KARLO CTM

¡sonrió bastante feliz-, ¿de verdad me darás la oportunidad de hacerte feliz?, -me preguntó, si estás de acuerdo con lo que te dije antes, no le veo problema a tratar de intentar tener una relación, pero tengo una petición, -le dije mientras terminaba de desayunar-, ¿cuál será, hago lo que me pidas, -dijo ella un poco emocionada-, no quiero a Karlo cerca de ti? Ni por casualidad, y se tan bien como tú que no se alejará por completo, así que tú me dices como hacemos, por qué no soy hombre de compartir a mi mujer con nadie, -le dije bastante serio-, ella asiente con la cabeza y sonríe, luego del desayuno recoge la mesa, limpia, se despide con un beso en mis labios y salió...

...Minutos más tarde...

Me termine de arreglar, tome unos papeles y me salí a la oficina como todos los días, trabajo relativamente cerca de mi casa, no era necesario tener que ir en auto, de lo que no me había percatado de que me estaban siguiendo, de la nada todo se volvió paranoia y comencé a sentir pasos a mis espaldas, al inicio no le di mucha importancia, digo... detrás de mi, mil personas caminan, así que no era tan importante, un rato después, al llegar a un callejón sin salida por el cual siempre paso, más de 4 tipos me cerraron el camino pateando los papeles que llevaba en la mano, maldita sea, sus risas me ponen de mal humor, pero debo conservar la calma, siempre me han dicho que debo controlar la ira y todo eso, en un segundo todo me daba vueltas y ya no supe que más pasó, lo siguiente que ocurrió fue que desperté en el hospital, ella estaba a mi lado, tomaba mi mano con mucha preocupación, ¿do-donde estoy?, -pregunte al ir abriendo mis ojos poco a poco-, mi amor estás en el hospital, no te esfuerces, todo estará bien y pronto nos iremos de aquí, lo prometo, -me dijo-, ¿hospital?, ¿qué me pasó?, -pregunte un poco confundido-, al parecer te robaron y te golpearon hasta dejarte inconsciente, te rompieron las costillas entre otras lesiones que te dejaron, pero ya estás mejor, -me dijo- maldito karlo está acabando con mi paciencia, -le dije-, señor Mikhail necesitamos hacerle algunas preguntas de lo ocurrido, -dijo el detective-, supongo que si, -le dije-

Señor Mikhail, ¿quisiera decirme cómo se provocó esas heridas?, -me dijo en un tono bastante serio-, ja! Solo a ustedes se les ocurre que el pudo atentar contra su vida, ¿cómo demonios pudo el darse patadas a sí mismo?, ¿acaso están locos?, -dijo Amelie muy enojada-, señorita tranquilícese por favor y dejé que el señor responda la pregunta, -le dijo-, yo nunca pude haberme provocado heridas como las que tengo, ¿acaso no es obvio que me golpearon de manera brutal?, -pregunte-, el oficial tomaba nota de mi comportamiento y mis respuestas, haremos una investigación rigurosa y si determinamos que estés las provocó y nos está mintiendo, será trasladado a la cárcel sin oportunidad de fianza, -me dijo el detective -, haga lo que crea pertinente oficial, -le dije-, con su permiso, yo me retiro a iniciar con la investigación, -me dijo-

Papi debemos irnos de ese lugar o te terminarán matando, estoy muy preocupada, ya esto se salió de límites, no te quiero perder, -me dijo ella entre lágrimas-, cálmate, no pasa nada, nadie acabará con mi vida y no nos iremos de cada, -le dije-, mikhail cadi te matan, ya van más de 6 meses en este puto acoso y tu solo dices que debes tener calma, la policía parece estar en tu contra y los ataques cada vez son peores, temí por tu vida, -me dijo-, solo ten calma, todo estará bien, -le dije-, ella sabía que todo estaba mal, pero trato de calmarse, voy a ir un momento a casa, hay un policía en la entrada de la recámara, nadie intentara entrar aquí, -me dijo mientras se despedía de mi-, regresa pronto, -le dije-, al salir de la habitación el policía estaba sentado allí, más le vale hacer bien su trabajo, porque si le llega a pasar algo a mi esposo mientras no estoy será su responsabilidad, -le dijo antes de irse-.

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Después de salir del hospital, fui a mi casa, debía ajustar cuentas con el mal nacido de Karlo y yo sabía lo que a él le gustaba, así que me aprovecharé de lo que tengo en mis manos, me arregle tan sexi como le gusta, si, lo enloquece cuando actuó como una perra sin sentimientos, tome el teléfono, soy yo amor mío, -le dije con voz sensual-, Amelie ¿eres tú?, -preguntó-, soy yo pendejo, claro que soy yo, tengo ganas de coger y a ti te encanta hacérmelo a lo bestia, ¿vienes o voy por ti?, -le dije incitando a provocarlo-, yo paso por ti dueña mía, -le dije antes de colgar la llamada-, me quite el vestido quedando semi desnuda, tome una copa de vino tinto, me senté en el mueble a la espera fe que el llegará...

No paso mucho tiempo cuando la puerta se abrió, (tiene llave de mi casa), me ofreció su mano, la tomé y me levanté mientras el hizo que diera la vuelta, observo mi cuerpo mientras me dio una nalgada de manera fuerte, -gemi al sentir su mano en mi piel-, me encanta lo perra que eres, -me dijo mientras me cogia a lo rudo como me gusta-, hasta que le dije que se detuviera, le levanté, tome una soga y amarre sus manos, me monte sobre el, su amigo pedia gritos mi interior, mientras solo me moví como una diosa en su cintura, el suplicaba para que lo montará, pero yo me rehusaba aruñando su pecho y mordiendo su cuello, quiero que te quede claro algo, -le dije-, ¿que será mi amor-, -respondi agitado, deseoso de ella-, tú y yo no somos y nunca seremos pareja, tú solo eres mi depósito de semen, mikhail en este momento no me puede tocar gracias a ti, adi que es tu deber dejarme satisfecha! ¿está claro?, -le dije-