Él Simplemente Él.

>>NARRA ALINA<<

Las horas pasaron hice mi maleta, y cansada de esperar que me busquen en algún momento me quedé dormida. Sentí que me sacudían muy suavemente de a poco fui abriendo los ojos, la claridad a penas entraba por el ventanal. Era Joseph, que me dijo.-

>señorita, es hora de irnos, todas sus cosas ya están en la camioneta, solo he dejado la mochila en la que supuse tiene sus cosas personales, Gael nos espera, así que por favor no se tarde...

Suspiré, no quería comprometer a Joseph, así que de inmediato me puse el calzado repasé mi apariencia en el baño y coloqué uno de los abrigos gruesos que mi jefe se había encargado de comprarme el día que empezó a nevar en una de las salidas que hizo mientras dormía probablemente.-

Bajé a la sala, Joseph me esperaba allí.-

×estoy lista. Nos vamos?...

>claro, sígame...

Caminé hasta una nueva camioneta, mismo modelo que la que Gael usó el día que me buscó en mí departamento, distinto color. Me abrió la puerta subí, la cerró, me coloqué el cinturón, todo evitando la mirada del sujeto que obviamente estaba a mí lado.-

Una vez que arrancamos intenté no perderme nada del paisaje que pasaba a nuestro lado, tantos días encerrada que todo me parecía increíble, además que prefería ignorar todo lo que pasaba, de todas formas no era complicado pues Gael iba hablando otra vez en quién sabe qué idioma. Le pregunté a Joseph en un momento que él hizo silencio, el tiempo que teníamos de viaje hasta el hotel, unas tres horas, lo cual iba a depender del estado de las carreteras.-

Como lo hacía siempre me dormí, el grito que escuché me despertó, me asusté, mucho más al ver que Gael no estaba, lo busqué con la vista y lo ví detrás de la camioneta hablando con unos ocho hombres, que eran los que llegué a contar. Joseph a su lado con su arma en la mano, todos los otros tenían dos cada uno, ya era de noche las primeras horas, todo estaba oscuro.-

*ahora qué es lo que habrá pasado?,

nada bueno seguro, porque para que estén tantos hombres armados, ayyy no estamos en peligro otra vez... Por esto mismo es que no quería seguir con él, no era capaz de darse cuenta que lo único que hacía al tenerme a su lado era exponerme a los peligros que gracias a su vida existían?...*

Hablaron por varios minutos, era más que evidente que estaba furioso por lo que ocurría, cuando volvieron él no subió atrás conmigo, sino al lado de Joseph, de copiloto, vi cómo se ponía un chaleco antibalas igual que Joseph, me quedé atenta, creí que me daría uno a mí también, pero no, simplemente se giró y me dijo.-

~nos falta un chaleco, así que quiero que lo que falta del viaje, vayas recostada en ambos asientos...

Asentí.-

~no quiero que te levantes por nada del mundo oigas lo que oigas, pase lo que pase, entendido?, si quieres puedes seguir durmiendo, pero por una vez haz lo que digo sin llevarme la contra, si no quieres verme realmente enojado. Está claro?...

La forma en que me miró más lo que me dijo fueron suficientes para que me tragara todo lo que le quería decir. Volví a asentir, y me puse de la forma en que me pidió, lo hice bajo su atenta mirada, una vez que vio que estaba como quería se giró y le dijo a Joseph que comenzara a conducir.-

No me pude dormir.-

*cómo iba a hacerlo mientras estaba en una situación como esta?...*

Me dediqué a leer, a ver una película en el celular, intentando no pensar ni crear en mi mente todos los escenarios por lo cual tenía que viajar así. Perdí la noción del tiempo que el viaje nos llevó, pero lo más importante era que pudimos llegar sanos y salvos al hotel.

