Un Demonio

...Escenas explícitas de sexo, mayores de 18 años....

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___ Espera, Espera

____ ... ¡Dime quién es este bombón! ___ Tobías nos interrumpe.

Separé mis labios por un segundo de los labios del guapo chico. Que hasta ahora desconozco su nombre.

____ Es el chico del cual te he estado hablando todo este tiempo. ____ Volví a decir.

Tobías recorre el cuerpo de mi chico. La sonrisa en sus labios dice todo. ¡Tobías ni se atreva a poner sus ojos en el hombre que yo vi primero!

____ Ok... Es un papasito. Digno hombre para ti. ____ Termina por decir.

Para demostrarle que era mío, pongo mis manos al rededor de las mejillas del guapo. Mis labios se unen otra vez a los suyos.

Siento como su lengua recorre el interior de mi boca. Lo hace perfecto, muerde mi labio inferior y otra vez me besa con pasión.

Es un beso francés, delicioso. Nada tierno, es salvaje, como tantas veces soñé besarlo. Al poco tiempo me siento aún más mareada.

Me pierdo cada vez más en su beso, el alcohol y el deseo, es una mala combinación. Mi cuerpo se calienta tanto que solo deseo hacerle el amor.

El deseo se fue apoderando de mi cuerpo, cada segundo que pasa siento mi piel arder de deseo. Me pide a gritos ser tocada por sus manos.

Me olvido de todo, solo él y yo estábamos aquí. Tobías sale de mi cabeza, y no tengo ninguna vergüenza. Me convierto en otra mujer muy distinta a la que soy.

Sus manos van bajando de mi cintura y se meten por debajo de mi vestido. Me gusta la manera en como agarra mis nalgas.

Las acaricia y luego las aprieta, las abre con mucha sensualidad. Sabe como tratar a una mujer, cómo hacer que pierda mi la poca voluntad que tenía.

Suelta mis labios y va bajando por mi cuello. Hace que mi cuerpo reacciones rápidamente a cada una de sus caricias.

Me levanta del piso, por instinto abro mis piernas y las enredo en su cintura. Siento golpear mi zona íntima con el bordo de su pantalón.

Me sostiene de las nalgas con una sola de sus manos, la otra mano, sube y baja de mi espalda y de mi cuerpo en su totalidad.

____ ¡No coman delante del hambriento! ____ Comenta Tobías en voz alta.

Sin embargo, me importa poco lo que diga, el deseo que siento por este hombre es demasiado. Lo quiero llevar al dormitorio, quitarle la ropa poco a poco e ir saboreando cada parte de su cuerpo.

Que su olor quede penetrado en mi cuerpo. Que al cerrar los ojos, me acuerde de él.

____ ¡Chicos, ya, basta! ____ Insiste Tobías.

_____ Es hora de irte. Ya sabes donde está la salida. ___ Dije señalando la salida.

____ Primor si te quitas de la puerta, podré salir...

Me doy un ligero golpe en la frente, es cierto, el guapo y yo estamos estorbando. El sexy hombre se hace a un lado, para que Tobías pueda salir.

_____ Nunca en toda mi vida he visto a un hombre tan perfecto. ____ Comenta Tobías en voz alta.

____ No... No, olvídate, él es mío, yo lo vi primero. ____ Estoy tan ebria que solo digo tonterías, me agarro fuerte del cuello de mi chico.

____ De acuerdo, solo por esta vez te dejo ganar. Necesitas un hombre como él que te enseñe los placeres de la vida.

Tobías se acerca a mí y me da un beso en la mejilla. Luego, le echa una última mirada al guapo y sale del departamento.

Escuchó que se cierra la puerta de golpe detrás de nosotros. Me emociono de más, me gusta imaginar lo que sigue.

____ ¿Me extrañaste? ___ Me susurra en el oído.

Su voz gruesa y cortante, logra hacer que mi cuerpo sienta escalofríos. Es un hombre que despierta tantas cosas en mí.

___ ¿Cómo te llamas? ___ Dije en una voz excitada.

_____ Cristian... ___ Me responde, y se deja caer sobre el sofá.

Sentados en el sofá, me excita más como siento.

Eché mi cabello negro a un lado, acerque mis labios a los de él. Nos vimos a los ojos por unos segundos, me gustaban demasiado esos ojos negros.

Son como un abismo sin fondo, el cual, solamente, se puede ver el comienzo pero no el final.

____ Cristian, hazme tuya. ____ Suplique con una voz ardiente.

_____ Tus palabras son ordenes para mí. ____ Me besa el cuello, y va barajando suavemente por mi hombro, sus labios son cálidos, hacen que mi piel se queme.

No sé en qué momento mi vestido se desliza por mi cuerpo, solo sé que ya no tengo control sobre mi cuerpo. Soy dominada por él.

Mis dedos entran por su cabello negro, mientras mi cabeza se echa hacia atrás, le doy acceso a que haga conmigo lo que se le de en gana. Son suya y quiero ser su esclava por esto noche.

Me levanta como si nada, me lleva al dormitorio donde comenzara la fiesta más impresionante para mí.

Al cerrar la puerta, soy arrojada a la cama. Me siento tan feliz, lo veo quitarse la camisa y bajarse el pantalón. Me excita ver su perfecto cuerpo.

Tiene varios tatuajes, todos son muy extraños, y muy difíciles de descifrar. Abrí mis piernas y lo llamo con mi dedo.

Nunca en toda mi vida me sentí tan cachonda. No sé si es por el alcohol, pero me muero de ganas de ser follada por él.

Se arroja sobre mí, se coloca en una posición cómoda para los dos, sus manos comienzan a recorrer mi cuerpo, y sus labios a besar mi cuello.

Van bajando por mi pecho hasta llegar a mis dos pechos. Mis pezones responden a él, se ponen duros como dos pequeñas rocas, mi piel se eriza, y en medio de mis piernas se humedecen.

Mis piernas son elevadas hacia arriba, de pronto, siento un enorme placer recorrer toda mi cuerpo. Agarré con fuerza las sábanas, mi rostro hablaba por si solo, era un placer tan inmenso.

Al terminar, me gira boca abajo, elevando mis caderas hacia arriba con una almohada. Su mano se coloca en mi cabello, y me da duro por detrás.