Desde pequeños fuimos los mejores amigos, jamás nos guardamos ningún secreto, mi felicidad siempre fue él, los momentos felices a su lado y los momentos amargos siempre fueron con él. Hasta que un día todo cambio empecé con este sentimiento, ¡yo no pedí enamorarme de él !, nunca quise arruinar nuestra amistad, es por eso que decidí guardarlo todo. Era mi secreto, tuve que alejarme porque ya no soportaba verlo con nadie que no fuera yo; sentía que iba a explotar es por eso que aún sin terminar la preparatoria tome la desición de irme al extranjero, en donde conocí a Henry un chico de muy lindos sentimientos que me enseñó a que siempre hay una nueva oportunidad para el amor,pensando en olvidarlo tomo la decisión de salir con Henry. Más tarde el destino nos reúne nuevamente... ¿es posible amar a dos personas al mismo tiempo?
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soltar y crecer
— aaahhh grito la mujer con espanto provocando que el joven que dormía plácidamente en la cama se levantará de golpe
—¿kylie Wilson se puede saber que haces aquí?
Kylie aún medio adormilado se quedó mirando a la señora Lewis, se supone que esperaría solo un par de minutos y al final termino durmiendo toda la noche en la habitación de Morgan.
—lo siento señora Lewis yo solo quería ver a Morgan
La señora Lewis se sentó al lado del chico, pensó en que tal vez él estaría triste por la partida de su amiga.
—cariño, pero ella se fue ayer por la noche. ¿Acaso ella no te lo dijo?
—¿decirme que?, señora Lewis.
El joven parecía estar confundido, al parecer él no tenía ni idea de que Morgan se había ido a Londres.
—¿Morgan no te contó, hijo?
— solo sé que ella se iba a ir hoy, pero dígame por qué se fue antes.
La mamá de Morgan entro en duda, ella no quería ocasionar más problemas entre los chicos, sabía que no debía hablar demás y que tenía que ser cuidadosa al hablar.
—espera un momento hijo, tengo algo que Morgan dejo para ti
La señora se levantó de la cama y salió de la habitación.
Cinco minutos después regreso con un sobre en la mano
—esto es para ti kylie, Morgan me la dejo y me dijo que te la entregará cuando ella ya estuviera en Londres.
El chico miró el sobre en la mano de la señora Lewis y lo tomó.
—gracias, fue lo único que salió de su boca sentía un nudo en la garganta y un dolor muy grande en su pecho, sentía una opresión que no lo dejaba respirar. ¿Así se siente estar deprimido? Se preguntó Kylie mentalmente, eran muchos los años que habían pasado desde la última vez que se sintió así. Es por eso que había olvidado como era sentirse roto y solo.
Él se despidió de la señora Lewis y se marchó hacia su casa. Abrió la puerta al llegar y subió a su habitación, no había nadie estaba solo y en esa soledad se permitió llorar.
No tuvo el valor de abrir el sobre, porque sabía que esa era una despedida. Y él se rehusaba a decir adiós. así que la dejo sobre la mesita de noche
Una parte de él se había roto nuevamente, los siguientes días no asistió a ninguna de sus clases, ¿qué caso tenía ir si la razón por la cual iba ya no estaba?
Nada era igual, todo era diferente desde que Morgan se había ido.
Al tercer día su madre subió a su habitación, Kylie no había estado presente en ninguna de las cenas, se la pasaba encerrado en su habitación. Cuando él, siempre bajaba y acompañaba a su madre a cenar todos los días. además había recibido una llamada de la preparatoria en donde le decían que el no se había presentado en varios días.
A la mujer se le hizo raro ver a su hijo actuar diferente. Así que fue momento de tener una charla madre e hijo.
Tocó la puerta de la habitación y nadie le respondió, se cansó de insistir que fue a su habitación y tomo las llaves.
Abrió la puerta de la habitación y se sorprendió al ver qué la habitación estaba destruida, todo estaba tirado. Las fotografías de Morgan y él estaban regadas por toda la habitación.
En el piso a un lado de la cama él estaba sentado y en las manos traía un sobre que no dejaba de mirar.
—¡¿kylie que es lo que ha pasado aquí?!
—déjame solo mamá, no tengo ganas de hablar.
—es momento de que hablemos seriamente Kylie así que no me iré de aquí hasta que me des una explicación.
—¡déjame solo! El chico alzó la voz
—¡kylie Wilson soy tu madre así que cuida como me hablas!
El chico no dijo nada solo se soltó a llorar.
La madre sintió pena por su hijo, camino hasta donde él estaba y se sentó a su lado.
—cariño sabes que puedes contarme todo, ¿dime que es lo que te tiene así?
El joven no quería decir nada, abrazo a su mamá y lloro como un niño llora al caerse de la bicicleta.
—la mujer lo abrazo y ambos estuvieron un largo rato sin decir ni una palabra.
Cuando Kylie por fin sintió que ya había sacado todo, le comento a su mamá que Morgan se había ido.
Ahora sí la mujer por fin entendió por qué su hijo no había ido a clases, porque se había perdido varias cenas juntos y porque no quería salir de la habitación.
