A la edad de 18 años, por orden de sus padres Jade se vio obligada a casarse, con el hermano de la persona que ella gustaba, no fue hasta más tarde que poco a poco comenzó a enamorarse de él hombre con quién se había unido en matrimonio, que este era muy amable y atento hacia ella, sin embargo los tiempos felices no duraron lo suficiente.
Pues su propia hermana gemela había tramado y causó la muerte de su amado esposo y sus dos pequeños mellizos, uno tras otro, finalmente todavía ha quedado perdido sentía un gran fuerte dolor y rabia hacia ella que deseo con todo su corazón... que si llegaba a tener una segunda oportunidad no permitiría tal injusticia y protegería a toda costa a las personas que más amaba.
Milagrosamente ella regresó en el tiempo a la edad de 18 años, entonces se prometiendo así misma, tomar venganza contra todos aquellos que le habían hecho daño.
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Capitulo 12: Un ladrón en casa?
Cuando Jade dijo eso, Benjamín cambio su expresión inmediatamente, Benjamín siempre había sido alguien que se preocupaba demasiado por su reputación, y... si la gente supiera o llegar a enterarse de que Jade solo llevaba ropa que ya había usado antes y joyas que no tenían valor sería duramente criticado por la competencia y por todas las personas a su alrededor.
Janeth era realmente insensible e ingrata, pues a pesar de haberle quitado todos los regalos que anteriormente le habían dado a Jade, ahora no solo quería eso sino también la tarjeta que le daba Benjamín, "¡¡Cómo podía pelearse por una cosa tan trivial y pequeña como una tarjeta de crédito con su hermana!!" dijo Benjamín enojado.
Benjamín... estaba hecha una furia, no entendía Cómo su hija mayor se comportaba de una manera tan infantil solamente por una tarjeta de crédito.
En ese momento Rosa intervino, "¿De qué estás hablando? A la gente no le importan este tipo de temas ¿No pasará nada sí Jade le da la tarjeta de crédito a Janeth? Y... si escapa!, sabes que es una niña muy terca ¿Qué haríamos entonces?", dijo Rosa, en tono alarmante.
Jade sintiéndose decepcionada por su madre, se encogió de miedo y dijo... "Me equivoqué mamá, le daré la tarjeta de crédito de inmediato a Janeth, ahora mismo".
Estando a punto de levantarse de la mesa, Jade escuchó el estruendo de un golpe sordo, haciendo que la vajilla en el comedor resonará con aquel golpe... había sido Benjamín, estaba tan molesto que golpeó la mesa.
"¡No te muevas, Jade! ¡Rosa, es culpa tuya que Janeth sea tan malcriada! cuando llegó por primera vez era demasiado obediente, ¡pero ahora todo lo que hace es llevarse las cosas de Jade! si quiere volver al campo ¡¡déjala que regrese, la reto A que se vaya y que no vuelva!!" Benjamín gritó enfadado, no esperaba que Rosa fuera tan parcial con Janeth y le pidiera a Jade que le entregara sus cosas, Ahora mismo Benjamín estaba disgustado e irritado con Janeth.
Janeth que se encontraba tumbada, en la esquina, justo el borde de las escaleras, escondiéndose y esperando qué Rosa y Benjamín fueran a consolarla, casi le da un paro cardíaco, cuando escuchó las palabras que había dicho Benjamín.
Al principio solo lo dijo para recordar a sus padres que vinieran a consolarla, ella no pensó que las cosas fueran a ir de esta manera, pues casi siempre las cosas siempre estaban a su favor..., ya que cada vez que ella decía lo mismo repitiendo que había sido secuestrada, por su culpa, ellos se sentían culpables y eventualmente la dejaban hacer lo que ella quería; sin embargo, esta vez fue muy diferente, esta vez y las cosas se volvieron en su contra.
Sin embargo, las cosas en este momento se encontraban totalmente fuera de sus expectativas.
Esa estúpida de Jade, estaba cada vez mejor!... había comenzado a defenderse y sabía cómo hablarles a sus padres, es momento Janeth comenzó a tener miedo de Jade, pues si esto seguía así, pronto sería descubierta y... la verdad saldría a la luz.
Al ver que Benjamín había perdido los estribos, Rosa no se atrevió a decir nada más, Después de todo Benjamín era el que estaba al mando y odiaba cuando alguien intentaba cambiar su criterio después de haber tomado una decisión. Aunque Rosa sentía pena por Janeth, sabía que él no escucharía nada de lo que ella dijera, porque después de todo, el estaba enojado. Así que decidió no tocar mas el tema, por lo que solo podía compensar a su hija mayor en secreto.
Cuando Jade pasó por la habitación de Janeth de camino a la suya, la escuchó quejarse con lágrimas en los ojos y a Rosa consolarla en el interior Jade miró la tarjeta que tenía la mano y sus ojos brillaron fríamente con un toque de odio.
"Esto es solo el comienzo de tu perdición Janet Hillary, así como en el pasado me arrebataste todo lo que me pertenecía, En esta vida no te dejaré hacerlo y te haré pagar por cada mínimo error que cometas" Susurro Jade para sí misma, mientras apretaba con fuerza la tarjeta de crédito en su mano.
Al día siguiente, justo cuando Benjamín y Rosa iban a salir de casa, Escucharon a Jade gritar desde arriba, ambos... alarmados subieron rápidamente las escaleras y la vieron aterrada, con lágrimas en los ojos, su mirada lo decía todo, ella pedía perdón mientras la veían buscando entre sus cosas con pánico como si algo se lo hubiese perdido. Con el ceño fruncido, Benjamín le preguntó. "Jade ¿Por qué tanto escándalo?"
"¡Papá la tarjeta que me diste ayer se ha ido!... lo puse en mi bolso el día de ayer, pero cuando lo comprobé hoy ¡se había ido!" dijo Jade ansiosa, mientras gritaba mirando con los ojos llorosos a Benjamín.
La expresión de Benjamín se volvió sombría de inmediato, porque mínimo... al menos había uno o dos millones de dólares en esa tarjeta, y Jade había sido muy descuidada al perder algo tan valioso.
Justo cuando estaba a punto de regañarla, Jade continuo ansiosa, "¡Después de que me dieras la tarjeta el día de ayer... ni siquiera salí de casa! he estado En mi habitación todo este tiempo... no sé cómo podría haberla perdido".
En ese momento ambos adultos pensaron que tenía algo de sentido, significaba que la tarjeta había sido robada, En ese momento Rosa entró en pánico, ¿Qué haría si una de sus sirvientas Fuera una ladrona?.
Fue en ese momento en que Benjamín preguntó... "¿Alguna sirvienta entró en tu habitación el día de hoy?" pensando en que alguien había irrumpido en la casa, La cara de Rosa palideció inmediatamente, ¿Cómo explicaría a sus amigas que una de sus sirvientas había robado? ya que la mayoría de las sirvientas que trabajaba en casa, habían sido recomendadas por las amigas de Rosa.
Aún que, la familia Hillary no eran extremadamente ricos... también se sabía que dirigían varías grandes empresas y nunca tuvo problemas para ganar dinero, Pues se podían dar el lujo de contratar a varias criadas, Así que Rosa tenía miedo de que algunas de las criadas estuviese trabajando en cubierta para uno de los enemigos de su esposo.
