Secreto Hermoso

La suave brisa que soplaba esta noche no pudo acallar la furia que se había apoderado de Arbi. Esa misma tarde, después de descubrir la verdad de boca de la propia culpable, Queen, que no era otra que su novia, y de Bara, su propio primo, Arbi se reafirmó en la decisión que tomaría más adelante. Lo cierto es que llevaba tiempo pensando en romper con Queen, pero como no encontraba la razón adecuada, lo había estado ocultando.

Arbi, Andre, Rudi y Juan (Juan era primo de Arbi por parte de madre) estaban pasando el rato en un café al lado de la carretera.

"¿Y si no te vigilara tu chica?", preguntó Andre, iniciando la conversación. Se había quedado de piedra cuando Arbi le había llamado. Era raro que su amigo le invitara a pasar el rato.

"No quiero que tu chica venga de repente y se desahogue con nosotros", dijo Rudi, estremeciéndose al pensarlo. Sabían de sobra lo posesiva que era Queen.

"Ay, Ar... todavía no me he recuperado de la vergüenza de las últimas veces. No dejes que vuelva a pasar aquí", dijo Rudi, que aún recordaba el escándalo que Queen había montado en la fiesta de uno de sus amigos.

En aquella ocasión, a Arbi le habían pedido que cantara una canción para el anfitrión. Todos los amigos de Arbi sabían que era un hacha con la guitarra y que tenía una voz bastante agradable.

"Tu chica está cada vez peor, Ar, su posesividad es... Maldita sea, de verdad que es tu chica", maldijo Andre al recordar aquel incidente. Sí, si solo Arbi hubiera pasado vergüenza, pero es que todos habían quedado mal.

Juan permaneció en silencio, sin hacer ningún comentario sobre la novia de Arbi. Por la mirada de Arbi, Juan sabía que estaba ocultando algo. Se notaba que Arbi no estaba bien. Conocía demasiado bien el carácter de su primo.

No solo los amigos de Arbi conocían la posesividad de su novia, sino también su familia. Nadie ponía en duda la belleza y la riqueza de Queen, pero su actitud posesiva hacia Arbi hacía que todo aquel que se acercara o conociera a Arbi se viera afectado. ¿Qué hacía que una chica tan guapa y perfecta pensara siempre de forma tan negativa y fuera tan posesiva con alguien como Arbi? ¿Tanto quería Queen a Arbi?

A lo lejos, se veían tres chicas buscando sitio para sentarse. Arbi, objeto de las indirectas de sus dos amigos, permaneció en silencio. Sin querer, su mirada se dirigió hacia las tres chicas que acababan de llegar y se habían sentado a dos mesas de donde ellos estaban.

"¿Aira?", murmuró. Su corazón dio un vuelco al ver el rostro sonriente y despreocupado de Aira mientras bromeaba con sus dos amigas que pasaban por delante de él. Se sintió estúpido por no haber reconocido a aquella chica. Ni siquiera fue capaz de distinguir la voz de Aira de la de Queen. Había sido tan idiota de creer a Queen en su momento sin comprobarlo primero. Si no se hubiera equivocado de persona, quizá ahora no tendría que estar en una relación tóxica con Queen. No había obtenido más que infelicidad, y su vida se había vuelto del revés por culpa del comportamiento y la actitud posesiva de Queen, que habían sobrepasado los límites.

Resultó que las tres no se habían percatado de la presencia de Arbi y su pandilla. Ese día, Aira tenía el día libre en el trabajo, así que podía pasar el rato con sus dos amigas.

"Eh... Ra, ¿alguna vez contaste que perdiste el anillo que te regaló tu difunta madre? ¿Todavía no lo has encontrado?", preguntó Rea, entablando conversación mientras esperaban su pedido.

"No", respondió Aira, negando con la cabeza. No sabía dónde buscarlo. Ni siquiera sabía dónde lo había perdido exactamente.

"Acéptalo, Ra, no lo vas a encontrar. Pero si el anillo sigue siendo tuyo, volverá a ti, aunque haya pocas posibilidades", comentó Amel.

¿Por qué se comportaba Aira siempre de forma tan normal con Arbi? Era evidente que recordaba el rostro de la persona a la que había ayudado. Era normal que Arbi no reconociera a Aira, ya que en aquel momento estaba medio inconsciente y no abrió los ojos por el dolor que sentía. ¿Pero Aira? Ella fue testigo y quien ayudó a Arbi, así que era imposible que no lo supiera, ¿no?

La respuesta era que Aira sabía que a quien había ayudado aquel día era Arbi, pero no lo conocía de nada. Solo sabía que Arbi también iba al instituto Nusantara, igual que ella, porque llevaban el mismo uniforme y ella había visto a Arbi varias veces durante la orientación de los nuevos alumnos.

Después de aquel incidente, Aira no volvió a ver a Arbi en el instituto. Puede que las heridas de Arbi fueran lo bastante graves como para que no pudiera ir al instituto durante un tiempo, ya que aún estaba en proceso de curación y recuperación. Quién sabe, puede que cuando Arbi volvió al instituto y su nombre apareció en la lista de su clase... Por aquel entonces, ambos eran nuevos en el instituto Nusantara, así que Aira no sabía quién era Arbi. Una vez, Aira quiso saludar a Arbi, aunque solo fuera para preguntarle cómo estaba, ya que sabía que si había vuelto al instituto, era porque estaba mejor, a pesar de las cicatrices que tenía en los brazos y las piernas. Por la actitud de Arbi en aquel momento, parecía que no se acordaba de ella, de que le había ayudado. La indiferencia de Arbi hizo que Aira se mostrara reacia a mencionar el incidente. Después, corrieron rumores sobre la relación entre Arbi y Queen. Por eso, Aira se había mantenido callada y no había mencionado lo ocurrido. Pensó que Arbi ya lo habría olvidado. Al fin y al cabo, ella le había ayudado de buena gana. Sin que Aira lo supiera, ese fue el comienzo del malentendido.

Y luego estaba el asunto del anillo, que Queen decía que era suyo pero que en realidad era de Aira. ¿Por qué no lo buscó Aira y por qué no sabía que Queen lo tenía?

La respuesta era que Aira lo buscó, claro, porque era un regalo de su difunta madre antes de morir. En aquel momento, Aira pensó que el anillo de su madre se le había caído en la calle o en algún sitio así. Ni siquiera sabía cuándo lo había perdido exactamente. Ni siquiera se le pasó por la cabeza que se le hubiera caído mientras Arbi la sujetaba, y mucho menos que se lo hubiera llevado Queen. En aquel momento, ni siquiera conocía a Queen.

Lo que está destinado a ser tuyo, por difícil que sea el camino e incluso si crees que es imposible conseguirlo, por muy lejos que esté, seguirá siendo tuyo y será tu destino.

Pero lo que no está destinado a ser tuyo, por fácil que sea el camino y por sencillo que sea el proceso, aunque lo tengas delante de tus ojos, nunca será tuyo ni tu destino.

Gracias al autor por pasarse por mi tienda. Y gracias por los "me gusta" y los consejos, chicos 🙏 Espero que la historia de Arbi y Aira os haya entretenido un poco 😊🙏.