Candela es una joven que vivió toda su vida cómo una reina, hija de un político muy reconocido y una ex modelo famosa, siempre lo tuvo todo, era muy mimada y consentida por sus padres pero todo eso cambio cuándo su madre muere en un misterioso accidente dentro de su propia mansión..
Unos meses después su padre vuelve a casarse y es donde comienza una pesadilla para Candela, hasta que su padre decide aceptar un trato con un millonario y casarla con el..
La vida de Candela se vuelve un infierno, años después se vuelve a encontrar con su antigüo guardaespaldas quién fue su mejor amigo, pero Mauricio ya no es quién era antes, ahora es un temido Mafioso italiano, se volvió frío, desalmado y ve a las mujeres cómo juguetes para satisfacer sus necesidades..
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Capítulo 23
( Alexa )
Hemos tenido que vender varias joyas que Jonh nos había regalado para poder pagar los sueldos de los empleados, estoy tan furiosa, cuando Adams me corrió como un perro de su casa no me permitió traerme nada de lo que el me había comprado y ahora todos esas joyas nos harían falta para empeñarlas en alguna tienda, no puedo creer en la situación que nos encontramos, mamá tuvo que despedir a casi todos los guardias de seguridad, quedando sólo dos que cuidan la mansión de noche y el encargado de la entrada, a los choferes también tuvimos que despedir como a las empleadas, esto es el colmo juro que cuando tenga a la maldita infeliz de Candela frente a mi la ahorcó con mis propias manos..
Es tan asqueroso tener que hacer nuestra propia limpieza de la inmensa mansión, tener que cocinar o lavar la ropa, es desesperante, yo que me había acostumbrado a hasta que me alcanzarán la cuchara cuando se me caía al suelo y ahora tengo que limpiar, solo me consuela que esto es temporal y pronto volveremos a nuestra vida de divas, porque si tuviera que hacer esto por varias semanas creo que me moría..
Habíamos pensando en vender algunos muebles antiguos que valen fortuna o algunas de las pinturas famosos que hay en esta inmensa mansión como La Giaconda del famosísimo pintor Leonardo Da Vinci o la pintura de Napoleón cruzando los Alpes del pintor Jaques Louis David valuada también en una importante suma de dinero cómo otras de las tantas pinturas que hay aquí, ya habíamos hablado con la gente que nos comprarían los cuadros cómo los muebles pero para nuestra sorpresa el abogado no nos permitió tocar nada, nos dijo que no podíamos tocar absolutamente nada hasta que no se hiciera la lectura del bendito testamento, mientras tanto no podíamos tocar ni un mísero tenedor, no se porque tanto alboroto cuando somos las dueñas y señoras de todo esto...
Cuando podamos manejar nuestro dinero nuevamente lo primero que haremos con mamá es pagarle a unos tipos para que le den la paliza de su vida al incompetente abogado ese..
Nuestros planes se vinieron a bajo al no poder realizar la venta, nosotras que ya habíamos hecho hasta planes de lo que haríamos con el dinero disponible, con tristeza tuvimos que vender prácticamente todas las joyas que nos quedaban teníamos deudas que pagar y comprar alimentos ya que no nos quedaba ni un mísero paquete de azúcar, esto era tan denigrante..
Acostumbradas que los choferes nos llevarán a todos lados y ahora debíamos de andar en taxi o caminando ya que ni los autos de alta gamma podíamos tocar, caminando llegamos hasta el supermercado más cercano, las demás personas que estaban comprando nos miraban con burla o asombro ya que somos muy reconocidas, hemos salido en varias revistas o en televisión cuando el gobernador estaba vivo, por ende era poco común ver a la viuda de Bleind o a su hija empujando un chango con mercadería cuando se supone que eso lo hace la servidumbre..
Fueron los minutos más largos de nuestras vidas, quería tener un arma y dispararle a todas esas viejas metiches que tanto nos observaban y cuchicheaban a nuestras espaldas..
