Ayer fue uno de los peores días de mi vida. Era el aniversario de mi papá y mi madrastra.
Tuve que hacerlo casi todo porque mi hermanastra, aunque es dulce y simpática, no le gusta trabajar demasiado. Puedes llamarla perezosa, pero es una de esas chicas que sueñan con ser fashionistas.
Después de lavar los platos, fui a mi habitación. Estaba tan cansada que no me molesté en ponerme el pijama. * Me desperté con un dolor de cabeza terrible. Me bañé y me puse una camiseta negra de tirantes y unos vaqueros con una chaqueta negra a juego. Estaba a punto de abrir la puerta de mi habitación cuando oí una voz baja abajo; reconocí una de las voces: la de mi madrastra. Una parte de mí quería escuchar a escondidas y la otra solo quería acurrucarme en la cama un rato. Antes de decidir qué hacer, mi madrastra me llamó.
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7
Lo primero que noté al despertar fue que todo estaba en silencio. Abrí los ojos y bostecé.
Me levanté y caminé de puntillas hasta la única ventana de mi habitación principal. La vista era preciosa.
El sol estaba empezando a salir pero mi 'Amo' todavía estaba profundamente dormido.
Suspiré silenciosamente y me senté en el banco empotrado.
Me quedé allí sentado un rato, pensando en todo lo que había pasado el día anterior. Cole, o sea, el «Maestro», estaba siendo amable conmigo y no entendía por qué.
La primera impresión que causé fue suficiente para que me odiara.
Estaba extrañamente tranquilo y sereno. Si alguien me hubiera dicho que podía ser tan tranquilo, lo habría tomado como una broma muy ofensiva, castigada por la ley del «mundo de los vampiros». ¿O cómo debería llamar a un lugar donde solo viven vampiros?
Según lo que he oído, 'Maestro' Cole pertenece a una raza de vampiros muy peligrosa: ¡LOS SANGRE PURA!
No me habría asustado si no supiera por qué los vampiros o las personas temen a los sangre pura, y me habría asustado menos si no hubiera visto lo que los sangre pura pueden hacer.
¡Por lo que a mí respecta, Cole podría estar fingiendo!
Sé que soy pesimista, pero me importa mi vida y mi "Amo" la tiene en sus manos. Podría matarme en menos de medio minuto y ni siquiera se sentiría culpable por matarme. Podría...
Mis pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de algo arrastrando los pies.
Giré la cabeza para ver a mi tan temido 'Amo' quitando algunos trozos de papel de la mesa.
Creo que se dio cuenta de que lo estaba mirando porque se giró hacia mí y sonrió.
No le devolví el gesto porque todavía estaba luchando con dos emociones: Confusión y Sorpresa.
O sea, ¿cuándo se despertó? ¿Cómo es que no hizo ningún ruido al levantarse? ¿Sus pasos eran tan silenciosos que no los oí? ¡H-!
"Buenos días, Britt", me saludó, interrumpiendo mis pensamientos otra vez.
"Buenos días, Maestro Cole", dije.
Su expresión cambió en el momento en que lo saludé.
"Brittany, ¿podemos dejar de lado las formalidades, por favor?", dijo.
"¿Pero por qué?" pregunté.
Se dio una palmada en la cara antes de responder.
"Puedes mantener las formalidades hasta que salgamos, pero cuando estemos solos, abandona las formalidades".
"¿Pero por qué?" pregunté, repitiendo mi pregunta anterior.
"Me siento viejo cuando me llaman Maestro"
No estaba convencido, pero tampoco podía arriesgarme a que me acosaran y me azotaran. En otras palabras, fui muy cuidadoso con lo que le decía.
"Puedes hablarme con naturalidad cuando estemos solos. Ya sabes, como me hablaste el otro día". Hizo una pausa y me miró a los ojos antes de añadir: "Pero no tan grosero".
—B... Pero te enojaste el otro día porque te hablé con indiferencia. —Dije.
Él sonrió.
"Eso fue casual pero grosero y no me enojé porque hablaste casual o groseramente, me enojé porque dijiste algo sobre mi madre".
Sus ojos se oscurecieron por un segundo antes de volver a su color normal, azul.
Lo que realmente dije ese día hizo clic.
“ Debes haberle dado a tu madre momentos difíciles mientras te criaba porque obviamente te faltan modales…”
¡Mierda!
Pero no había nada malo en la afirmación.
Dije eso porque él estaba siendo un completo idiota, pero no estaba insultando a su madre, lo estaba insultando a él. Entonces, ¿por qué se enojó porque mencioné a su madre?
Cole es un vampiro realmente misterioso.
"Brittany", dijo Cole, sacándome de mis pensamientos.
"¿Eh?"
"Dije que lo sentía por mi reacción ese día, pero no me gusta que mencionen a mi mamá".
"Está bien, lo entiendo y también lo siento por ser grosero, pero lo llevo en la sangre".
No fui grosero sin motivo. Solo fui grosero con la gente que no me agradaba.
Él se rió entre dientes.
