"Princesa Del Clan Y Su Chico Humano"

"Princesa Del Clan Y Su Chico Humano"

"El día no indicado"

''

Volvía una vez más, repitiéndose cada meses en esa fecha, desde que era una niña.

Cuando ni siquiera había sido engendrada, su padre; el Rey Orlok, se enfrentó a un grupo de brujas que quiso tomar parte de su territorio, algo que no le era permitido a absolutamente nadie.

Como Rey, Orlok debía mantener seguros a los de su clan, incluso de esas inofensivas brujas; quienes jamás fueron consideradas como una amenaza.

Pero pese a eso, Orlok no bajaría la guardia, sabía que había en el mundo todo tipo de traidores y no se fiaria de nadie, no le cedería la oportunidad de atacarlos solo por ser amables.

Pese a que fueron llamados de muchas formas, estos tenían piedad por los inocentes y reclutaban a humanos dentro de su territorio para ofrecerles seguridad, a cambio de mantener en secreto su existencia.

Después de decadas gobernando, la llegada de estás brujas alteraron a todos los del clan, pues luego de declararles batalla por negarse a abandonar sus tierras, una de ellas maldijo a el rey Orlok.

- ¡No quiero a ningun extraño en mis tierras! - Dijo con enojo el poderoso rey, viendo a muchas de ellas retroceder. - Éste sector me pertenece y lo defenderé sin importar a cuantas de ustedes tenga que asesinar.

- Rey Orlok, solo estamos buscando un espacio alejado de los humanos y casi todos los demas han sido tomados por hombres lobos he incluso más Vampiros. - habló una de ellas. - Solo pedimos hospedaje por un tiempo.

Los ojos que anteriormente eran de un calmado miel, poco a poco se volvieron rojos, las uñas de sus dedos crecieron repentinamente y la mano de éste rodeo el cuello de la bruja, apretando con un poco de fuerza cada vez que buscaba hablar.

- He dicho que se marchen, de lo contrario no me culpes por acabar con todas las de tu especie aquí. - Dijo con furia el rey, viendo a las demás tomar sus varitas dispuestas a atacar. - ¿Y que se supone que van a hacer? ¿Convertirnos en sapo? - añadió, riendo junto a su grupo de escoltas.

- S-su majestad. - habló nuevamente la bruja que era sostenida por su cuello. - Cuando.. Cuando su hija nos busque en el futuro por ayuda, no la obtendrá. Se le negará el derecho a solicitarla como usted nos está negando el derecho a permanecer aquí. - añadió la mujer, escuchando la fuerte carcajada del poderoso Rey, quien voltea su mirada a su hermosa esposa, Luna.

- ¿Escuchaste eso, Luna? Ésta bruja dice que seremos padres. - dijo entre risas mientras que la reina reía junto a él negando. - Bruja, informate que las vampiresas no pueden concebir.

Después de sonreír, la bruja sacó su varita y apunto en dirección a la reina, quien solo reía al creer que la magia de la bruja, no podía hacerle nada.

- Tú podrás concebir una hija, pero luego de darla a luz.. Perderás la vida y no abra nada que tu amado rey pueda hacer por ti. - comentó la bruja dejando a los custodios del rey sorprendidos, pues estos habían oído sobre las maldiciones de las brujas y aunque se creyeran inmunes a ellas, sentían que también podrían recibirlas. - Pero no solo eso, esa niña será igual a sus padres hasta cada 10 de  cada mes, durante siglos, hasta que pueda romper la maldición y eso lo hará solo si una de nosotras está dispuesta a ayudarla y si no... Morirá en manos de sus enemigos o obtendrá el mismo fin que su madre.

Luego de lanzar dicha maldición y con la ayuda de su magia, todas desaparecieron de allí, dejando a los reyes con 0 preocupaciones, las cuales tendrían un poco más adelante.

(.....)

- ¡No! - el desgarrador grito del Rey se oyó por los pasillos de el castillo. - ¡Luna, no! - Y lloró, sin consuelo, sin esperar a que dicha maldición se haya cumplido. 

La reina ya no estaba, pero en su lugar.. Había una hermosa bebé que aportaba a las cualidades de la reina, su madre.

- Majestad. - habló una de las mujeres que pertenecía a el clan y quien era la leal guardia de la difunta reina. - Su hija no para de llorar.

- Enseguida iré con ella, solo dame un momento más. - dijo el rey con tristeza.

Siguió lamentándose, doliendose al ver el polvo frente a él, el cual antes era el cuerpo de la mujer que amó por décadas.

- Por ti, encontraré la forma de romper la maldición y darle a nuestra hija una vida lejos del dolor o la posible muerte. - dijo el rey. - Te lo juro.

(....)

