Mayday Y Sus Magníficas Vacaciones En Amphy City

La compañía de Elizabeth era agradable, aún con la sensación extraña que me causaba, era realmente bonito tener una hermana mayor; era muy lindo jugar con ella con la esponjosa nieve hasta quedar exhausta.

—Jaja, ¡Ganamos! ¡Jade! ¡Ganamos! ¡Logramos vencerla! —grité mientras abrazaba a mi hermanito—.

Jade no sabía hablar, pero sabía que él también festejaba nuestra victoria con su risita y sus pequeños saltos. Después de celebrar nuestra majestuosa victoria, me llevé a Jade conmigo para comer juntos con nuestra supuesta hermana mayor y también con nuestra abuela.

El espagueti de mi abuela no siempre era el mejor, ni tampoco supera al espagueti de mami, pero el que me comí esa tarde tenía un sabor raro, era más amargo de lo normal. Aun así me comí todo lo que había en el plato hasta dejarlo limpio.

—¿Y bien? ¿Te gusta el espagueti, Mayday?

—¿Qué? —respondí confundida con la boca llena y con las mejillas manchadas de la salsa del espagueti—.

—Jaja, veo que te encantó la comida que preparó nuestra abuela —dijo Elizabeth con una sonrisa mientras me miraba a mí antes que a su propia comida—.

—Querida, no comas tan rápido, no queremos que te duela el estómago después.

—Abuelita, no la regañes, deja que coma, así Mayday se volverá grande y fuerte cuando crezca —me acarició el cabello—. Ella debe comer.

Cuando terminamos de comer, subí a mi habitación para jugar con la consola de mi papá con mi hermano, y Elizabeth, quien intrigada me acompañó hasta mi habitación. No podía decirle que no podía jugar, así que ella terminó por acompañarnos.

—¿Mortal Cat? —preguntó confundida mientras veía la caja donde venía el juego—

—¡Sí, es el mejor juego de todos! ¡Incluso sale Cat-zero! —respondí emocionada—

A pesar de que era muy buena jugando, tanto que siempre le ganaba a mis papis, no pude ganarle a Elizabeth. Por más que intentara no podía vencerla, estuve jugando con ella hasta que mis tíos y Lana irrumpieron en mi habitación.

—¡Niñas! Saldremos un momento para buscar a su abuelo, por lo que Clara y Rubí las cuidarán mientras volvemos

—¿Eh? ¿Qué le pasó a mi abuelito?

—No lo sé, sólo desapareció así sin más, él cuidaba de Jade cuando…

—¡Nuestro abuelo se encuentra bien! —la interrumpió hablando por encima—. Ellos solo van a comprar comida, ¿no es verdad? —dijo volteando a ver a mis tíos y a Lana con una mueca de desagrado—.

—Cierto, solo iremos a buscar a tu abuelo para comprar la comida para nochebuena

—Volveremos en la mañana, así que pórtense bien que Carla y Rubí van a cuidarlas

—¿Qué? Pero… Pero… —me quejé asustada por quedarme con esas bravuconas—.

—Tranquila, como tu hermana mayor yo voy a protegerte de ellas

No sabía si confiar en ella todavía, pero no tenía otra opción, sin mis padres, sin mis tíos, sin Lana y sin mis abuelitos estaba totalmente sola contra esas bravuconas. Resignada asentí mientras evitaba mirarla a los ojos.

—Sí, esta bien

Mis tíos, mi bisabuelo y Lana salieron para ir a comprar comida, aunque desde la ventana pude ver como todos ellos se subían a una patrulla, algo había pasado en la mañana y no era muy bueno si la policía estaba involucrada.

—May, no te preocupes, todo está bien, ahora juguemos otro rato, prometo que esta vez si podrás ganarme

—¡Perdedora! —gritó Clara entrando a mi habitación—

—O debería decir perdedores, ¡Ja!

Al verlas me escondí detrás de Elizabeth lo más rápido que pude, para evitar que volvieran a hacerme daño. Clara con su actitud de alguien que se sentía superior, se acercó a Elizabeth riendo.

—Aww, miren la perdedora ya tiene a una guardaespaldas

—Dime, ¿qué vas a hacer? Eh, Lizy

Rubí se acercó a Elizabeth para empujarla, creía que mi supuesta hermana se iba a enojar o a tenerles miedo, no obstante solo sonrió, su sonrisa me hizo sentir escalofríos. Pues era la misma que yo hacía cuando tenía hambre y veía mi comida.

—Creo que alguien les habla abajo

Justo en ese momento, el timbre de la casa comenzó a sonar, lo que hizo que mis primas nos dejarán en paz. Tras irse esas dos, mi supuesta hermana se acercó a la puerta para cerrarla con llave.

—May, ¿estás bien?

—S-sí —respondí mientras abrazaba a Luna con fuerza—.

—Dime, ¿ellas te molestan seguido? —asentí abrazando a Luna—. ¿Quieres que desaparezcan? —preguntó con una mirada fría y una pequeña sonrisa en su rostro—.

—Yo… Ahm… Ellas son muy malas conmigo pero mami dice que no debo decir cosas como esas

—Mami, es muy bondadosa pero dime, ¿qué piensas tú? De verdad te sientes bien con ellas, ¿no crees que el mundo estaría mejor sin esas dos? —dijo, acercándose a mí—. voy a cambiar la pregunta, ¿sí?. Dime, ¿te sentirías mejor si ellas no están aquí?

—S-sí…

—Mayday, ¿tienes hambre? Recuerda que las niñas deben comer mucho para crecer grandes y fuertes. Dime, te traigo una hamburguesa o una pizza

—¡Una hamburguesa!

—Entonces voy a traerte una hamburguesa, ¡La mejor de todo Amphy City! ¿sí? —asentí con una pequeña sonrisa—. Que te parece, si te duermes un rato mientras voy a preparar algo para cenar

—¿Huh? Pero no tengo sue…

Elizabeth puso su dedo en mi frente, por alguna razón comencé a sentirme cansada, muy cansada tanto que muy apenas podía mantener los ojos abiertos. Elizabeth nos arropó a Jade y a mí.

—Dulces sueños —me dio un beso en la frente—. Hermanita —le dio un beso a Jade en la frente—. Hermanito… Descansen, mientras salgo por comida

—E-Eliza… Elizabeth

Antes de quedarme dormida busque a Elizabeth con la mirada por toda la habitación, pero lo único que pude ver fue como una niña de mi edad con gigantescas patas de arañas saliendo de su espalda. En un parpadeo, esa niña se desvaneció dejando tan solo rastros de pelos de araña.

—Hermana…

Intenté levantarme para buscarla, pero mi cuerpo no se movía, estaba tan cansada que no podía moverme. Debido al cansancio cerré poco a poco los ojos hasta quedarme completamente dormida.