En lo profundo de un bosque antiguo, donde los árboles susurran secretos de siglos pasados, un grupo de leñadores, hombres robustos y curtidos por años de arduo trabajo, se adentra en la espesura en busca de madera. La brisa fresca lleva consigo el aroma a tierra húmeda y resina, mientras las sombras juegan entre los troncos como si el bosque mismo estuviera vivo. Tras una jornada agotadora, los hombres deciden acampar bajo el cielo nocturno que era ocultado por las copas de los árboles.
Sin embargo, esa noche, mientras el fuego crepita y las risas resuenan entre las ramas, una presencia oscura acecha en la penumbra. Lo que sucederá después no solo pondrá a prueba su valentía, sino que cambiará su destino para siempre. El bosque guarda secretos que están a punto de ser revelados, y los hombres pronto descubrirán que algunas leyendas son más reales de lo que jamás imaginaron.
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CAPÍTULO 10
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La noche la pasaron en medio de la angustia por perder a sus compañeros, además de eso la voz y los ruidos del bosque no los dejaron dormir bien.
FERCHO: Antes de irnos, preparemos comida suficiente para el camino.
PEDRO: Está bien, yo cocinaré._(dijo sintiéndose observado)
LINO: Yo iré por algo de leña._(agarrando su machete)
FERCHO: No te alejes mucho._(recogiendo las pertenencias de todos)
Lino se alejó un poco para conseguir la leña, estando solo sintió un escalofrío recorrer su espalda, el hombre sentía que algo lo estaba acechando de entre las sombras. quizás era solo su imaginación debido a lo que estaba pasando o tal vez era su instinto advirtiendole sobre peligro que se ocultaba entre la neblina y los troncos de los árboles.
LINO: ((Debemos salir de aquí, lo antes posible))_(pensaba mientras iba de regreso con sus compañeros)
Cada uno se ocupó en su deber para salir lo más pronto de allí, sin embargo, en medio de la bruma matutina, estaba aquel par de ojos observándolos con burla inquietante. Los hombres sentían el peso de esos ojos y sentían el peligro inminente que los acechaba, sentían que si no salían de allí lo más pronto posible serían los próximos en morir.
PEDRO: Hoy no se escucha aquella voz, pero siento que somos observados._(dijo en voz baja)
FERCHO: No te dejes llevar por el miedo, si te muestras asustado, lo que sea que nos observa te creerá presa fácil._(buscando con su mirada)
LINO: apenas terminemos de comer nos vamos.
FERCHO: Ya las mochilas están listas y las herramientas empacadas.
Mientras ellos hablaban, el bosque se sentía respirar con vida propia, en cada exhalo evocaba aquellos secretos oscuros que solo aquellos valientes o imprudentes podrían descubrir. Esa mañana los rayos del sol luchaban por filtrarse a través de las densas copas de los árboles, el rocío cubría el suelo simulando pequeños ojos queriendo ver tu alma, el aire llevaba consigo el aroma a tierra húmeda, el aroma a putrefacción y el aroma del peligro, los pájaros rompían el poco silencio con su canto, Pero era un canto agonizante, un canto lejano formando ecos que daban a entender que esa mañana no sería tan tranquila, los mismos pájaros sabían que ese oscuro bosque reprimía cualquier vida tranquila cubriéndola con esa sombra de penumbra y terror.
PEDRO: Ya la comida está lista.
LINO: Entonces comamos y guardemos el resto para el camino.
Los tres hombres desayunaron en medio del miedo que les causaba la atmósfera de esa mañana. Al terminar, guardaron lo que les faltaba y emprendieron su viaje para salir de ese infierno llamado bosque.
FERCHO: No sé distraigan y tampoco se alejen._(guiando el camino)
PEDRO: Espero que no nos lleves con ese animal._(dijo con desconfianza)
LINO: Concéntrate en el camino, Pedro_( un poco molesto por la actitud del hombre)
FERCHO: Entonces guía el camino tu._(dijo para irse a la parte de atrás)
PEDRO: Bien, yo los sacaré de esta mierda._(dijo para ir a la cabeza del grupo)
Con Pedro guiando el camino, los hombres avanzaban por entre la maleza. Al igual que siempre, las sombras se alargaban y se retorcían alrededor de ellos creando formas inquietantes que danzaban con burla, cada leve susurro del viento traía consigo lamentos y agonía, las hojas crujían suavemente bajo los pies de los hombres, pero el sonido era disipado por el crujir de las ramas, el aullar de algunos animales y los susurros de aquella voz.
FERCHO: ¿Sabes por dónde mierda, vamos?_( preguntó, viendo que habían vuelto al mismo camino)
PEDRO: Estoy seguro que estábamos avanzando._(nervioso)
FERCHO: Que avanzando ni que monda, ¿no ves que estamos en el mismo lugar de hace dos horas?_(expresó furioso y cansado)
LINO: Fercho tiene razón, aún estamos cerca del campamento._(viendo a su alrededor)
PEDRO: No sé que está pasando, estoy seguro de haber seguido el camino para salir de aquí.
FERCHO: Que camino ni que hijueputa, nos tienes caminando en círculos._(expresó aun más furioso)
LINO: Guía del camino tu, Fercho._( un poco cansado)
FERCHO: Hagan una muesca en las ramas para saber por donde pasamos._(dijo dejando escapar un suspiro)
LINO: Está bien.
PEDRO: (( Estoy seguro que estaba siguiendo el camino de regreso….. ¿ Este maldito lugar está encantado?))_(pensaba mientras seguía a sus compañeros)
Los hombres volvieron a emprender el camino para salir del bosque, con cada paso el ruido de los animales se perdía en la penumbra dejando el lugar sumido en un silencio sepulcral, era como si el bosque mismo absorbiera cualquier rastro de vida. Era ya medio día y los hombres siempre volvían al punto de partida, era como si estuvieran caminando en un espiral.
PEDRO: Este maldito lugar no nos quiere dejar salir._(observando a su alrededor)
LINO: Concuerdo contigo, este bosque nos está haciendo caminar en círculos y cuando pensamos que hemos avanzado nos devuelve al mismo lugar._(temeroso)
FERCHO: Vamos por el camino del río, tal vez por allí sea más fácil salir.
PEDRO: Ojalá que sí.
Desviando su camino para ir por el río, los hombres esperanzados seguían caminando, después de media hora de camino, a lo lejos, podían escuchar el río murmurar suavemente, su ruido extraño se mezclaba con la tensión del ambiente.
PEDRO: Creo que ahora sí podremos salir de aquí._(viendo que por ese camino si avanzaban)
LINO: Eso espero._(comentó un poco temeroso de que todo estuviera tan calmado)
FERCHO: Saldremos de aquí y llegaremos a nuestro hogar._(optimista)
pero uno es mamá luego esposa y cuando tedas tus 5 minutos la leer por eso boy un poco atrasada