Chispa: El Fuego De Una Pasión

Calvin aprovechó para dormir hasta un poco más tarde aquel día, quería aprovechar que estaba en casa de su madre y que estaba allí para relajarse, así que se permitió ese lujo. Aunque se levantó un poco más tarde, no dejó de hacer los ejercicios que siempre hacía.

Mientras corría por algunas calles, Calvin pasó por una plaza, donde había varios juegos y estar allí, le trajo recuerdos agradables e incluso recuerdos del primer chico que le gustó. Calvin se quedó allí parado por un tiempo, recordando las veces que estuvieron allí, el sentimiento inocente y que le causaba miedo.

Recordar aquellos episodios al mismo tiempo que le traía buenos sentimientos, también le dejaba un poco triste. Además del arrepentimiento de no haber hablado de sus sentimientos, aún existía la parte de no saber qué había pasado con esa persona.

Después de algunos minutos allí, decidió irse, necesitaba hablar con Héctor y saber cómo estaban las cosas en el cuartel. Su madre estaba en el patio cuando él llegó, le dio un beso y fue a bañarse. Cuando salió del baño cogió el celular y como había pensado, Frank le mandó un mensaje diciendo que fue a su apartamento, preguntando si no estaba, o si simplemente lo estaba ignorando.

Calvin simplemente ignoró y le mandó un mensaje a Héctor, quería saber cómo estaban los rumores sobre él. Su amigo no quería mentir sobre cómo realmente estaban las cosas y le dijo la verdad.

"Los comentarios y chistes aún permanecen y Frank vino a preguntarme si sabía dónde estabas, solo le dije que no sabía y que no era de su incumbencia."

Calvin se concentró más en la primera parte del mensaje y entendió que ellos no iban a parar con la implicancia y pensando en eso y en lo que su madre dijo, decidió llamar al capitán y hablar sobre su decisión.

—Calvin, ¿cómo estás? Para que me estés llamando incluso estando en este descanso forzado, es porque el asunto es importante.

—Estoy bien —respondió, suspirando a continuación— En cuanto al asunto, realmente es un asunto serio.

—Entonces dilo —habló el capitán, un poco aprehensivo con el posible asunto que vendría.

—Me gustaría solicitar una transferencia para otra unidad, creo que eso va a ser mejor. El clima en la unidad no va a ser el mismo y yo me conozco, tengo miedo de no aguantar las provocaciones. Señor, quiero salir de este lugar con la ficha limpia y tengo miedo de que si continúo ahí, al final no lo consiga.

Calvin fue sincero con el capitán, pues sabía mejor que nadie sus límites y él creía que su capitán entendería.

—Sabes que no puedo decir que estoy feliz con esta tu decisión, pero también entiendo y que sepas que voy a apoyarte. En cuanto a tu pedido, puedo verificar un buen cuartel para enviarte. Cuando vuelvas espero ya tener una respuesta para darte.

—Agradezco, capitán, usted sabe que por mí me quedaría en esta unidad por muchos años, pero ante esta circunstancia, no voy a arriesgar mi carrera.

Él y el capitán intercambiaron algunas palabras más y la madre de Calvin acabó oyendo la llamada del hijo, que cuando terminó la llamada, ella fue a hablar con él.

—No quiero que te pongas triste con esta decisión que tomaste, además de ser la mejor opción para ti, creo que con este cambio, cosas buenas comenzarán a suceder en tu vida. Presentimiento de madre. —Ella habló y sonrió gentilmente al hijo.

—Ojalá, madre, porque lo estoy necesitando.

Calvin decidió creer en la intuición de su madre, ya que si dependiera de su ánimo, nada de aquello que ella dijo, vendría. Él no le dijo nada a Héctor, dejaría para avisarle al amigo cuando volviera y hasta entonces, solo iba a disfrutar de la compañía de su madre y descansar.

Cuando el final del descanso de Calvin terminó, era hora de volver a la realidad, como a su madre no le gustaba que él condujera de noche, decidió coger la carretera más temprano, así también descansaba mejor del viaje, para enfrentar su trabajo al día siguiente.

Antes de que Calvin regresara, en el cuartel, el capitán llamó a Eddie hasta su sala.

—Voy a ponerte en el lugar de Calvin, ya que eres el segundo al mando.

Al oír aquello, Eddie se animó, finalmente había conseguido lo que quería.

—Es una pena que él haya tenido aquella actitud, Calvin es un gran bombero —comentó, fingiendo que sentía mucho por lo sucedido.

—No saques conclusiones precipitadas sobre el motivo de estar ocupando el puesto de él. Los motivos no conciernen a otras personas, entonces, solo estoy comunicando mi decisión, ya que tú serías el próximo, solo eso.

—No fue eso lo que quise decir. Bueno, pero me alegro de que haya pensado en mí primero, antes de poner a otra persona.

Al final del aviso del capitán, Eddie salió de la sala con una sonrisa triunfante y fue hasta Frank a compartir y provocar con aquella información.

—Tú no quisiste hacer nada sobre tu teniente, aun así él fue degradado, que sepas que ahora yo seré el primero al mando.

Héctor pasaba cerca y oyó lo que él había hablado, tomando partido en aquel asunto.

—¿De qué estás hablando? ¿Y qué mierda de actitud es esa?

Eddie, solo lo miró y respondió con la misma arrogancia de antes.

—Estoy solo hablando la verdad. Tu querido amigo ya no es más el primer teniente de este cuartel, ahora seré yo, en realidad, un puesto más que merecido.

—¿Merecido? —Héctor no aguantó oír callado— Tú siempre intentaste quemar a Calvin, siempre intentaste desmerecer el trabajo que él hace, pero mira para ti en estos días que estuviste al frente de esta unidad. Por más que Calvin actuara de forma imprudente a veces, él arriesgaba su propia vida y no la de sus colegas, como tú hiciste.

Algunos de los otros bomberos que oyeron la conmoción también se aproximaron, y aunque estuvieran con el prejuicio contra Calvin y Frank aflorado, aún concordaban con lo que Héctor habló. Frank también no dejó de hablar, aunque sus colegas pudieran hablar aún más por él defender a Calvin.

—Héctor tiene razón, tú puedes hasta pasar a ser el primero al mando, pero la forma como Calvin trabaja, aún es mejor que la tuya. Nadie aquí puede decir que se lastimó por causa de una orden equivocada de él, ya no podemos decir lo mismo de ti.

La expresión de Eddie pasó de vanagloria para una expresión de rabia. Aún en aquella situación, ellos aún insistían con aquellas comparaciones que lo dejaban irritado, él quería solo encontrar una forma de quitar aquella imagen que todos tenían de Calvin.