— ¿Álvaro?- preguntó Juliano al ver mí reflejo en el espejo que tenía al frente- ¿estas aquí?.
— no- respondí- es un hechizo de comunicación. Necesito hablar urgente con Victorio- pedí. El hechizo del reflejo no dura más de treinta minutos. Es una magia que requiere mucha energía de por sí solo, no me quiero imaginar lo extra que deberemos gastar para sortear la barrera. Rosita y yo quedaremos muertos luego de tanto ejercicio.
Juliano corrió a llamar a su alfa y volvió con él luego de unos minutos. Se veían como siempre, incluso ahora que eran padres de un hermoso hidrido. Les tuve envidia por un seguro, eran una familia feliz y se amaban. Algo que Valentino y yo aún no éramos. Hacia meses que habíamos empezado algo y un obstáculo ya nos evitaba estar juntos de nuevo. Ser yo un villano y ser el un emisario de ley era algo que pesaba en nuestra relación. Había días que me preguntaba si al terminar con Charles, Valentino no me metería entre rejas. Que su amor por mí era una farsa para que está vez no escapara. Sabía que no había brujo que me lograra derrotar. Quizás las cadenas del amor sean suficientes para meterme de por vida en "Las cuevas".
— Maledón- me saludó por el espejo- estás muy...- fingió pensar- reflejado- Juliano rió de su mal chiste y yo puse los ojos en blanco.
— ¡estamos en problemas!- informé- uno muy grave y requiero tus jaurías de inmediato.
— ¡Maledón!...¿Que sucede?. ¿Qué es tan grave para movilizar tropas?- me preguntó algo alterado. Ambos miraron instintivamente al bebé que jugaba con la comida en su plato.
— me encuentro en la Antártida. Sé que suena raro que este donde solo hay pingüinos y hielo pero... Es complicado... Muy complicado. Más bien la Antártida es el territorio de una tribu de antimagos. No sé si saben pero un grupo de ancianas racistas formó una asociación llamada la sociedad del velo y secuestró a la Federala Alcorta y yo la salve. Bueno, después de eso viajé en busca de mí madre, fui emboscado en el mar por la madre de mí novio y ahora estamos rodeados por un millar de lobos escoceses o si por algún lado cerca de allí- expliqué sintiéndome patético. Ni yo me entendí lo que dije.
— ¡tienes muchas aventuras!- dijo Juliano sin entender nada.
— ¿quieres que lleve a mis jaurías a la Antártida?- preguntó Victorio con cara de no entender ni un poco.
— si- dije con una sonrisa de histeria- para traerlos voy abrir un par de portales.
— me temo que no puedo, Álvaro- Victorio me dedicó una sonrisa de disculpa- mis jaurías están para proteger mí territorio y esto no me compete. Si me involucro en esta guerra podré ser atacado por algún aliado de la manada enemiga. Al fin tenemos paz, no voy a romper eso.
— ¡no entiendes!- suspiré frustrado- Charles, es el jefe del consejo internacional de magia. Su visión es eliminar a quienes hacen magia que no cumplan las normas Wika. Hay pocos países que conservan su forma de hacer magia. La Federación Mágica Argentina es uno de ellos. Si Charles gana todos será al estilo internacional. No se detendrá ahí, los lobos europeos dependen de los brujos. Intentará conquistar tus Manadas y someter a los lobos a sus federaciones correspondientes. Si los antimagos caen, la pierde a un aliado y puede perder la guerra.
— si lo dices así cuenta conmigo. Ese Charles es un amenaza para todos. ¿Como lograrás transportarnos?- preguntó Victorio con indecisión.
— alista a tus perros en tres días...¿Puedes?- pregunté pensando rápidamente un plan- te llamaré por este reflejo en tres días y los meteré a la ciudad.
— está bien Maledón. Esperaremos tu llamado y cuenta con nosotros- dijo Juliano- espero que sepas lo que haces.
Sonreí y la comunicación se cortó. Al volver al salón vi a Rosita desmayarse de cansancio, suspiré y también caí rendido en los brazos de Morfeo.
Desperté en una cama, Dragoelias me sonreía desde un costado.
—¿Que sucedió?- pregunté.
— te encontramos desmayado junto a tu compañera. Al parecer el esfuerzo los agotó- contestó.
