Después que Aletheia descansara un día entero tras volver de ese contraataque de la noche anterior, salió con varios de sus hombros rumbo a un lago un poco lejano de la ciudad donde, según varios de sus informantes, se realizaría un ritual de sacrificio para Ápate. A medida que se acercaba no dejaba de pensar en su hermana, la cual se había separado de ella desde que eran unas niñas y qué gracias al destino había tenido la posibilidad de un futuro mejor.
No obstante, ella, ahora como Clara, debía seguir en constante guerra contra aquel hombre que les hizo tanto daño. Su rol como diosa reencarnada y como hija del líder de la secta le hizo tomar esa decisión: dedicaría su vida a evitar que más personas inocentes sufrieran. No pudo evitar sentir un nudo en su garganta, llegó a pensar si los dioses no existieran o si los humanos no se dejaran controlar por divinidades ya muertas que estaban dando sus órdenes desde el infierno, ¿Cómo sería la vida en este mundo? ¿Hubieran avanzado mucho más y salido de la época antigua en el que se había estancado?
"No, época antigua no... es época oscura"
Ese fue su último pensamiento antes de llegar al lago. No podía negar el hecho de que las creencias y religiones de la mayoría de los dioses que estaban a favor de dominar la humanidad provocaban que no avanzaran tecnológicamente, por eso era mejor denominar a la época antigua como época oscura.
Cuando observó que en efecto, en una pequeña isla en medio del lago, se encontraban varios de los seguidores de la secta de su padre, en una plataforma a punto de sacrificar a una joven, hizo que su caballo acelera su paso y empezara a correr encima del agua. Alzando su mano materializó varias flechas que dieron en las extremidades de varios hombres encapuchados, teniendo mucho cuidado de no herir mortalmente a la humana que sería el sacrificio.
Se bajó de su caballo apenas tocó la tierra, dándose cuenta de que la mujer había muerto a causa del ritual fallido. Aquello la llenó de furia, por lo que mientras sus hombres se encontraban sometiendo a los sectarios encargados de ese ritual, no dejaba de observar el cuerpo sin vida.
—Vaya, jamás pensé que recurrirías a estos medios para intentar volver del infierno—dijo la mujer hablando directamente al cadáver, que la observaba con los ojos completamente negros.
—Aletheia...—habló una voz profunda y sobrenatural, que asustaría hasta al mismo sumo sacerdote—¿Cuántas veces seguirás retrasando lo inevitable?
La sacerdotisa desenvainó y la colocó encima del pecho de la chica, sin apartar su mirada de los ojos de la que había sido un sacrificio en vano.
—Hasta que te quedes para siempre en el infierno—clavó sin piedad su espada, haciendo que el cuerpo femenino se volviera poco a poco en piedra.
—Yo volveré, no importa cuanto hagas tú o la liga universal—respondió con una sonrisa antes de desaparecer—los humanos son un mal que merece ser controlado y los dioses debemos hacerlo. Como diosa de la verdad oculta, sabes que ese un hecho que no puedes borrar de aquellos a quienes defiendes tanto.
Cerró sus ojos llena de ira, al ver como el cuerpo de la víctima se había petrificado por completo. Había logrado sabotear el ritual, así como el hecho de que fuera su propio padre quién hubiera dado la semilla para hacer el cuerpo del bebé de su hermana, pero eso no detendría a un dios sediento de venganza, quién tenía el fin de dominar al mundo aun si su alma estuviera en el infierno.
—Debo visitar el rey Anatole—dijo en un susurro mientras volvía a envainar su espada.
Ordenó a sus hombres llevar a los presos a la cárcel para ser juzgados, mientras ella se iría unos días para resolver unos asuntos, dejando a cargo a su segundo al mando. Caminó con velocidad sorprendente hasta el punto del bosque donde se encontraba el espejo que la conduciría al lado de su futuro esposo. Debía casarse lo antes posible con él, necesitaba comenzar a usar el poder que le conferiría su título como consorte real para que la guerra civil fuera un éxito.
—¡Aletheia!—escuchó gritar a Aión, quién la esperaba a lo lejos junto a Anatole—justo íbamos a buscarte, ¿Estás bien?
—Sí, solo estuve en una ofensiva hace poco—dijo un poco seria.
