Una chica muy adinerada, ocupada en su trabajo y bastante seria, conoce a dos hombres que le pondrán el mundo al revés. Sus decisiones la hará sufrir bastante, pero al final encontrará al verdadero amor.
¿Será que se queda con el que ama tanto y la hace sufrir? o ¿Será que se queda con el que la consuela en su momento de dolor y tristeza?
Te invito a que leas esta historia y me dejes tus comentarios.
¿Con quien te quedarías tú?.
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Desilusión
Al llegar veo que hay varias personas que no son de nuestra compañía ni de mi equipo.
- ¿Por qué hay tanta gente aquí?.- Pregunto mientras me alistan para grabar.
-¡Hola! Mucho gusto soy Tamara, ellos son de mi equipo, desde el inicio avisé que ellos vienen siempre conmigo.- Dice la muchacha.
- Dime una cosa, ¿Tú estás colaborando para nosotros o nosotros para ti?.-
- Yo colaboró con ustedes por supuesto.-
- Muy bien, entonces el material de grabación será exclusividad de Love Skin y mis redes sociales, entonces tu equipo no puede grabar aquí, podrás grabar solo tú, con tu teléfono, en eso supongo que mi equipo de contratación tuvo que ser claro ¿Verdad?.-
- ¡Supongo que sí!.-
Bien, aclarando esto, demos inicio a las grabaciones.
Transcurre la mañana en total calma, la chica y yo logramos sacar muy bien material y al final su equipo logro hacer algunas grabaciones pero solo de ella, ya que les gustó el escenario.
Al terminar veo que Stefan está recargado contra la puerta mirándome con su gran sonrisa.
De pronto sale Tamara y pega un grito que me hace saltar.
- ¡Amorrree Miooooo! ¿Cómo supiste que estaría en este lugar?.- Dice mientras corre hacia donde está Stefan.
Yo me quedo quieta, viendo la escena precisa en donde ella lo abraza y le da un beso que los deja sin aliento.
¡No sé por qué esto no me sorprende!. De pronto veo a un chico alto, moreno y bien acuerpado que se acerca a él y lo saluda con un abrazo.
-¡ Wey, sabía que estabas en casa pero jamás imaginé que te veríamos aquí!.-
- ¿Porqué no me avisaste que estarían por acá?.- Dice Stefan bastante serio mientras me mira.
- No pus es que esto fue algo que salió de rapidez, se supone que es un viaje relámpago, mañana ya debemos regresar a México, ¿A qué nos vas a invitar?.- Dice entusiasmado.
- ¡Si amor! Vamos a comer algo y luego me llevas a conocer tu penthouse.- Dice Tamara sin soltarle el brazo y dando pequeños brinquitos.
Yo no sigo prestando atención y a penas terminan de desmaquillarme agarro mis cosas y salgo del lugar directo a mi oficina.
¿En serio Liss? Casi caes en manos de Stefan, ¡En qué diablos estás pensando!... Él nunca dejará de ser el Don juan que recorre el mundo.
¡Menos mal que esto no avanzo más! De verdad que en este momento estoy ¡Amando! Pero Amando a Helena. Ella fue quien impidió que anoche ... Uffff...
Aunque siento una desilusión por allá en el fondo de mi ser, también soy consciente de que nunca hubo nada.
Salgo de la oficina para ir a comer algo antes de reunirnos con el equipo financiero y veo que ellos van saliendo muy entusiasmados y Stefan lleva a la chica de la mano.
Yo solo sonrió y decido ir a la cafetería del edificio, prefiero no salir a la calle, soy tan de malas que los encuentro en el lugar al que vaya.
Al llegar a la cafetería veo que está full de personas disfrutando de su hora de almuerzo así que doy la vuelta y sin querer tropiezo con alguien.
- ¡Oohh! Lo siento estaba algo... Distraída.- Sigo mientras levanto la vista para ver a la persona.
Lo que no esperaba era que vería a aquel chico de MyLux allí.
-¡Señorita! ¿Se encuentra bien?.- Dice mientras me mira con esos ojos azules.
- ¡Aggg!- Carraspeo un poco y respondo - ¡Estoy bien! Lamento el choque, permiso - Doy la vuelta y salgo dando grandes zancadas.
De pronto siento una mano que agarra mi hombro y escucho una voz que dice:.
- Señorita Liss, permita que la invite a almorzar, de paso nos vamos acostumbrando ya que desde mañana trabajaremos juntos.- Dice mientras sonríe de una manera increíble.
- ¡No te preocupes! Yo solo venía por un café, pero te agradezco por la invitación, otro día será.-
- !Por favor! Acompáñeme, mire que no quiero comer solo, hasta ahora estoy familiarizando con el lugar, ¡Vamos! Se que el lugar le agradará.- Y me agarra la mano para llevarme con él.
- ¡Oye! puedes soltarme por favor.- Digo algo sería.
- ¡Aaaa, si! Lo siento es que no quería escuchar un no por respuesta.- Dice y sonríe.
- ¿Porque sonríes tanto? Me haces sentir abrumada.-
- !Bueno! Es que la vida es más llevadera cuando sonríes, ¡Inténtalo! verás que funciona un montón.-
Entre caminata, y sonrisas y esas cosas llegamos a un pequeño restaurante en donde preparan sushi.
- El sushi de este lugar es increíble y el Ramen Ufff, es bestial.- Dice mientras corre la silla para que me siente.
Ustedes no me creerán pero no recuerdo su nombre, por estar elevada en otras cosas no presté atención a su nombre y ahora me da pena preguntarle. ¡Que pasa conmigo!.
- Supongo que si te gusta el sushi ¿Verdad?.- Pregunta mientras retira su chaqueta y pide unas bebidas.
- ¡Si! Hace mucho que no lo como, pero si me gusta mucho.- Respondo con una media sonrisa.
Estamos bebiendo nuestras cervezas cuando de pronto escucho la voz de Tamara a lo lejos.
- ¡Miren! Es Liss, vamos a comer junto a ellos.-
- ¡No seas imprudente! Está en almuerzo de negocios - Le responde Stefan mientras buscan otros lugares.
- ¡Yo quería aprovechar para conocerla un poco más!, tú sabes que ella es mi ídolo.-
- ¡Basta Tamara! Te portas como una niña de 15.-
-¡Oye! Pero porque estás tan distante conmigo, ¿Pasa algo Stefan? Dime.-
De pronto me canso de escuchar su no muy agradable conversación y decido retirarme pero en ese justo momento llegan las órdenes de sushi a la mesa.
- ¿Puedo hacerte una pregunta?.- Dice aquel bello hombre de ojos azules.
- ¡Por supuesto!.- respondo.
- ¿Ustedes dos son o eran pareja?.-
- ¡No! Nunca hemos tenido nada, lo que viste en el estacionamiento solo fue una confusión, como puedes ver el tiene su novia.-
- ¿Y tu tienes novio?.-
- ¡Oye! Indagas mucho en lo personal... Pero, No, no tengo novio, ni tinieblo, ni amante, ni el ratico... Nada.-
- ¡Okay!.- Responde sonriendo. Cosa que me desconcierta.
- Y ahora dime tú¿Tienes novia, estás casado, hay hijos de por medio?.- Pregunto de manera "Desinteresada".
- ¡No! Ninguna de las anteriores, vivo sumergido en mi trabajo que no tengo tiempo de pensar en un romance... ¡Hasta ahora!.- Y sonríe.
Yo no digo nada más, y terminamos de almorzar para luego volver a nuestras labores.