¡Buscando Una Salida En Éste Infierno!

Lucas.

En el auto saco el papel que contiene “el acuerdo “que hice con mi pequeña, de seguro pensó que lo iba a rechazar, lo que no sabe es que daría mil veces más porque no se vaya de mi lado, lo empiezo a leer nuevamente:

Atlántico, Barranquilla, Colombia, a 10 de noviembre de 2020.

Por medio de la presente yo, Mimi Jiménez, me comprometo a llevar una relación falsa con el señor Toloza, durante el periodo del 10 de noviembre de 2020 hasta que me mude de este lugar, cualquier contacto físico que tengamos que fingir delante de los demás tendrá un valor, lo mismo pasa con los términos de cariño.

Adjunto el valor que tendrá cada muestra de cariño:

• Beso con lengua y/ o mordisco 30.000 dólares.

• Solo un roce de labios 29.000 dólares.

• Beso en la frente o cualquier otro lugar de mi hermoso rostro 28.000 dólares.

• Abrazos 27.000 dólares.

• Si besas o tocas mis manos 26.000dólares.

• Si me llama amor: 24.000 dólares.

• Si me dice mi vida: 23.000dólares.

• Si me llama bebe: 22.000dólares.

• Si me dices Princesa: 21.000dólares.

• Por decirme cariño: 20.000 dólares.

Si el señor Toloza trata de sobrepasarse o tener contacto físico en cualquier otra circunstancia donde no se requiera, será penalizado y deberá pagar el triple de los precios que ya fueron estipulados.

El pago se realizará en efectivo a más tardar 24 horas después de prestar el servicio de noviazgo falso.

Firma del empleador: ♡Lucas Toloza♡

Firmas del empleado: Mimi Jiménez.

Tal vez pensó que estoy loco por firmar algo así, cualquiera en sus cinco sentidos se hubiera rehusado y sé que lo hizo con la intención de que yo declinara la idea de hacerla pasar por mi novia.

El tiempo pensado en mi pequeña y sus ocurrencias me hizo corto el camino a la mansión de mi padre, como siempre está muy bien custodiada y la seguridad es muy estricta, antes de entrar a la mansión me requisaron, me hicieron bajar de mi auto y buscaron hasta debajo de las piedras. ¿hay un padre que desconfié de su propio hijo? Pues sí, si lo hay, el mío no confía ni en su sombra.

Luego de pasar por todos los “retenes de seguridad” entre a la mansión, la mano derecha de mi papá me estaba esperando en la puerta, Camilo empezó a trabajar con mi padre antes de que yo naciera, tiene 50 años, aunque posee un carácter fuerte y es muy testarudo lo quiero como a un tío, siempre está ahí cuando yo lo necesito dispuesto a bridarme su ayuda. Sin duda Javier se parece mucho a su padre.

Salgo del auto y él me saluda con una gran sonrisa, me apresuro a ir a darle un fuerte abrazo.

Camilo: si no metes la pata no te vería nunca por aquí condenado muchacho -dice entre risas-

Lucas: no exageres viejo, solo tengo mucho trabajo tu hijo a veces no es muy útil que digamos -bromeo con él mientras entramos a la casa-.

Lucas: y don gruño ¿está en casa?-niega con la cabeza. –

Camilo: salió a un viaje de “negocios” tardara un par de días, pero ordeno que no puedes irte hasta que él no vuelva y aclare las cosas contigo. -me mira con cara de preocupación y agrega- ¿estas seguro de la decisión que tomaste?, aún te puedes retractar.

Lucas: si, estoy más que seguro. Aunque no estoy seguro que logre sobrevivir a lo que me espera por mi elección. –se acerca y me da palmaditas en la espalda-

Camilo: quisiera tomar tu lugar, pero sabes que no puedo, te deseo suerte la vas a necesitar.

Me despido de él y camino a mi antigua habitación, todo está tal cual como lo deje hace mucho tiempo, me tiro en la cama, suelto un largo y pesado suspiro, cierro mis ojos y la primera persona que pasa por mi cabeza es mi pequeña princesa, ¿Qué estará haciendo? ¿ya comería? ¿estará pensando en mi como yo en ella?

Me moría de ganas por llamarla para escuchar esa dulce voz que me vuelve loco y que a la vez me daría la fuerza y valentía para enfrentar lo que se me viene encima.