- Es igual a la difunta reina. - comentó Kara, quien era la guardiana de la reina.

- Lo es. - respondió el rey, sonriendole a su hermosa hija con toda la ternura que pudiera existir en el mundo.

- Majestad ¿Ya tiene el nombre para la princesa? - preguntó Kara, viendo a el rey asentir. (" La reina ya había escogido el nombre de su hija, incluso sabiendo que darla a luz.. Sería perder su vida. ¿Pero como no amar a su hija? Si Vivió por decadas deseando experimentar esa hermosa etapa de embarazo y.. Para ella jamás fue una maldición, su hija era y siempre sería la mayor bendición de la cual su amado esposo disfrutaría.")

- Su nombre será.. Alani. - respondió con orgullo. - Mi hermosa princesa Alani.

(.....)

(...120 años después... )

Por fin los gritos cesaron, por fin podrían disfrutar de unos largos días de descanso, aunque sea hasta que la maldición fuera desecha.

Kara; quien permanecía haciendo guardia en la puerta junto a su adoptada hija Krima, suspiró aliviada al ver las doce marcarse, anunciando un nuevo día, el día 11, el día después de aquella maldición.

- Aún no entiendo por que no salieron por ayuda. - se quejó la joven Krima, a quien le parecía una total tontería el creer que después de 120 años, después de la muerte de el rey, esas brujas aún siguieran con su enojo.

- Krima, incluso por más de que el rey ofreciera su palacio por ayuda, las brujas se lo negaron una por una, ninguna de ellas quiso ayudar y me temo que jamás lo harán. - respondió Kara con tristeza. - La princesa tendrá que buscar la salida a esto sin solicitar una ayuda que ya le es negada al solo saber de quien se trata.

- Ella es la más fuerte de todo el clan, podría obligarlos a hacer lo que dice. - comentó nuevamente la muchacha, sintiendo un escalofrío recorrer su espalda luego de el resonar de los tacones.

- ¿ Insinúas que haga lo que mi padre hizo? - preguntó la princesa detrás de ella. - ¿Que vuelva a cometer su mismo error para que inocentes lo paguen? - volvió a preguntar. - Amo a mi padre, pero su mala decisión es la que me condena cada maldito 10 de cada maldito mes. - añadió y ambas vieron esos hermosos ojos color carmesí, ser ocultados poco a poco mientras el ceño de la mujer se fruncía.

- Princesa, disculpe usted las inapropiadas palabras de mi hija, prometo que no permitiré que vuelva a decir algo semejante. - intervino Kara viendo asentir a la hermosa y joven princesa, quien coloca ambas manos detrás de su espalda y camina en dirección a el enorme estudio para perderse allí en una nueva y aburrida reunión.

No lo quería, no quería vivir toda su vida de esa manera pero... ¿Donde encontraría la salida? ¿Como rompería con la maldición sin la necesidad de recurrir a la ayuda de esas brujas?

Pensó una y otra vez, buscó información gracias a la actualidad de éste siglo, pero no pudo encontrar nada.

A vivido años viendo como todo a su alrededor cambiaba, como todo se modernizaba a su alrededor, en sus años de vida. Pero para ella nada cambiaba, ni su apariencia, ni su poder, ni siquiera esa estupida maldición.

- Ciento veinte años pasaron, dejándome de ellos mucha experiencia para el campo de batalla, un inmenso poder para acabar con mis enemigos. - dijo viendo a través de la ventana. - pero aún no puedo encontrar la forma de destruir ésta maldicion. - añadió con cansancio.

- Alani, te prometí estar a tu lado sin importar lo que pueda pasar, te protegeré de todo y te ayudaré a encontrar la forma de romper con esa maldición. - oyó decir a Lestat, uno de sus más allegados amigos, uno que poseía sentimientos por ella.

-¿Por que dices eso? - preguntó volteandose a verlo. - ¿Acaso me crees una debilucha que no puede defenderse a si misma?

- No Alani, no es lo que quise decir.

- Entonces no menciones nada, por que lo único que necesito es encontrar una salida a esto o un buen escudo para protegerme. - respondió, caminando a su escritorio. - El hombre que estará a mi lado quizás no superará mi fuerza, pero me demostrará sus sentimientos sin la necesidad de prometer protección. - añadió, para luego caminar a la puerta. - Lestat, sé lo que sientes por mi, pero dejame aclararte los sentimientos. - lo ve. - Tú no me amas, solo sientes atracción por lo que ves por fuera y una simple atracción, no es lo que yo estoy buscando.

Dichas esas palabras, decidió tomar un descanso fuera de su palacio, visitar una vez más la ciudad de los humanos en la cual.. Se llevaba todas las miradas.

