EL CUSTODIO DE MI CORAZÓN

Jeysi estaba escondido oyendo detrás de la puerta como su último custodio renunciaba y no podía dejar de reír en silencio.

¿Celebrando tu última travesura Jeysi? - dijo una de las ayudantes de casa -

Shuu, no hables muy fuerte Celeste te van a oír, dejame decirte que yo no hago travesuras, soy hiperactivo y no es mi culpa que ninguno tenga la condición física para seguirme - dijo encogiendo los hombros -

Hay mi niño, no creas que tus padres se van a rendir, ya llamaron a tu abuelo y no sabes el tremendo sermón que te espera - dijo Celeste, que en realidad se llamaba Jazzmin, pero Jeysi tenía la costumbre de llamar a las personas por colores según su personalidad -

Pero yo soy un santo, siempre me comportó, me parece injusto, iré a mi habitación, si me buscan dile que estaré ahí encerrado, como un buen hijo, la vida es injusta, uno siempre hace lo que le dicen, se porta bien, saca buenas notas y por unos cuantos gorilas que no pueden hacer su trabajo me culpan - se fue haciendo un puchero y una escena dramática -

Celeste solo pudo reír ante aquel acto dramático, pues conocía bien al chico, lo había visto desde que estaba en pañales, lo quería tanto como si fuera su propio hijo..... Al igual que todos los que trabajaban en la casa de los Morgan, sufrió cuando se enteró del secuestro, Jeysi era el engreído no sólo de sus padres, sino de todo el personal....

Al llegar el anciano, fue directo a la oficina donde se encontraba su hijo y su nuera, pero él no había llegado sólo....

Los 4 tuvieron una sería conversación y al acabar mandaron a llamar a Jeisy...

El jovencito se apresuró en bajar las escaleras pero desaceleró, sus pasos a mitad del camino..

Wow que ven mis ojos - pensó - ¿y ese adonis de donde salió?

Hola Totito... ¿Quién es el sr que está a tu lado?..... Espera.... Yo te conozco - dijo el joven mirando al hombre que tenía en frente -

Mi niño, claro que lo conoces - dijo el abuelo - su nombre es Daril Martínez, es el hombre que te salvó la vida ¿lo recuerdas?

Oh si, ya lo recuerdo, sr Martínez, perdón por no haberle agradecido antes, mi mejor amigo fue herido de gravedad ese día y yo no me sentía bien, le debo mi vida - dijo el chico dándole un apretón de manos al hombre -

Me alegra saber que se encuentra bien joven y será un placer trabajar para usted - dijo el hombre haciendo que el jovencito lo mirara extrañado -

¿Trabajar para mi? No entiendo - dijo mirando a su abuelo -

Claro mi niño, el sr Martínez será a partir de hoy, tu nuevo custodio, tus padres y yo hablamos al respecto y lo hemos decidido así - dijo el anciano - espero que tu manera de agradecerle el haberte salvado la vida, sea no dándole mucho trabajo y portando te bien.

Pero Totito, yo siempre me porto bien, soy un buen chico, usted lo verá sr Martínez - dijo el jovencito con una linda sonrisa -

Entonces nos llevaremos bien joven - dijo el hombre - y déjeme decirle que tengo toda la paciencia del mundo y la experiencia para cuidar niños, pues tengo un hijo de 4 años.

¿Me está comparando con un niño de 4 años? - dijo fingiendo indignación -

Bueno, según tengo entendido las travesuras que les ha hecho a los antiguos custodios son dignas de un infante - dijo el hombre en un tono bastante tranquilo -

Ahora me dices infantil - dijo riendo -

Solo digo lo que me han informado - comentó -

Toda la conversación / discusión estaba siendo observada por el abuelo y los padres que habían salido de la oficina, los tres trataban de controlar la risa ante aquella escena.