Lilith La Emisaria

gracias por eso, eres mi primera y única amiga

Ambas se dieron un abrazo y fueron a la biblioteca a esperar a que se acabarán las clases

- ¿qué haremos ahora?, nos han expulsado del salón, mis padres estarán furiosos

- los míos también, pero no hicimos nada malo, la profesora no debió de expulsarnos

- mira Lilith, ese es Eduardo

- ¿estás segura de que es él?

- por supuesto, en este colegio quien no lo conoce

- en verdad que es guapo, necesito hablar con él

Lilith se levantó de su asiento y se dirigió hasta donde él estaba, él al verla acercarse se levantó y camino a la salida

- oye espera, tengo algo que decirte

- déjame en paz, no te conozco

- quiero darte un mensaje de la profesora Yorimarkis

Eduardo se detuvo y camino hacia ella

- no la menciones, ni tú ni nadie tiene derecho a hablar de ella

- cálmate, no he venido a hablar mal de ella, quiero ayudarte a encontrar al culpable de que ella se suicidará

- ¿cómo así?, ¿tú sabes algo?, habla. Dijo Eduardo tomándola de la mano

- suéltame, me haces daño

- como me mientas haré que te expulsen de este colegio, ¿entendiste?

- sí

- empieza a hablar

- alguien estuvo amenazando a la profesora con unos vídeos y unas fotos íntimas de ustedes

- eso ya lo sé, todo el colegio lo vio

En ese momento el fantasma de la profesora se apareció

- ya vienen por mí, porfavor salva a mi madre

Lilith se quedó en shock al ver dos espectros acercarse, Eduardo no entendía porque su mirada se había congelado en esa dirección

- oye, ¿estás bien?

Él empezó a sacudirla, hasta que Lilith entro en razón

- estoy bien, mi nombre es Lilith

Los espectros se la quedaron viendo por unos segundos y desaparecieron sin llevarse a la profesora

- ¿qué fue eso?, ¿porqué no me llevaron?. Se pregunto la profesora

- ¿qué me estabas diciendo chica?. Pregunto Eduardo mientras la tenía de la mano

- la profesora se suicidó por tí, alguien la puso a escoger, eras tú o ella

- ve al grano, ¿quién la estuvo amenazando?

- no lo sé, pero debe de ser alguien que te odia, esa persona quería que ella dijera que tú eras un drogadicto y un abusador

La profesora no lo hizo, pero tu madre al darse cuenta de la relación que ustedes tenían, le estuvo exigiendo a la directora que la despidiera y que la profesora dijera que ella te había obligado, la profe no termino de escuchar y se fue hasta el lugar donde se quitó la vida

- todo fue mi culpa . Dijo Eduardo llorando

- lo siento mucho

- yo tampoco quiero vivir, nada es lo mismo sin ella

La profesora estaba escuchando todo lo que ellos estaban hablando, en el momento en que Eduardo dijo que se quería morir, ella empezó a preocuparse

- ayúdalo, es un buen chico, por favor no permitas que se haga daño

Lilith al verlo tan afligido, lo abrazo

- ¿cómo sabes todo eso?, ¿quién eres tú?, jamás te he visto por aquí. Pregunto Eduardo separándola de él

- no me preguntes como lo sé, solo confía en mí, la madre de la profesora se quiere suicidar, tú eres el único que puede impedir que lo haga

- ¿yo?

- sí, hazlo por la profesora por favor

El espíritu de la profesora le tocó la mano y él sintió su roce

- ¿cómo puedo ayudarla?

- mi mamá está en la morgue, ¿porqué le estás pidiendo a Eduardo que hable con ella?, ¿qué podría decirle él?

Lilith no le respondió a la profesora, solo le dijo unas palabras a Eduardo

- yo estoy en este colegio, ya te he dicho mi nombre, la profesora al suicidarse se echó toda la culpa, se sacrifico por ti, no la pudiste salvar a ella, pero si puedes hacerlo con su madre, ahora mismo ella se encuentra en la morgue

Eduardo se la quedó viendo mientras que Lilith caminaba en dirección a su amiga

- no puedo hacer más nada por usted, no me atrevo acercarme a su madre, él es el único que puede ayudarla. Dijo Lilith

El espíritu de la profesora desapareció, Eduardo sin saber que le diría a la madre de la profesora, se dirigió hacia la morgue

Al llegar había una señora llorando en el pasillo

- buenas tardes, ¿usted es la madre de la profesora Yorimarkis?. Pregunto Eduardo un poco nervioso, la señora asintió con la cabeza

Eduardo se arrodilló y llorando le pidió perdón

- perdóneme señora yo soy el culpable de lo que le pasó a su hija

La señora dejó de llorar y se acercó a él para levantarlo

- ¿tú eres Eduardo?

Eduardo asintió sin ver a la señora a la cara, ella le tomo la mano y le pidió que se sentara a lado de ella

Eduardo obedeció, la señora le entrego una carta y el celular de su hija

- mi hija solo tenía veinticuatro años, siempre fue buena en los estudios, jamás se había enamorado, hasta que te conoció

Sé que no debió de involucrarse con su estudiante, pero lo hizo y está fue su consecuencia, está muerta, se quitó la vida.

Las lágrimas de ambos no dejaban de caer, Eduardo leyó la carta y se la llevó al pecho.

- yo soy el único culpable, sabía que ella se sentía atraída hacia mí, pero no pude evitarlo, me enamore de ella

- mi hija era lo único que tenía en esta vida, no estaré en un mundo donde ella no esté, espero que te cuides y antes de hacer algo lo pienses

- señora, ¿usted que hará?

- voy a morir para que me entierren con mi hija, debe de estar muy asustada

- no creo que su hija hubiera querido que se quitará la vida, por favor no lo haga

- ya nada tiene sentido, cuando se pierde a un hijo, se pierde tu propia alma, estoy aquí de pie porque respiro, pero por dentro estoy vacía, mi alma y mi espíritu se está marchitando.

- señora, perdóneme porfavor, si usted se quita la vida, yo también lo haré, no quiero vivir sin ella

- no digas eso, tienes mucho por vivir