad, Luciana miro a Daniel aquellos ojos que le empezaba gustar ver, Daniel miro aquellos ojos cafés, que desde el primer día le habían gustado, después su mirada se desvío hacia los labios, definidos, y rosados, de Luciana, lo pensó por instantes, hasta que el lentamente le dió un beso, un beso que fue respondido por Luciana, un beso lleno de ternura, duro unos segundos, después siguieron su camino, ya era tarde a si que decidieron volver al apartamento, tomados de la mano, caminaron hasta el auto de Daniel....

...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...

...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...

Por una calle no muy transcurrida, iba pasando un auto color rosa, último modelo con dos mujeres muy bellas dentro de El, una rubia lo manejaba y una morena iba del lado del copiloto, en busca de un bar tranquilo, sin tanto ruido, cuando pasaron cerca de un parque una de ellas hablo...

Val, ese no es Daniel— decía aquella morena, apuntando hacia una pareja que caminaba por aquel parque poco alumbrado...

No, Daniel jamás vendria para estos lados— decía Valentina a su amiga.

Amiga, no estoy loca, mira es Daniel— la rubia de estacionó cerca del parque, ambas se bajaron y sin ser vista caminaron observando aquella pareja, hasta que los vieron sentarse en una banca, y minutos después, se daban un tierno beso, para después irse como una pareja de enamorados, tomados de la mano...

A si que tienes una nueva mujercita— decía aquella rubia con una sonrisa amarga— pero por qué pasean en público, desde que me terminó, jamás anduvo a si con alguien

Será que se verdad ya te superó, y te encontró reemplazo amiga— decía aquella morena, haciendo enojar a su amiga...

No, nadie me olvida tan rapido— decía la rubia aún más molesta— a si hayan pasado 10 años, Daniel es mío, y regrese por Él, y ninguna mocosa me lo quitará, Él es mio, solo mio— decía aquella rubia, ya furiosa, volvió a su auto y manejo hasta el primer bar que vio, ya daba igual donde fuera, esa noche bebería hasta olvidar que vio a Daniel besar a otra...

.

.

.

Daniel llevo a Luciana hasta su departamento, ambos bajaron, y la llevo hasta la puerta...

Quieres pasar— decía nerviosa Luciana, como si fuera la primera vez que el iba a su casa, Daniel con una sonrisa asintió, al entrar estaba Ava sola en el sofá, viendo la tele— Hola amiga— le decía Luciana a Ava.

Hola tortolitos— decía Ava, mientras saludaba a ambos, Luciana se puso roja por eso, Ava sonrió y la miro— tranquila, a un a si te seguiré amando amiga— Luciana sonreía, y le daba una bolsa a su amiga.

Te trajimos helado Bebé — le decía Luciana a Ava, quien como niña chiquita corría hacia la cocina en busca de un cubierto..

Ya que veo que estás acompañada, me retiro, me encantaría quedarme, pero tengo una reunió a primera, si cuando salga de esa reunión, aún te alcanzo, paso para llevarte a tu trabajo si— le decía Daniel, aunque deseaba quedarse, quería hacer las cosas bien, y no mentía tenía una reunión, que Mariano no podía cubrir, ya que el también tenía una, Luciana asintió, y se despidieron con un corto beso, pero tierno, después se despidió de su hermana y se fue...

Quiero detalles amiga— le decía Ava mientras comía su helado de chocolate

No es mucho, me regaló ese ramo cuando fue por mi al trabajo, fuimos a cenar a mi lugar favorito, comimos churros y nieve, caminamos un rato y nos besamos— decía esto último, haciendo que Ava soltará un grito de felicidad y ,abrazaba a su amiga