La camioneta entró directamente al parking subterráneo, una vez allí nos quedamos casi media hora dentro, hasta que los hombres del equipo de seguridad llegaron y revisaron todo el lugar, cuando tuvimos permiso de bajar volvió a hacer lo de una vez anterior, vino abrió mi puerta y sin mucha amabilidad me hizo bajar tomando mi mano, luego de ahí me llevó medio a rastras hasta el ascensor donde tres hombres entraron antes que nosotros, luego Joseph, él y yo y tres más, no pude evitar temblar pues me sentía muy intimidada por sus apariencias y en especial por las armas que llevaban.

Salimos directo en una suite, los hombres se quedaron del lado de afuera Joseph se encargó de esperar a que llegara el siguiente ascensor con nuestras cosas y las dejó en medio de la sala, Gael fue directo a la nevera se sirvió un trago de algo y se sentó en el sofá, yo solo miraba a todos lados sin tener la menor idea de qué debía o podía hacer.-

~siéntate...

Esta vez preferí no provocar a la bestia, y fui para hacerlo en el sofá de enfrente, pero no me dejó.-

~ahí no, aquí...

me señaló el mismo que estaba él.-

~no te quiero cerca de las ventanas, hay dos habitaciones, la nuestra es la de la derecha tiene baño propio...

*la nuestra?, ayyy no, había decidido nuevamente que compartamos la cama...*

Cerré los ojos, iba a decirle un par de cosas pero me miró alzando la ceja en señal de que ni siquiera lo intente, así que no lo hice. Continuó.-

~son las 9, a las once viene el equipo de estilistas, si quieres ocupar primera el baño hazlo, también puedes ver los vestidos están todos en el cuarto, elige el que prefieras...

Me paré para agarrar mis maletas y llevarlas, cuando habló otra vez.-

~ah, casi lo olvidaba, te aviso que en la gala te presentaré a todos como mí prometida, te lo digo para que lo sepas, luego al regresar tendrás las explicaciones que quieras y vamos a hablar de ese nuevo asunto...

Estaba furiosa, otra vez, venía aguantándole tantas cosas que creo, me merecía ahora mismo al menos una buena explicación y alguna respuesta a por lo menos una de las tantas preguntas que me estaba haciendo.-

×vaaale, al menos podrías decirme cuando va a acabar todo ésto y voy a volver a mí vida normal, en lo posible sin que seas parte de ella?...

Lo que me dijo me golpeó como una bola de demolición, no quise tomarlo tan en serio, pero mí ingenuidad era más grande que cualquier planeta, sobretodo al creerle aunque sea un poco, sin asumir que él solo estaba usándome.-

~A ver Alaia, primero lo haría su pudiera, pero no puedo, segundo ya estás metida en ésto, desde que has aceptado formar parte de esta farsa, tercero, por más que quieras que no sea parte de tú vida eso es algo que se ha vuelto imposible, podrías decir que estás condenada a que nuestras existencias sólo puedan separarse el día que uno de los dos deje de existir en este mundo. Así que ve haciéndote la idea de que a partir de ahora eres mí prometida, pero también llegarás a ser mí mujer y en todo sentido, es eso o que empiece a tomar medidas quitándote una a una todas las cosas que amas...

Sentí las lágrimas acumularse en mis ojos, impidiendo que vea claramente.-

*acaso estaba maldíta, qué cosa tan mala habré hecho en otra vida como para tener que vivir este infierno que presentía recién estaba empezando? La idea de poder liberarme de él a cualquier precio, era algo que desde ahora tendría que tener siempre como una opción a considerar*

Ahora no podía hacer nada más que otra vez hacer lo que quería que haga. Por ejemplo ir a elegir el vestido que usaría.-

NOTA...

Dejo varios modelos no soy muy buena a la hora de elegir vestidos de gala, así que espero que por lo menos uno de todos ellos les guste.

Espero sus elecciones en los comentarios...

BESITOS...💋💋💋

Mar&Sol...

O1.-

O2.-

O3-

O4.-

O5.-

O6.-

Y dejó 2 peinaditos.-

Este en lo posible será el verdadero rostro de Alia.-

Opción 2.-