— si, y tengo noticias. Nos apoyaran. Solo necesitamos pensar en una estrategia para ganarles- dije intentando levantarme de la cama- debo ir y hablar urgentemente con Rudolaura.
— ¡te me quedas aquí!- me dijo mientras me empujaba el pecho y me acostaba de nuevo- estás muy débil. Necesitas un descanso. Ya se te ocurrirá alguna idea y ganaremos está batalla- al terminar de decir eso me besó. Unió nuestros labios dulcemente y con delicadeza. Mí pecho explotó de anhelo. Siempre había querido que me besen así, con tanta dulzura que me hiciera creer que soy único. Me deje llevar por el momento hasta que una cara se imprimió en mí imaginación, cuándo fui consciente de quién era mí pecho se llenó de dolor y una lágrima cayó por mí mejilla. Dragoelias me había besado como si no hubiera nadie mejor que yo en el mundo, pero no era Valentino. Mí alma le pertenecía a mí Detective inútil. Besar a otro me hacía sentir miserable, como si hubiera cometido un acto atroz ( y eso que en mí pasado me había hartado de cometer actos atroces).
Lo aparté suavemente para no herir sus sentimientos y me sequé algunas lágrimas.
— lo siento- dije tratando de sobreponer me a la situación. El beso me había recordado lo mucho de menos que echaba a Valentino- pero tengo novio.
— Perdón- se disculpó incómodo- no debí besarte pero no pude contenerme. Eres especial Álvaro. Es muy afortunado tu chico de tenerte. Espero te cuide bien.
Le agradecí con una sonrisa y me levanté de la cama. No me sentía con fuerzas pero quería salir de aquel lugar y tomar algo de aire. En el camino me encontré con Lucas, me miró y no dijo nada. Me siguió hasta un balcón.
— supongo que hechas mucho de menos a Valentino- me dijo mirando la llanura cubierta de nieve- has cambiado mucho y eso me alegra.
— no sé de qué hablas- murmuré perdiendo mí vista en el horizonte. El campamento de lobos se veía como un puntito negro, perdido entre tanto blanco.
— el Maledón antiguo se hubiera bajado a ese chico... ¿Dragoelias?. He visto como te mira. Le gustas- ni que fuera brujo. ¡Ay gato sarnoso!, Si supieras lo que acaba de pasar.
— puede ser que lo extrañe demasiado- reconocí- lo necesito cerca ahora que no sé cómo saldrá todo esto. Tengo miedo Lucas. Me aterra la idea que Chales le haga algo solo para hacerme daño a mí.
— ¡Charles es un idiota!. Le daremos una paliza que jamás olvidará. Al final terminarás junto a tu chico. Ganarás, Álvaro, te fe en eso. Yo confío en ti.
Le di un abrazo a mí amigo y miré otra vez hacia el horizonte.
— lo bueno de este lugar es que podes tener pingüinos de mascotas- dije mientras miraba a una niña jugar con uno.
— o tomar energía de las aureolas. Recién escuché que hacían eso.
— Los días duran meses. Aunque no me gusta mucho eso. ¡¿Como hacen para dormir sin noche?!.
— todo un misterio está gente- nos miramos a la cara y comenzamos a reírnos como locos.
— emm...¿Chicos?- nos habló Rosita desde la puerta- tenemos un problemita con los portales.
— dime- dije sin perder la vida del horizonte.
— se necesitan tres brujos para usar la necromagia. Al menos para controlarla. Por eso está prohibida, porque es muy caótica.
— eso tiene solución- dije mirándola- antes iremos por Valentino- obviamente ignore el hecho que había dos brujas sanadoras que podían ayudarnos en el ritual. La verdad me venía bien la escusa para ir a liberarlo pronto. Habíamos acordado rescatarlo en la batalla ya que no corría ningun riesgo por ser su madre la cautora. La verdad lo necesitaba. No me veía luchando sin él a mí lado.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 27 Episodes
Comments
Sol
ojalá su mamá no le haya lavado el cerebro..
2023-05-16
0
Sol
bueno.. pero él no pensó igual cundo estuvo contigo jurandote amor y después los pillaste cojiendo a la novia
2023-05-16
0
Zaki.Z
💕💕
2022-09-16
0