—ella se fue mamá, dijo el chico entre sollozos, se fue y no volverá y me duele. Me duele y no sé por qué.
—amor algunas veces cuando las personas se vuelven muy importantes en nuestras vidas. Dejan una marca y cuando se van duele mucho, pero a veces es necesario decir adiós, soltar es parte de crecer cariño.
Kylie le contó a su mamá todo lo que había pasado, su madre le aconsejo que si el se había equivocado lo mejor era pedir disculpas y que lo mejor sería aclarar sus sentimientos.
—¿y qué hago con la carta mamá?
—mi mejor consejo es que la leas, puede que Morgan no te odie como tú dices, ella es una niña muy buena y es incapaz de odiar a alguien.
La señora volvió a abrazar a su hijo y se despidió de él.
—te dejaré a solas para que puedas tomar una decisión. Solo escucha a tu corazón cariño, él te dirá lo que debes hacer.
Después de decir esas palabras se puso de pie y salió de la habitación.
Kylie miro el sobre y tomo la decisión de leerla.
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Querido Kylie...
No sé cómo iniciar esta carta, pensé en solo decir adiós, pero siento que no es como deberían hacerse las cosas. Sobre todo con alguien como tú, recuerdo la primera vez que nos conocimos. Nuestras madres fueron mejores amigas toda la vida, ambos nacimos y crecimos juntos, pero nos volvimos mejores amigos cuando teníamos siete años.
Lo recuerdo muy bien porque yo estuve enferma y mamá no me dejó salir a jugar con los demás niños en ningún momento lo cual me puso muy triste. Después tu madre te envío a mi casa para que yo no me sintiera sola y así estuvimos una semana entera juntos, viendo tele, jugando y también haciéndonos bromas.
Me caíste bien desde el primer día, después cuando yo sane, tu te resfriaste y fue mi turno de cuidarte, recuerdo que estuve los siguientes días en tu casa.
Después de eso nos volvimos Kylie y yo...
Recuerdo cuando te quite tu juguete preferido porque tú habías roto a mi muñeca que lloraba y también recuerdo haberte ayudado en las peleas con otros niños. Comer helado el 4 de julio se volvió una tradicion y jamás voy a olvidar cuando me abrazaste al asustarme mucho con una película de terror sin importar como había sido tu y yo nos volvimos inseparables.
Vivimos tantos momentos juntos como cuando me defendiste de esas niñas ¿recuerdas?
Fue durante las vacaciones del 4 de julio, ellas me molestaban y decían que yo no había dado mi primer beso; lo cual era cierto.
Pero luego llegaste tú y me ayudaste. Tú Kylie Wilson fuiste mi primer beso, y eso jamás lo pude olvidar, y el collar que me regalaste siempre lo tendré conmigo.
Poco a poco empecé a sentir algo más por ti, sabía que estaba mal, que solo seríamos amigos, por qué lo prometimos; pero como le digo a mi corazón que no se enamore de ti. Si cuando estuve en mis peores momentos llegaste y me rescataste.
Ambos nos apoyamos en todo, en las buenas y en las malas. Intente reprimir todo lo que sentía y te apoye en tus relaciones fallidas. Pero al final siempre terminaba en mi habitación llorando porque me dolía verte con alguien más. No pude me enamoré de ti Kylie y es por eso que tengo que irme lejos porque no puedo continuar viviendo con ese dolor. Por fin entendí que lo nuestro se dará solo si el destino lo quiere.
Es por eso que ahora necesito tu apoyo, gane una beca en la mejor preparatoria de Inglaterra, tú sabes que mi sueño siempre ha sido estudiar literatura inglesa y está escuela me dará la oportunidad de entrar más tarde a la mejor universidad de ahí mismo.
Por favor te pido que no me odies por dejarte, solo te pido que me apoyes para poder cumplir mis sueños.
Kylie no quería decirte esto porque me daba algo de vergüenza escribirlo, pero me llevo lo mejor de ti.
Tengo el mejor recuerdo de nosotros juntos. Ese beso que me diste en mi habitación será mi mayor tesoro. Por qué me diste esperanzas de que en un futuro no muy distante podremos estar juntos, si destino y las circunstancias lo dan.
Te amo y siempre te amare Kylie Wilson eres mi mejor amigo, así que por favor no me odies. Prometo volver y quedarme a tu lado si tú quieres lo mismo.
por siempre tuya Morgan Lewis...
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El joven volvía a leer una y otra vez la carta, recordando una y otra vez todo lo que había vivido con Morgan.
Después de recordar todo se dio cuenta de que el también había empezado a sentir algo por ella.
Dejo atrás todo ese odio y esos fantasmas que le impedían ser feliz y tomo la decisión de soltar y crecer.
ya era momento de dar vuelta a la página y de encontrar su felicidad y claro que esperaría a Morgan. Lo haría porque el ya no podía ocultar más lo que sentía.
—claro que te esperaré Morgan Lewis, porque tú también me gustas, dijo mientras abrazaba la carta...