Salimos del supermercado cargadas de bolsas, ya había olvidado cómo era llevar está vida de gente pobre, Dios me libre de eso, me muero si tuviera que vivir cómo antes
Caminamos unas tres cuadras cuando un auto modelo viejo color negro paso a nuestro lado muy despacio, no le prestamos atención y seguimos renegando con las pesadas bolsas mientras mi madre lloraba por sentirse tan humillada de esta manera y puteaba de toda las maneras existentes a Candela, porque si había una sola culpable de todo esto era la insípida estúpida maldita esa de Candela.. Ah cómo la odió..
Cuando doblamos la cuadra decidimos cortar camino por un callejón, pero fue la peor decisión que pudiéramos tomar, a mitad del callejón el mismo auto negro que nos había pasado hace un ratito estaba parado cómo esperando algo o a alguien, con un poco de miedo seguimos avanzando, cuando estábamos a pasos del mismo la puerta se abrió bajando un deplorable Adams, se lo veía mucho más delgado, ojeroso y su semblante daba miedo, camino a paso apresurado hasta nosotras y sin previo aviso, me tomo del cuello con toda la fuerza del mundo, comenzó a levantarme del cuello mientras sentía como cada vez me faltaba más y más el aire, por primera vez sentí tanto miedo, creí que moriría, mientras mi madre gritaba sin parar
- Ayuda!! Ayuda!! Alguien que me ayude!! Estan matando a mi bebé!!
- Maldita zorra! Dime en dónde está!! - dijo Adams mientras me sujetaba con tanta fuerza que creí que me arrancaría la garganta
- No.. No.. de quién.. me.. hablas - dije con dificultad ya que no me quedaba aire en los pulmones
- La otra zorra de tu amiga la verdadera culpable de la desgracia de mi familia.. Dime dónde está!!
- No.. se.. lo juro - dije y era verdad no sabíamos dónde estaba ella era así pasaban meses o incluso una vez llegó a pasar un año sin tener novedades de ella..
- No mientas.. Dime dónde está o juro que te mató aquí, total ya lo perdí todo, ya nada me importa.. Pero tu y esa zorra pagarán todo el daño que me hicieron, cómo el haberme envenenado el alma en contra de Candela. - dijo y dale otra vez la bendita candela siempre sale inocente en todo la pobrecita como si fuera la virgen María
- Animal.. Asesino.. Suelta a mi bebé.. Suéltala malnacido - gritaba mi madre mientras lo golpeaba con su cartera lo cuál parecía ni siquiera sentir
- No.. Puedo respirar - fue lo último que dije y todo se volvió negro
Desperté un día después en una habitación de un hospitalucho de cuarta, me dió náuseas de solo ver el asqueroso lugar en dónde me encontraba, al lado de mi cama había una mujer que acaba de dar a luz y escuchar al mocoso llorar me daban ganas de asfixiarlo con la almohada no se cómo la gente puede querer hijos si son lo mas repugnantes del mundo..
- Princesita gracias al cielo despiertas ese animal inhumano casi te mata - dijo mi madre acariciando mi suave cabello
- Mamá que paso? Sácame ya de este repugnante lugar, como me pudistes hacer esto? Traerme a este lugar de mala muerte, con esta gentuza? Sácame ya de aquí - le exigí
- Unos hombres que pasaban por el callejón me ayudaron a sacarte a la bestia salvaje esa de encima de ti, cuando caiste al suelo pensé que estabas muerta mi niña hermosa, mira nada más como te dejo tu preciosa piel toda marcada - dijo mi madre acariciando mi cuello adolorido
- Mamá por favor vámonos de aquí..
- Hijita mía no tenemos dinero para pagar una clínica esto es lo único que podemos pagar..
- Qué asco..
Dos días después volvimos a casa, gracias al cielo recibimos buenas noticias en menos de una semana se haría la lectura del testamento, teníamos que estar en el estudio del abogado a las cuatro de la tarde en punto, al fin podríamos recuperar nuestras vidas glamurosas que teníamos, al fin nuestra mala racha se terminó, le propondría a mamá hacer una gran fiesta para celebrar...