La Alquimista Y El Alfa De La Manada

Lucio recorrió los pasillos utilizando su gran olfato y sin darse cuenta, se detuvo frente a una habitación que no era la suya… escuchó con su super oído y se dio cuenta que la princesa no estaba en la habitación, asi que se dejo controlar unos minutos por Mox y entro a la invitación, toda su piel, se erizo al sentir todo el olor y al ver las cosas que ella tenía… la habitación se veía ordenada, tenía colores negros y rojos, similares a los que ella vestía, además de algunos cuadernos con distintas inscripciones… a pesar de lo que le decía su conciencia, abrió algunos cajones, encontrándose con la ropa interior mas pequeña que jamás pensó en ver, además de algunos sujetadores, iba a seguir mirando, cuando sintió que alguien venía… observó que la ventana estaba cerrada y no podría bajar por ahí, asi que la única opción era el gran armario, que se encontraba a su lado, espero ahí y la princesa entro con algunas plantas en la mano… a pesar de lo que le decía la poca razón que le quedaba, empezó a espiar por las hendiduras de la puerta del armario… vio como ella dejaba unas plantas en diferentes vasos y les echaba un líquido rojizo… pero para su sorpresa, la princesa comenzó a quitarse la ropa…

Mox: < Salta y tómala, dame el control >

Lucio: < No forzamos a mujeres >

El cuerpo de Lucio había reaccionado al ver a la princesa y comenzó a tocarse la entrepierna…

Mox: < Pareces un adolescente, dame el control, puedo oler su pureza >

De pronto, la princesa desapareció de su vista y comenzaron a escuchar el agua…

Mox: < ¡Ahora! ¡Esta mojada, toda el agua recorre su cuerpo desnudo! >

El cuerpo de Lucio exploto de placer dentro del armario, y ella apareció usando una bata y una toalla en su cabello…

Mox: < ¡Oner está aquí! ¡Lo mataré! >

Se escuchó la puerta y ella apretó su bata y abrió un poco la puerta, lo suficiente para que se viera solo su rostro…

Javier: - Buenas noches princesa, tengo este vino y estas copas, para que podamos compartir unos minutos, mientras revisa mi herida por acónito, quizás le sirva para su investigación.

Azucena: - Buenas noches, pero no gracias, nos vemos mañana, que descanse.

Azucena cerró la puerta con doble cerrojo y comenzó a cepillar su cabello… se saco la bata para ponerse un corto camisón para dormir, mientras nuevamente el cuerpo de Lucio despertaba… al ver la espalda y un poco más de ella, aun desde el armario… ella se acercó al armario y Lucio respiró profundo, pero Azucena creyó que había sido un ruido afuera, por lo que le quito el cerrojo a su ventana, para abrirla y dejarse acariciar por el viento unos minutos… Después de eso se fue a su cama y se apagaron las luces, que funcionaban con cristales mágicos, pero Lucio espero a sentir que ella ya estaba completamente dormida… no sabia bien como salir de ahí, sin que ella se despertará…

[Si salgo por la puerta, dejaré sin cerrojo y Javier o cualquier otro, puede intentar entrar, además ella se daría cuenta, si me quedo aquí no creo poder seguir controlando a Mox y no saltarle encima, creo que lo mejor será por la ventana, pero estoy en un cuarto piso… bien, será rápido]

En un rápido movimiento Lucio salió por la ventana, para caer sobre unos rosales, la caída había sido de casi 15 metros, lo que habría matado a cualquiera, pero que a él le permitió llegar solo algo herido a su habitación.