El rey arrugó sus cejas en señal de desconcierto, por un momento había visto a una mujer indefensa frente suyo y no a una diosa reencarnada. Pero, cuando este la vio sus miradas se cruzaron y de nuevo el descaro propio de Clara volvió a la luz.
—¿Acaso mi esposo tan guapo, que me provoca comerlo a mordiscos, me cargará en brazos como una princesa?—preguntó con una sonrisa coqueta.
Anatole no dijo nada, solo se dio la vuelta e ingresó al portar que Aión había abierto. Clara pudo observar como se alejaba rojo como un tomate, haciendo que esta riera un poco. Ese hombre, pese a ser un rey, le traía alegría en sus momentos más oscuros.
—En definitiva él será mío—se mordió un poco los labios, pensando en las muchas cosas que haría con él en su noche de bodas.
—Debía verlo en persona para creerle al primer monarca—dijo Aión quien observaba incrédulo la actitud de Clara, quién en su anterior vida no solo fue una diosa, sino que también su tía—haber renacido como humana te cambió.
El semblante de diversión de Clara cambió apenas escuchó las palabras del otro dios, ahora solo había tristeza en su mirada. Algo que hizo que Aion se arrepintiera de haberle dicho eso.
—El haber renacido me hizo ver muchas cosas y replantearme la forma de ver la vida humana—respondió caminando junto a su sobrino al portal que la llevaría de seguro al lado de su hermana—tal vez las cosas hubieran terminado distinto si hasta mi actitud hubiese sido otra.
Aión quedó en silencio mientras se teletransportaban en el portal. Aquel lamento y pesar de la diosa, también lo compartía él. No solo era miembro de la liga universal, sino que fue el encargado de entrenar a la antigua paladín en el arte de la espada. Su muerte le dolió, así como a la gente que escapó al otro mundo gracias a su sacrificio.
—Clara, Rebecca era una muerta viviente—dijo apenas llegaron al vestíbulo principal de la torre mágica—parte de su alma ya había reencarnado, junto contigo, cuando las gemelas Minrok nacieron. Luego la otra parte de su alma de reunión con su otra mitad cuando murió de manera definitiva, manteniéndose dentro del cuerpo de tu hermana menor, haciendo que pudiera usar el poder del Caos, hasta que quedara embarazada y tener un nuevo cuerpo. Estás consciente que una vez nazca el bebé de tu hermana, ¿Puede ser un peligro para todos si no logramos controlarlo?
—Si, lo sé—tragó duro ante esa cruda realidad, independiente a su verdadero origen, ese bebé tendría que pasar por obstáculos muy difíciles.
Luego de indicarle a Aión que guiara a Claire al último piso de la torre, donde se encontraba la habitación de quién una vez fue su antigua paladín, comenzó a subir las escaleras en forma de caracol en espera de su encuentro después de varios años con la hermana que perdió aquel fatídico día.
Subió con nostalgia cada uno de los escalones, viendo con detalle los cuadros con las imágenes de los que habían tenido el título de paladín desde hacía milenios. No pudo evitar sentir tristeza por ellos, desde que había iniciado su guerra contra Ápate, muchos intentaron derrotarlo en pro de la libertad y murieron en el intento. La única humana capaz de hacerlo fue Rebecca, su última paladín, pero Acosta de perder la última energía vital que le quedaba para luego morir de forma definitiva.
—Esta vez será diferente—se detuvo frente al cuadro de Rebecca, que estaba ubicado en el último piso de la torre—Ápate pagará por todo el daño causado, incluyendo tu muerte.
—Disculpe señorita...—la voz de Claire la sacó de su trance—me dijeron que usted quería verme.
Por un momento sintió como sus nervios le ganaban, aunque era una diosa con miles de millones de años de existencia, al haber renacido como humana le hizo sentir en carne propia todos los sentimientos de estos. Por lo que no pudo evitar sentirse ansiosa por el reencuentro con aquella hermanita que recordaba haber querido en su infancia.
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Comments
Francisca Alcantara
Jajaja jajaja jajaja pobre rey Clara se lo va comer con todo
2023-08-12
7
sofilove
querido rey,te van a comer hasta con papas! 😁
2023-05-03
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