Después de años de matrimonio con Josue de un momento a otro me pide el divorcio. Como volveré a confiar en los hombres?
NovelToon tiene autorización de lucy curiel para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Ya está decidido
Así que ya está decidido y no hay vuelta atrás, Josué se bañó, se arregló y salió sin decirme nada, eso no era raro, pero esta vez sentí que la separación era real, me ocupé de dejar la casa limpia y me arreglé para la fiesta, por un momento pensé en no asistir, pero no quiero sentarme a llorar por alguien que ya me ha sacado de su corazón.
Además, si no vienes mi mamá no te lo hubiera perdonado, me dijo Vale. Mujercita, dijo Citlalli, aquí hay una pregunta incómoda, pero necesaria, ¿no hay posibilidad de que estés embarazada verdad? No, respondí rápidamente, no hay posibilidad, ya que además de que me estoy cuidando, tiene meses que Josué no me toca. Ustedes saben que muero de ganas por ser madre, pero estaba esperando a tener un poco de estabilidad financiera. Más bien a que tu marido se establecerá en un trabajo, me interrumpió mi amiga. Sí, tienes razón, acepté.
¿Y que piensas hacer? Me cuestionó Valentina, pues seguir la vida, por el momento enfocarme en el trabajo, no sé, a ver como se va dando todo. Ok, ya sabes que cuentas con nosotros para lo que sea, concluyó. Así que con el pecho más liviano por haber compartido la carga con mis mejores amigas, nos dormimos, el alcohol hizo su magia y me ayudó a conciliar el sueño, pues al otro día nos esperaba un pesado día bajo las órdenes de Doña Victoria.
Por la mañana, nos levantamos y nos preparamos para bajar a desayunar, Vale nos prestó sudaderas y pants porque pasada la celebración, ahora nos tocaba ayudar a dejar todo como si nada hubiera pasado. Antes de salir les pedí que guardarán en secreto lo que les conté, todavía tienes la esperanza de arreglar tu matrimonio? Me pregunto Valentina, negué con la cabeza, pero no quiero dar explicaciones que aún no tengo, ni arruinar el ambiente con mis problemas, respondí.
Desayunamos entre risas y recuerdos de la noche anterior, también recibí un regaño de Rodrigo por beber de más, y Gustavo me defendió diciendo que solo me había divertido de más, si supieran la verdad, pero en fin, pasamos un día ajetreado pero muy agradable. Y por la tarde nos despedimos y regresé a mi casa, la encontré vacía, sola y corrobore que mi aún esposo no había vuelto para nada. Todo estaba como lo dejé. Una confirmación más de que nuestras vidas ya habían tomado rumbos diferentes, aunque yo no sabía por qué, tal vez él se cansó de mis largas jornadas de trabajo, de verme siempre cansada, de mi obsesión por la casa limpia y ordenada. Tal vez dejó de quererme porque no tuvimos hijos, pero no podía permitirme un embarazo si no tenía la estabilidad económica, él siempre cambiando de trabajo, era raro que se mantuviera por más de dos meses en alguno, y las temporadas en que estaba desempleado. Muy lejos se quedaron los días felices, ahora recuerdo como me conquistó, era detallista, amable y simpático, de hecho lo sigue siendo, aunque no conmigo. En la universidad me envidiaban todas las chicas, ya que no había semana sin que me sorprendiera con rosas, globos o chocolates, siempre estaba al pendiente de mí. Como pasamos a esto, no lo sé. Lo que se es que le di muchos años a esta relación, casi 8 y de un momento a otro se acabó. Duele, pero lo que no te mata, te hace más fuerte, así que a seguir. No se si de repente se aparezca, así que acomodo mi ropa y mis cosas para, mañana y me voy a dormir al estudio en un cómodo sofá. Ya pensaré en un lugar a donde mudarme, ya que está casa es de mis suegros, así que como vine me voy, solo con mis cosas personales.
Me costó trabajo quedarme dormida, pues tenía muchos pensamientos rondando mi cabeza, pero al fin caí en un sueño tan profundo que no escuche llegar a Josué.
Desperté temprano y me preparé para irme a trabajar, por más que trate de no hacer ruido, lo desperté, muy malhumorado me preguntó que cuando pensaba irme, aún no lo sé, le respondí, pero ten por seguro que no estaré aquí ni un minuto más de lo estrictamente necesario. Solo me vio mal y se regresó a la habitación para seguir durmiendo. Yo salí deprisa, como ya era costumbre sin desayunar.
Camino a la oficina solo pensaba que este trabajo era lo único estable que tenía, ya que por mi carga laboral solo tenía a mis dos amigas y no las veía mucho, pero más vida social no tenía.
Llegué y estacioné el auto, me dirigí deprisa a mi escritorio y preparé las carpetas con la información requerida para la junta con mi jefe. Yo soy la asistente del director general de una empresa distribuidora de alimentos, estoy en este puesto, ya que aunque termine mi carrera de administración de empresas, no me he titulado, en cuanto salí de la escuela me case y entré a trabajar, pues a un mes de la boda, que solo fue por el civil, Josué se quedó sin trabajo y desde ahí sigo postergando mi tesis, pero ahora que ya estaré sola, posiblemente ya la termine.
El señor Rubén, entra y me saluda cordialmente, y sin preámbulos comenzamos a revisar los números de la semana anterior y las proyecciones para esta. Para finalizar me dice que ha contratado a varios supervisores para las rutas de distribución minorista, me pide que esté al pendiente y me informa que tenemos que preparar una junta en 15 días para que todo el personal conozca a su hijo, que ha concluido sus estudios en el extranjero y regresa para ayudar con la empresa de la familia.
Lo que me faltaba, personal para capacitar y encima que viene un nuevo jefe. Mucho trabajo y yo que tengo que buscar donde vivir. Definitivamente, debo buscar algo muy cerca, así no pierdo tanto tiempo en el tráfico.
Mi jornada termina como siempre, un poco tarde, apenas pude comer algo y muero de hambre.