Lilith, que trabaja en un club exclusivo como mesera, un día llama la atención de un cliente muy importante, ¿qué pasará ahora?
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Capitulo 14
Me acerque a la mesita, tome el vaso, y sin pensarlo dos veces, tome un trago largo, el sabor era amargo, no sé cómo las personas beben cosas como estás, tome otro trago, y de a tragos, lo tomé todo, puse el vaso sobre la mesita y di varios pasos atrás.
— Buena chica, toma otro vaso. Tomo el vaso, lo lleno otra vez y lo puso en el mismo lugar.
Me acerque y repetí las mismas acciones, solo que está vez, la cabeza me dio una vuelta, cuando me aleje de la mesita, casi me caigo, él puso el puro en el cenicero, y me agarró, sosteniéndome por la espalda, me besó con el humo del cigarro en la boca, ese fue mi primer beso, y fue amargo.
Me alejé de él, entonces me cargó entre sus brazos, y comenzó a caminar, mientras caminaba me dijo.
— Voy a hacer gentil, por qué es la primera vez, sin embargo, si te resistes, no voy a hacer considerado.
Mi cabeza, me daba vueltas, con cada pasa que daba, entro a una habitación, cerro la puerta, se sentó en un sillón conmigo en los brazos, era un hombre grande e importante, yo en sus brazos era como una niña, sin embargo, tengo 20 años, el mareo, el olor a whisky y a humo, estaba en todas partes.
De repente me dio la vuelta, estaba sorprendida y más mareada, me puso boca abajo, subió mi vestido, y comenzó acariciar mis glúteos, se sentía extraño, ya que era la primera vez, que un hombre me tocaba, y sus manos, eran cálidas, y enormes.
Me dio una nalgada muy fuerte, el dolor, paso por todo mi cuerpo, incluso, aumento mi mareo, grite no lo puede evitar, no solo por el golpe, también por la sorpresa, entonces recordé las palabras de Susan, a él, le gustan los gritos.
La segunda nalgada, fue con la misma intensidad, pero ya estaba esperándola, así que no abrí la boca, cosa que lo molesto, y le golpeó otra vez con más fuerza, pero no un suspiro salió de mi boca.
— ¿Vas a hacer así?, me preguntó mientras se levantaba del sillón.
Me puso sobre la cama, y procedió a quitarse la ropa, me di la vuelta para no mirarlo, escuché el sonido de la correa al suelo, los movimientos, de él mientras se desvestía, creo que sin sentidos se agudizaron, después que tome esos dos vasos de Whisky.
De repente se subió a la cama, me giro, agarró el cuello de mi vestido, y como si fuera papel, rompió mi vestido en dos partes, quedando mi ropa interior expuesta.
Me sentía tan vulnerable, a merced de este hombre y sin poder hacer nada más, que entrégame sin resistencia.
Paso su lengua por la base de mi cuello, hasta que llegó a mi boca, sentí un escalofrío, era como si me estuviera probando, me besó otra vez, entro su lengua tan pronto en mi boca que apenas podía respirar, me agarró por la cintura, y después de un beso muy largo, comenzó a chupar y morder por todas las partes que estaban descubiertas.
Sentía todas estas sensaciones que me abrumaban, me terminó de desgarrar el vestido hasta que solo me quedo la ropa interior, su cuerpo era cálido, y sobre mí parecía como si una montaña, me fuera a aplastar.
Mi ropa interior también fue arrancada, estaba piel con piel, con él, me tocó muy íntimamente, con sus dedos, mientras me sostenía en sus brazos, como si me cargará, él quería ver mi rostro mientras me tocaba, no paro de tocarme hasta que hizo que me retorciera entre sus brazos, era como si choques eléctricos recorrieran todo mi cuerpo.
Besos que me ahogaban, mordidas, succionó, mis pequeños cocos, tanto que perdí la sensibilidad, todo mi cuerpo, estaba experimentado, cosa que no sabía que una persona podía sentir, mi mente estaba nublada totalmente.
— Esto te va a doler un poco. Me dijo con voz ronca, mientas abría mis piernas y se hundía en mí.
Me quedé sin respiración, cuando el dolor recorrió cada fibra sé mi cuerpo, agarre la sabana con fuera, esperando que ese dolor pasara rápido, entonces comenzó a moverse dentro de mí, era grande, me llevaba por completo, el dolor se fue apagando poco a poco, dando paso a otras sensaciones, que me abrumaban más que las que ya había sentido antes.
La noche fue eterna, era como un toro bravo que no se cansaba, llegó un momento que las lágrimas salieron de mis ojos, mientras toda mi cuerpo estaba en un caos emocional total.
— Lloras, pero no gritas, si hubieras gritado todo el tiempo, esto sería más corto, pero eres terca. Me dijo mientras paso su lengua por mis mejillas, saboreando mis lágrimas.
No paro en toda la noche, hasta que vi el amanecer, a través de las ventanas de cristal de la casa, el alcohol en mi cuerpo no dejo que me durmiera, yo pensé que me desmayaría o algo así, pero eso no pasó, no sé si esto es placer o tortura, solo sabia que estaba muy cansada, y que no podía más.
Cuándo todo acabó, se levantó, pude ver todo su cuerpo, bañado por la luz del sol, sea digno de un cuadro, fue al baño, se puso una bata de baño, busco una sabana, me envolvió.
Me tomo en brazos, salió de la habitación, entro a otro que estaba justo al lado, me puso sobre la cama, y antes de salir me dijo.
— Hiciste un buen trabajo, valió la pena pagar tanto por una virgen inocente como lo eras tú.
Salió de la habitación, cerrando la puerta detrás de él, entonces sus palabras tomaron sentido en mi cabeza, y lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos, ya no era pura, ahora solo soy una más de las chicas que venden su cuerpo por dinero.
Estaba muy cansada, no había dormido en toda la noche, me dolía el cuerpo, cerré los ojos, deseando que esto fuera una pesadilla y hasta que me quedé dormida.