No era una mujer que presumiera de su belleza, ni mucho menos de la fortuna que su padre le a dejado, por ello es que consideraba amistarse con los humanos, volverlos cercanos sin darles la oportunidad a que descubrieran su realidad, una a la que se enfrentaba todo los días.

Por extraño que parezca, estos les eran muy interesantes, poseían ciertas características que en su mundo no se veía habitualmente.

Eran extraños, sensibles, he incluso raros de entender, pero la rareza era algo con lo que vivió por muchos años y eso.. Eso le encantaba.

- ¡Alani! - una escandalosa voz se oyó detrás de ella y supo de quien se trataba. - Alani, por fin estás aquí.

- También me da gusto volver a verte Sure. - respondió la joven, con toda la falsedad que ésta misma le brindaba. - ¿A que se debe la alegría de verme?

- Mm no mucho, mi padre dijo que le encantaría tener una reunión contigo para aliar ambos clanes y.. Lo mejor de todo es que podría darte libertad a ti, podrías pasar más tiempo en el mundo humano. - comentó, viendo sonreír a la hermosa Alani.

- Dile a tu padre que no estoy interesada en hacer tratos con alguien que pide favores a los clanes enemigos. - respondió ésta, quitando la mano de la chica que rodeaba sus hombros.

- ¡No puedes ser tan testaruda! Sabes que si mi padre lo quisiera, tú no estarías con vida. - protestó con enojo la muchacha.

- ¿Y por que motivos no a venido por mi? - Preguntó. - De todos modos, condenado ya está. - Comentó, viendo a la muchacha molestarse.

- ¡Alani!

- Ya basta Sure, Será mejor que volvamos ya o tu padre se molestará al saber que abandonamos las tierras. - intervino una de las amigas de la nombrada, provocando que ésta le asintiera para luego señalar a Alani.

- Esto no quedará así, todo lo que tienes me pertenecerá cuando mueras por esa maldición y juro que escupiré en tus cenizas.

- De acuerdo Sure, piensa como quieras, de todos modos.. Soñar no está prohibido. - contestó, para luego girarse y seguir con su camino sabiendo que ésta otra no la seguiría, pues su padre era un verdadero canalla y si no regresaba a casa.. Se las vería muy mal.

Luego de lanzar un gran suspiro, decide ingresar a un pequeño restaurante, uno en el cual debido a su maldición.. Podía degustar de cada comida como si fuera una humana más.

Pero camino a su mesa, pudo percatarse de algo que no le parecía para nada bien.

- Jaja después de todo seguirás siendo el soltero de la empresa. - comentó uno de los tantos muchachos, mientras señalaba a el joven que se encontraba de pie.

- Ya te hemos dicho Jiho, debías de traer a tu novia. - dijo otro y escuchando reír a el resto. - No importa si es linda o fea, si es real o no.. La aceptaremos. - añadió y todo nuevamente volvió a estallar en carcajadas.

¿Porque se dejaba intimidar de esa manera? - se preguntó Alani mientras negaba con su cabeza. - Como sea, no era asunto suyo.

Pero.. Ese resplandor que rodeaba a el muchacho no la dejaba ir, ella necesitaba saber por que podía ver lo que claramente nadie más veía.

- Jiho, si quieres te presento a mi prima, está un poquito pasada de peso pero para alguien como tú, no estaría nada mal. - comentó otro de los muchos que había y siguieron riendose y burlandose de el joven,Solo hasta que esa hermosa mujer se colgó de el brazo de el apuesto muchacho y vio con seriedad a el resto.

- ¿Quien se atreve a intimidar a mi hombre? - dijo Alani dejando a todo el mundo en completo silencio, con la boca abierta sin poder creer que esa hermosa mujer.. Sea la novia de ese tímido y tonto amigo suyo. - ¡Hablen!

......................

Lo especial en ti, es lo que intimida a los demás.

No dejes que tu luz se apague, no dejes que tus enemigos se sientan victoriosos. ¡Tu valor es incalculable!- Daianatay.❤

Más populares

Comments

Nmusa

Nmusa

Hola Autora… para cuando la vas a tener en audio… en lo personal me gustan más las Audio-Novelas ya que me relajo más en mi trabajo y el tiempo se pasa muy rápido

2023-11-18

3

DENXEL JALISSAT PALOMINO RAMIREZ

DENXEL JALISSAT PALOMINO RAMIREZ

excelente👍

2023-11-07

1

😍❤️Esther❤️😍

😍❤️Esther❤️😍

para serte sincera empece a leer esta historia por la portada, estoy enamorada de Yang Yang 😍🥰 pero aparte de esto, la historia está muy buena y eso que apenas es el inicio!!!😊😉

2023-10-12

1

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play