No Quiero Amar

Felipa se quedó sin palabras al escuchar lo que su hijo le dijo, trato de justificarse, pero las miradas de Darío su hijo eran fríos y con decepción, a ella le dolía al escuchar que había arruinado la vida a su hijo cuando su intensión era que él tuviera lo mejor, y Paulette para ella no era la mejor opción para que se case con su hijo.

Darío---: Porque lo hiciste madre, tú sabías que ella era mi vida, tú sabías cuánto yo la amaba.

Felipa---: Pero mijo no es verdad yo jamás te mentiría.

Darío---: Madre ya basta, no tapes el sol con un dedo tú le mentiste diciendo que yo había buscado otra mujer, que tenía familia y un hijo, cuando lo mismo me dijiste a mí, de ella diciendo que Paulette estaba casada y que tenía dos hijos, madre arruinaste mi vida hasta cuando ibas a mentirme.

Felipa---: Todo lo hice por tu bien, nunca una madre quiere el mal para sus hijos.

Darío---: Ella era mi bien, madre ella sufrió igual que yo, la viste sufrir por mi supuesta traición y no hiciste nada, también me viste llorar y ni si así me dijiste la verdad, eres cruel madre.

Felipa---: Ya no puedes hacer nada, ella se fue del país

Darío---: Hasta en eso mientes, el destino es bueno conmigo al ver nuestro sufrimiento, cruzo de nuevo nuestros caminos, y está vez defenderé ese amor con mi vida si es necesario.

Felipa---: Yo te lo prohíbo Darío Mieles, esa mujerzuela no será nunca mi nuera, ya está usada porque hasta un hijo perdió.

Darío---: Sí, perdió un hijo de un mal hombre que algún día lo tendré en mi presencia y le partiré la cara, porque Paulette no está sola me tiene a mí para protegerla aun si es posible de ti, reconquistaré a Paulette y seré feliz como siempre debimos ser.

Felipa---: No lo permitiré no con ella... con ella no, porque si la buscas te olvidas que tienes madre.

Darío---: Está bien madre, yo te amo, pero también está mi felicidad, adiós madre no te preocupes buscaré a una chica para que te cuide.

Felipa---: No busques a nadie déjame morir, eres un mal agradecido, después que yo te di tanto amor y ahora me dejas por una mujerzuela.

Darío---: Es mejor que me vaya, madre no te estoy pidiendo permiso, solo te lo estoy comunicando.

Darío salió de la presencia de madre, busco su maleta, y salió de la casa dejando atrás a su madre histérica que al ver que su hijo cerró la puerta empezó a destrozar todo lo que tenía en frente, su rabia era tanta que sus labios empezaron a temblar, por su parte Darío se fue con una pequeña esperanza que su madre recapacite y lo deje ser feliz con la mujer que él ama con todo su ser.

Él esperaba pacientemente un taxi, y al ver a Kerly se esmeró por saludarla, pero estuvo una respuesta negativa de parte de Kerly, ella reclamó y a su vez le echo la culpa de su infelicidad.

Kerly---: Por tu culpa, soy infeliz.

Darío---: No te entiendo Kerly, porque me dices eso.

Kerly---: Si no hubieras abandonado a mi hermana yo hubiera conocido sin problema a Joel y ahora fuera muy feliz a su lado, pero tú abandonaste a mi hermana y él se enamoró de Paulette a mi no me amo como la ama a ella, aunque hice lo posible de separarlos igualmente no funcionó, no consume mi matrimonio ahora soy infeliz por tu culpa (se va).

Darío se despero escuchar los reclamos de Kerly lo dejo perplejo, aún no entendía nada pero no sé iba a ir sin respuestas no iba acometer el mismo error que antes, también recordó cuando Paulette mencionó bajo su embriaguez a un tal Joel.

Berta---: Sobrino cuando veniste.

Darío---: Hace una hora, tía ¿que paso con Paulette?.

Berta---: Ven hijo, siéntate creo que es hora de que sepas la verdad, de la cual yo también tuve culpa de tu infelicidad.

Berta invito a sentarse a Darío en un banco público, cerca del parque, ella le contó todo acerca de Paulette, él sonrió con mala ganas al escuchar de la traición que le hizo aquel hombre junto a su hermana, él entendió la razón de que Paulette le dijo que no quería amar a nadie, era porque su bondadoso corazón estaba roto.

Darío---: Desgraciado como le pudo hacer eso, ninguna mujer merece tener esa humillación.

Berta---: Ahora sabes la verdad, ya depende de ti, ella es una buena muchacha.

Darío---: Lo sé tía, por eso juro que la reconquistaré.

Berta---: (sonríe) Te pareces tanto a tu padre, hijo solo perdona a tu madre talvez ella pensó que era lo mejor alejarte de ella sin imaginar que tú ibas a sufrir.

Darío---: Pero el destino es bueno nos juntó otra vez y está oportunidad no la desaprovecharé, nos vemos tía cuida a mi madre, no la dejes sola estaré pendiente de ella.

Berta---: Ve tranquilo hijo, cuidaré a tu madre.

Darío subió al taxi y regreso a la ciudad de Guayaquil estaba libre y no podía dejar más tiempo para enfrentar a su madre, también se culpo como un imbécil, ya que él le creyó todo a su madre y no busco a Paulette para salir de dudas, prácticamente él también fue culpable de todo el sufrimiento de Paulette y del mismo, también recordó cuando escucho a Paulette decir que no quiere amar, pero él se encargará de hacerle cambiar de opinión.

Darío---: Te amo Paulette, te juro que no descansaré hasta lograr que vuelvas a creer en mí.

Mientras tanto en el edificio de la constructora León, Joel recibía un informe de un detective privado que había contado, para buscar a Paulette.

Joel---: Quiero todas las respuestas a mi pregunta.

Detective---: Si señor no fue tan difícil localizarla.

Joel---: En que parte de México está.

Detective---: Ella no está en México, está en la ciudad de Guayaquil, y trabaja como gerente se una sucursal de almacén de electrodomésticos.

Joel---: Porque la familia dijo que estaba en México, porque mintieron, tienes la dirección del almacén.

Detective---: Si señor, está es la dirección.

Joel---: Su paga, usted es un buen detective.

Después que el detective se retiró de la oficina Joel llamo de inmediato a su asistente, él ya había encontrado a Paulette ahora era hora de buscar una estrategia para reconquistarla.

Asistente---: Dígame señor.

Joel---: Hazme una reservación en un hotel en la ciudad de Guayaquil, quiero la estadía de 15 días.

Asistente---: Si señor.