De verdad se rió, esto es buenísimo. ¡O sea, Cole se rió!
"Ser grosero no te va", dijo.
"¿Por qué?"
"Porque solo los tipos como yo", dijo, demostrándolo con la mano, "lo llevan en la sangre".
Ahí viene su ego.
"¿Y quién dijo que solo los chicos pueden ser groseros? Cualquiera puede ser grosero si quiere", dije.
"Sí. Pero el descaro no le sienta bien a todo el mundo".
"Lo que sea", dije, sin saber qué más decir.
Él sonrió de nuevo y después de eso, hubo silencio, un silencio cómodo mientras Cole se ocupaba de los documentos.
—¿Desde cuándo decidiste dejar de bañarte? —preguntó Cole rompiendo el silencio.
"¿Eh?", le pregunté confundida. "¿Cuándo te dije que no me iba a bañar?"
Se encogió de hombros.
"Sólo pregunto porque no parece que estés planeando tener uno pronto"
"Estaba esperando a que tuvieras el tuyo primero"
"Bueno, todavía estoy ocupado y el desayuno es en una hora y media, deberías terminar en treinta minutos".
Me levanté y entré en su baño. Justo cuando estaba a punto de quitarme la ropa, recordé que no tenía nada que ponerme después del baño, así que volví a la habitación.
No pude encontrar la ropa que usé el día anterior, así que decidí preguntarle a Cole, ya que ahora me sentía un poco más cómoda con él.æq
"Eh... ¿Cole?" dije.
Él tarareó en respuesta.
¿Has visto mi ropa en alguna parte?
—No me los quité por ti, ¿cómo iba a saberlo? —preguntó con la mirada fija en el papel donde garabateaba algo.
Gemí de frustración. No quería ser grosera porque todavía le tenía miedo.
Caminé de regreso al baño y me quité la ropa.
Planeaba usarlos nuevamente después del baño.
Abrí la ducha y me froté la piel con un jabón con aroma a fresa y me lavé el pelo con champú.
Después de la ducha, envolví mi cuerpo con la toalla y recogí mi ropa.
"Puedes sacar tu ropa del armario", dijo Cole, sobresaltándome.
Casi dije " sal de aquí" pero recordé que él era mi amo así que mantuve la boca cerrada.
"¿Sabes? Podrías haberme gritado eso", dije.
"No quiero molestar a otros vampiros", dijo secamente.
"Bueno, las paredes están insonorizadas".
Chloe me lo dijo cuando la regañé por no gritar pidiendo ayuda cuando Cole le hizo esas cosas horribles.
Ignoré la mirada de sorpresa en su rostro y caminé hacia el armario.
Abrí la puerta del vestidor y me encontré con ropa ordenada por color. Podría hacer un tour por el armario algún día.
Casi grité de alegría.
"¿Son todos para mí?" pregunté.
"No, la ropa de mi novia. Solo toma lo que necesites hoy. Puedo conseguirle otro par", dijo.
Mi felicidad se apagó inmediatamente.
"Oh", dije, intentando disimular la decepción en mi voz.
Se giró para mirarme y empezó a reír.
Es bueno verlo reír, pero no cuando se ríe de mí.
Fruncí el ceño.
"¿Qué es tan gracioso?"
"La mirada en tu cara", dijo entre risas.
Mi ceño se frunció aún más.
"¿Qué le pasa a mi cara?"
"No son de mi novia, son todos tuyos", dijo.
"Hijo de p…" Dejé de hablar porque llamarlo así significaría llamar perra a su madre.
Metí mi ropa sucia en la lavadora y busqué en el armario algo que me sentara bien. Finalmente elegí un vestido gris que me llegaba justo por debajo de las rodillas y lo combiné con unas bailarinas blancas.
Mi cabello todavía estaba empapado, pero no podía pedirle a Cole un secador o un cepillo porque se estaba bañando.
Me senté en el sofá y esperé a Cole.
Unos minutos después, Cole salió del baño con una toalla blanca colgando suelta de su cintura, haciendo evidente la "V".
—¡Dios mío, vístete! —dije, protegiéndome los ojos.
"Pero acabo de salir del baño", dijo con inocencia.
"Simplemente vístete y deja de hablar".
Se dirigió a su armario y sacó algo de ropa.
Observé cómo sus músculos se flexionaban y, ¡Dios mío, esos abdominales y esos paquetes!
Será mejor que deje de mirarlo antes de que me atrape de nuevo.
Desplegó una camisa negra y se la puso, luego desdobló unos pantalones negros y me miró.
"¿Vas a verme vestirme?" preguntó.
Me sonrojé y me di la vuelta.
"Tu cabello está mojado, ¿quieres secarlo?" preguntó.
"¿Aún te estás vistiendo?"
"Vea usted mismo".
Cerré los ojos y me giré para mirarlo.
"Abre los ojos".
Abrí los ojos lentamente, él estaba vestido así que abrí los ojos completamente.
Me sequé el cabello con el secador que me dio Cole y lo recogí en una cola antes de salir.
