Yo No Amo

A la mañana siguiente después de servir el desayuno, Soledad fue a hacer guardia frente a la que fue por años su casa esperando que Juan o su madre salieran a hacer algún mandado. Llevaba una hora esperando cuando vio salir a Juan, lo siguió por una cuadra y se acercó a hablarle.

Juan - Soledad que haces acá, como estás, te ha hecho daño ese horrible hombre.

Soledad - vamos a la plaza sentémonos y conversemos acá no me siento segura.

En la plaza.

Juan - ese hombre te hizo daño, dicen que es horrible.

Soledad - tranquilo Juan estoy bien, es no nada de lo que dicen,me trata con mucho cuidado y es más me invito a llevarlos a la casa a vivir conmigo.

Juan- no me mientas, como que no te hizo daño.

Soledad- él me cuido, me llevo de compras, tengo mi propia habitación y yo decido muchas cosas en esa casa

Juan - y porque quiere llevarlos a su casa

Soledad - yo le conté como los trataban a mí y a ustedes y me dijo que si ustedes quieren pueden venir a trabajar a nuestra casa y promete tratarnos dignamente.

Juan - Soledad tú le crees, será sincero.

Soledad- yo conozco muy poco de él, pero en los pocos días que he compartido con él puedo decirte que es un hombre justo y honesto, muy alejado lo se dice de él . Además, peor que en esa casa no creo que puedan tratarlos.

Juan - nunca imaginé algo así, en esa casa cabemos mi madre y yo.

Soledad - esa casa es una gran mansión, tiene muchas habitaciones y solo vive Franco, Miguel el cochero y yo.

Juan - me gustaría trabajar en un lugar donde mi madre sobre todo sea tratada con respeto .

Soledad - te aseguro que lo será.

Juan - y cuando podemos irnos.

Soledad - hoy mismo si ustedes quieren.

Juan - no debes pedir autorización de tu esposo.

Soledad - dice que yo decida .

Juan - entonces voy a buscar a mi madre, nuestras pocas cosas y nos vamos para tu casa.

Soledad - yo los esperaré acá en la plaza no quiero tomarme con nadie de esa familia, tampoco dígame para donde se van por favor, no quiero darle excusas para que me busquen .

Juan partió y luego de casi media hora volvió con su madre muy agitada, manchada con su ropa de cocina y con dos bolsas con sus pertenencias .

Soledad- Rosita que alegría verte, vamos a mirar nueva casa, allá te explicaré todo.

Rosa - esto es una locura, los señores se enojarán mucho quizás hasta me peguen, además Juan les gritó muchas cosas malas

Juan - madre les grité solo la verdad, que son unos abusadores y maltratadores y que se les acabó .

Soledad - tranquila Rosa, nunca más volverás a sufrir un maltrato, comerás bien y tendrás la libertad de ir para donde tú quieras .

Caminaron los tres y llegaron a la gran mansión, Soledad uso su llave y abrió la puerta los llevo a la cocina les sirvió una rica comida y le explico lo que había acordado con su esposo. Rosa que no podía creerlo comenzó a llorar , incrédula de su cambio de vida, en ese momento entro Franco a la cocina .

Rosa se paró de su silla - perdón señor .

Franco - tranquila mujer, tú debes ser Rosa, siéntate mi esposa me contó mucho de ti, eres bienvenida junto a tú hijo, si quieren trabajar en esta casa mi esposa les dirá las condiciones, acá tendrán casa, comida, un salario y un trato respetuoso.

Juan - señor tendremos libertad para hacer nuestra vida.

Franco- por supuesto muchacho, serán empleados no esclavos .

Soledad - ven que los que le dije era verdad, mi esposo no miente .

Rosa - gracias, señor, muchas gracias.

Franco- yo solo tengo dos favores que pedirle.

Juan - que favores serían .

Franco- por favor yo sé que hizo de muy mala reputación de ser un hombre muy malvado, por favor mantenga esa información es por nuestra propia seguridad, y lo segundo es que yo viajo mucho y en mi ausencia deseo que cuídenlo a Soledad .

Rosa- el segundo favor no tiene por qué pedirlo, yo adoro a Soledad es como otra hija para mí, pero el primer favor no le comprendo.

Franco - necesito que la gente piense que soy un hombre cruel y despiadado, con el tiempo lo entenderán .

Rosa - como usted quiera señor .