Embarazado Del Villano(ABO)

Los meses pasaron rápidamente y en un abrir y cerrar de ojos llegó el día del cumpleaños de mi hijo así que muy temprano en la mañana arreglé el patio y lo decore hermosamente con flores, también escribí en un trozo de papel varias letras y luego las corté con hilo. cuando terminé las uni todas con otro hilo un poco más grueso y largo y las colgué en la entrada del patio, después tomé a mi hija y mientras mi hijo aún dormía fui a la panadería donde anteriormente había encargado algunas galletas y también compré algo de harina y leche la cual era bastante cara en la época también compré caña para hacerle un pastel, también compré un pollo entero y algunas especias y cuando terminé con todas mis compras para la comida fui a un lugar donde vendían juguetes de madera y vi un pequeño caballo que anteriormente le había gustado mucho y lo compré en cuanto llegué a casa puse todo en la cocina después fui a mi estudio y tome algunas hojas que había pintado anteriormente y con ellas envolví el caballo de madera, luego deje a mi hija en su cuna, ya que se había dormido por el cansancio, en cuanto la dejé allí y regresé a la cocina y comencé a preparar el pastel, cuando terminé la preparación lo dejé en una vasija de barro y esa misma la metí en otra vasija más grande que contenía agua y comencé a preparar el pollo limpiando lo lavándolo y luego colocándole todas las especias y el relleno para luego ponerlo sobre las brasas.

Después de terminar el pollo, piqué algunas verduras y la salteé con un poco de aceite, cuando terminé con las verduras las dejé a un lado y esperé a que todo estuviese para antes de que mi hijo se despertara, pero no ocurrió, ya que él se despertó un poco más temprano de lo usual y fue a buscarme, en cuanto me encontró se dio cuenta de que yo estaba cocinando así que se acercó a mí y con una sonrisa dijo:

-padre, estas preparando el desayuno?

En cuanto escuché la palabra desayuno me percaté de que no había hecho nada así que atendí con la cabeza y rápidamente busqué algo sencillo para hacer, ya que ni siquiera yo había comido, hice algo de arroz y freí un trozo de carne que había comprado anteriormente y cuando todo estuvo listo se lo serví y también aproveché para comer algo después fui a despertar a mi hija y también la alimenté con una papilla de melocotón.

Cuando terminé de alimentar a mis hijos y también de comer me di cuenta de que había dejado en la cocina haciéndose el pastel y el pollo así que corrida inmediata para ver si preparaciones estaban bien o se habían echado a perder, en cuanto llegué vi que afortunadamente todo estaba bien, así que saque del fuego el pastel y el pollo.

luego rápidamente decore el pastel con algo de crema que hice y en cuestion de minutos todo estaba listo, después de que puse todo sobre una mesa en el jardín llamé a mi hijo fue rápidamente hacia mí con su hermanita en brazos y en cuanto vio todo comenzó a sonreír y luego unas cuantas lágrimas brotaron de sus ojos, él puso a su hermanita en el suelo con sumo cuidado y luego me abrazó y agradeció.

yo me sentí realmente feliz al ver cómo aquel niño pequeño había vuelto a sonreír ya que cuando lo encontré en sus ojos se notaba la tristeza y la soledad pero ahora era completamente diferente y sus ojos y rostro irradiaban felicidad y tranquilidad.

luego de que terminamos a que largo abrazo le indiqué que se sentara y yo tomé a mi pequeña hija en brazos y también fui a la mesa luego la puse sobre mi regazo y antes de que repartiéramos el pastel comencé a cantarle la canción del feliz cumpleaños que yo conocía y lo traduje al chino, mi hija al escuchar la canción comenzo a palmear sus manitas y yo la acompañe, cuando termine la canción le di mis mejores deseos y partimos el pastel, en cuanto mis hijos probaron el pastel sonrieron y pidieron por mas, mi pequeña tenia toda su carita embardunada de crema, mientras que mi hijo se habia comido ya tres trozos de pastel, luego de que llegamos a la mitad del pastel les dije a los dos:

- niños el resto del pastel será guardado como postre para después de la cena así que Ming Ming, ve a lavarte las manos y la cara.

luego de decir eso tomé a mi hija y también le lavé la cara y las manos, después de que ambos estaban limpios regresamos a la mesa y comimos asado y rellenado con esmero el cual a mis dos hijos les encantó puesto que mi hija aún era una bebé de 8 meses comió relativamente poco y tuvo que ser con trozos pequeños ya que me aterrorizaba el hecho de que se pudiese ahogar o atorar con un trozo de pollo, cuando terminamos recogimos la mesa y dejamos todo lo que estaba sucio en la cocina después jugue un rato con ellos, tomamos una siesta, luego de que despertamos Ming Ming y yo fuimos directamente a reorganizar la casa y el jardín cuando todo estaba limpio, él cuidar a su hermanita mientras que yo fui a preparar la cena y a lavar los platos sucios.