Intentarlo De Nuevo

César, sin ninguna piedad, me arroja encima del sillón.

Mi espalda baja se lleva un fuerte golpe. Sentí un fuerte dolor debajo de mi vientre.

El miedo de que algo malo le pasara al bebé que estaba esperando, se apoderó de mi corazón.

______ César, por favor, escúchame. Yo no soy culpable de lo que pasó. Fue una trampa puesta por alguien. ____ No sabía qué más decir, me sentía entre la espada y la pared.

Sus manos ejercen la suficiente fuerza en mis hombros como si quisiera romperlos. Sus ojos eran como dos bolas de fuego arrojándose sobre mi cuerpo.

Temblé violentamente, el aire dejó de entrar por mo nariz. Abrí con esfuerzo mi boca, tragando una gran cantidad de aire.

En verdad mis lágrimas salieron de mi ojo sin ningún esfuerzo. El dolor que César me hacía sentir eres extremadamente fuerte.

Nunca pensé que iba a tener esta reacción al ver que nos hemos acostado. Al contrario, creí que me iba a tratar con cariño.

Que iba a pensar que todo fue por coincidencia, y que no fue planeado por mí. Es un demonio, un demonio furioso, queriendo absorber mi alma, como venganza.

El dolor debajo de mi vientre se hace más fuerte. Tal vez es por el miedo de ser descubierta.

____ César me estás lastimando. No sé por qué me tratas así, ¡Yo no tuve la culpa de nada!

Trate de convencer a César de que era inocente, sin embargo, no importa lo que hiciera, parecía no creerme.

____ ¡Crees que soy idiota!

_____ Qué ciego estuve al pensar que eras una chica distinta. Solo eres una astuta, inteligente y ambiciosa... has logrado lo que deseabas ___ Me dice con furia.

____ ¡No sé de qué me hablas, César!

_____ Te juro que no entiendo cómo fue que llegue hasta aquí. ____ Dije temblando de miedo.

_____ ¿No sabes cómo llegaste hasta aquí? Me seguiste, ¡No te hagas la estúpida!

César me suelta y se pone la ropa, rápidamente. Eso me da miedo, ya que, puede descubrir la verdad.

Darse cuenta de que todo fue una trampa puesta por mí. Hay si estaría en graves problemas. Cubro mi cuerpo con mis manos. Espero que a César se le pase el coraje y podamos hablar tranquilamente.

____ ¡Cámbiate! ____ Me ordena, si ninguna emoción en su cara.

Recogí el vestido del piso, cada segundo sentía más miedo. Con las manos temblorosas, recogí los zapatos y me los puse.

Otra vez, fui agarrada del brazo por la mano de César. Sin ninguna piedad, César me saca a empujones de la habitación.

Sentí mis labios secos, no tenía escapatoria, solo rezo, para que todo salga bien, no descubra que lo drogué para poderme acostar con él.

_____ César, escúchame. ____ le suplicó mientras soy arrastrada, por un pasillo.

Al llegar al final del pasillo, César se detiene frente a una puerta de color negra. Abrí los ojos, al ver el letrero en la puerta, era el cuarto de cámaras.

____ Señor Bustamante, ¿a qué debemos su vista, el área de cámaras? _____ Un hombre de mediana edad saludo a César.

...¿El área de cámaras? ¡Por Dios! Todo lo que ha hecho quedará descubierto ante los ojos de César....

_____ Quiero ver los vídeos de las cámaras de seguridad que daban a la habitación donde estaba.

En ese momento, sentí como mi cuerpo se quedó completamente congelado. Mi mentira se cayó, ante los ojos de César, estaba a punto de saber toda la verdad.

Sin poder impedirlo, fui empujada al interior, antes de que pudiera reaccionar. El hombre le muestra a César todo. Rápidamente, se da cuenta de que le he puesto una trampa.

En el video mostrado por las cámaras de seguridad, se ve claramente como bajo del taxi y lo sigo hasta la habitación. Se ve, como espero paciente, mejor oportunidad.

Mi verdadera cara queda expuesta ante los ojos de César.

_____ César, te lo puedo explicar. ____ Dije tartamudeando.

____ Explicarme, ¿Qué?

______ Es evidente, Emma, la jugada que has hecho.

Sentí un escalofrío, recorrer por completo mi espalda. Al terminar de escuchar cada palabra que salió de los labios de César.

Él pasa, por un lado, de mí, sin volverme a verme, sale de la habitación. Intenté impedir que se fuera, pero mi mano se quedó en el aire.

César desaparece del pasillo, mis lágrimas cayeron con desespero por mis ojos.

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...Narra César...

Al despertar y ver a Emma durmiendo en mis brazos. Me hizo enfurecer, no era un imbécil, para no darme cuenta de lo obvio.

Jamás me imaginé que sería capas de hacer algo tan asqueroso como esta jugada.

Pensé que era una mujer distinta. Una chica dulce, tal y como aparentaba ser. Para mi mala suerte, resulto igual o peor que todas las demás mujeres.

Emma espero, la mejor oportunidad, para drogarme y meterme su cama. Después de haber bebido el coñac, mi cuerpo tuvo una reacción extraña, no era la primera vez que me drogaban.

Por lo cual ya había experimentado esta misma sensación hace años. La muy ingenua cree que nací ayer, y que no me daría cuenta de su tonto propósito.

Emma intenta explicarme algo que no tenía explicatoria. Saqué a Emma del interior de la habitación y la llevé a empujones al área de cámaras.

No me quedaría con los brazos cruzados. Era el socio mayoritario de este club, para mí será muy sencillo saber como es que Emma llegó aquí.

La Mentira de Emma quedó expuesta ante mis ojos, era tal y como él me lo había imaginado, me drogó y espero a que la droga hiciera efecto, para poderse meter a la habitación privada y yo no pude ir a resistirme a sus caricias.

Veo a los ojos de Emma, y me doy cuenta de que todo este tiempo ha estado equivocado. Está muy lejos de ser esa chica que un día pensé que era.

Furioso, salgo del cuarto de vigilancia, me dirijo a la salida del hotel y subo a mi auto. Mientras manejo te llamo a mi asistente, quería irme de aquí y regresar de nuevo a Nueva York, luchar por el amor de Valeria, es la única mujer que vale la pena.