Un Jefe Pervertido

Apenas nos colocamos en nuestros puestos de trabajo, llegaron las complicaciones...

En mi escritorio tenía una carta del Abogado Ximenez, pidiendo una reunión con Urgencia, lo que quiere decir que tendré que pedir un día libre y empezar con todo el proceso legal. Lastimosamente, creí que Osvaldo se olvidaría de ir en contra, pero veo que sigue adelante, aunque espero saber la razón, porque durante ocho meses no escribió para saber de su propia hija.

Varias horas más tarde, llegó Dilia.

- ¡Hola, querida! - Saludó muy simpática.

- Señorita Dilia, ¿En qué puedo ayudarla?

Dilia - Tengo una reunión con Brandon.

- Disculpe, creo que se equivocó, yo no tengo nada en su agenda.

Dilia - bueno, es cierto, vine de imprevisto y sé que gustará la idea.

- Permiso, voy a avisarle al señor de su visita.- Dije disimulando el enojo que me daba verla aquí.

Sabiendo que se le frustró la boda con Brandon, puede que quiera acercarse de otra forma.

Dilia- Claro, querida. - Tanta simpatía provoca náuseas.

Fui hasta la oficina de Brandon, golpeé la puerta y al permitírmelo, ingresé.

Brandon - Cariño, ¿Qué sucede?

- Dilia está afuera, vino a visitarte y dijo tener una idea que te gustará.

Brandon - ¿No tenía ninguna cita registrada en la agenda?

- No.

Brandon - Listo, entonces no la dejes pasar.

- ¿Seguro? - Me sorprendí un poco, pero la felicidad que tenía en ese momento era lo mejor, al menos esa bruja hoy no podrá verlo.

Brandon - Sin cita no será atendida y si solicita una, dale para dentro de varios meses, inventa algo.

- ¿Qué?

Brandon - Cariño, sé que Dilia puede crear quinientas escusas para venir, pero no quiero atenderla. Ni hoy, ni mañana, ni nunca.

- ¿Por qué?

Brandon - Por lo que me dijiste, siempre me miró como si fuera un manjar a punto de comer, y obvio no puede. No se lo permito por nada del mundo. Y tal vez, al verme soltero, quiera acercarse.

- ¿Soltero?

Brandon - Claro, divorciado de su hermana y sin novia - Me miró curioso.

- Ajá, sin novia.

Brandon - Bueno, formalmente no tengo novia, para todos los que me conocen, estoy soltero.

- Claro, es cierto - Si desea una reacción a sus palabras, la va a tener, que no siga.

Brandon - Mira lo que Internet dice - Me pasa el celular con una "primicia".

"El hermoso e importante hijo de Eduardo Belmonte tomó sucesión como CEO de la empresa familiar. Se dice que luego de su divorcio, hace dos años, no volvió a formalizar con ninguna mujer. ¿Quién será capaz de enamorarlo y sacarlo de su soltería?"

- Interesante. Al parecer los chimenteros buscan mujer para ti.

Brandon - Veo que sí, pero que lástima por ellos porque tengo una sexy secretaria que conquistó mi corazón

- Ah, mira tú - Estoy tan celosa que no puedo más.

Brandon - ¿Estás bien?

-Sí, iré a despedir a la señorita Puig, creo que he pasado mucho tiempo aquí.

Brandon - OK.

Salí de la oficina y Dilia estaba hablando con la mujer de limpieza.

- Señorita. ¿Ha pasado algo? - tal vez hubo un problema e insultó a la empleada.

Dilia - No, querida. ¿Y bien, puedo entrar?

- No, el señor dijo que sin una cita no puede recibirla.

Dilia - ¿Una cita? - Se le iluminaron los ojos.

- Sí, cita, o sea que sin agendarse previamente no puede recibirla.

Dilia - Ah - Miró al piso haciendo puños con sus manos - Entonces deme un día

Me senté en mi escritorio y le ofrecí un día muy lejano.

- Listo, ya fue registrada para dentro de cuatro meses.

Dilia - ¿Cuatro meses?

- Sí, antes es imposible, no se puede. Lo siento.

Dilia- Está bien, esperaré pacientemente. Gracias. - Se retiró sin hacer un escándalo.

¿A qué habrá venido? Lo que sea, no era tan importante, lo que quiere decir que solo quería ver a Brandon.

Es bueno que no haya hecho un escándalo por hacerla esperar cuatro meses, pero en este tiempo pueden pasar muchas cosas, y espero que una de ellas sea que se le vaya la idiotez de estar con él.

Amanda estaba en su escritorio y empezó a reírse después que nos quedamos solas.

- Fue buena idea darle una cita tan lejana - Me dijo.

- El crédito se lo gana Brandon

Amanda - Se nota que no la quiere cerca

- Es lo mejor.

Amanda - Exacto y voy a implementarlo cuando vengan mujeres a ver a mi novio.

- Sí, celosita.

Nos reímos un poco y luego se nos hizo la hora del Almuerzo.