Por salvar a un desconocido, mi vida se jodio. Ese desconocido se convirtió en el verdugo de mi vida, pero también en mi amor, pero no lo bueno no dura para siempre y lo malo tampoco.
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La venganza comienza
Al siguiente día fue el entierro, Teresa y yo, nos fuimos abrazando y consolando durante el trayecto, llegamos, estaban las personas cercanas a él, todos sus trabajadores del campo, del rancho, personas del centro, del mercado, Antonio, don Pablo, Teresa y yo, nosotras fuimos las más afectadas, lloramos tanto que nos quedamos solas ahí por un largo rato, tratando de comprender como en menos de dos días, todo se había convertido en un infierno.
Llegamos del panteón, en la hacienda se sentía una tristeza y soledad que nunca había sentido en mi vida, había algunos empleados haciendo su trabajo, todos tristes, en silencio, Teresa dijo que iba a hacer la cena, pero necesitaba estar sola, mientras le bajaban dos lágrimas por sus mejillas pálidas, subí, deje que se desahogara a solas, quizás necesitaba ese tiempo para poner sus ideas en orden, y es que la verdad, yo también necesitaba hacerlo, entre, llore, grite, le reclame a Dios por que los buenos se los lleva, y a los malditos como Rafael los deja vivir, entonces comprendí que Rafael merecía sufrir todo aquí en la tierra y yo le cobraría esa factura, pues el me quito todo, por él mi familia tuvo que salir del país, por él, el amor de mi vida esta muerto y nos quito a todos nuestra tranquilidad, así que yo, ya no tenía nada que perder.
Comenze a preparar un plan, escribí mi última carta a mi familia diciendo lo que sucedió con Eduardo, y que mi última decisión es irme a un internado de monjas, por lo mismo no les escribiría más, necesitaba su respuesta, así que decídi esperar un mes para poner en marcha mi plan, poner todas las cosas como necesitaba que estuvieran, en ese transcurso hice que todos los empleados tuvieran un tiempo en descanso, pero sería cuando este el plan en marcha, hable con Teresa de mi plan infalible, pero ella se negó al principio, pues estaba preocupada de que algo pudiera pasarme, le dije que no me importaba, yo no pertenecía más a la hacienda y por derecho a ella le corresponde quedársela, ella me pidió ser cuidadosa y si lograba mi objetivo, volviera al lado de ella, y la ayudara a manejar la hacienda, se lo prometí, aunque en realidad ir al seminario o quedarme en la hacienda, no estaban en mis planes.
Unos días después, me reuní con los cholos haciendo un negocio muy grande pero riesgoso a la vez.
Balo: lamento tu perdida, apenas pude tratar un poca a tu prometido y se me hacia buen hombre, lastima que ya no esté, pero así es esto morra en este negocio, no sabes si vivirás para siempre, por eso te pregunto ¿realmente tu puedes seguír con el bisney o dejamos las cosas así como están?
Yo: si, si puedo balo, solo necesito que me ayudes después, y todo el territorio del francés será tuyo.
Balo: ¿qué no es muy riesgoso oiga? ¿Y si el francés descubre que lo queremos torcer?
Yo: no te preocupes balo, para ese entonces, él ya estará en mis manos..
El balo dudoso aun así, decidió cooperar conmigo, a pesar de que yo tampoco estaba segura si funcionaria.
Antonio había investigado qué todo el tiempo en que el francés estaba " Desaparecido" en realidad estaba ya en el pueblo, muy cerca de nosotros, al parecer, el día en que Eduardo se me declaró por primera vez, en la inglesa, había gente de él rondando por ahí, y al encontrarme, se lo informaron, el francés no le importo sus negocios en la ciudad M y en seguida abrió un bar clandestino en el pueblo y ahí se quedó durante todo este tiempo, también supimos que durante el tiempo que no salimos de la hacienda, alguien había comprado muchas hectáreas de terreno (hectáreas \= 10000 m²) 50 para ser exactos y en una esquina habían puesto ese bar, todo encajaba, el francés había comprado ese terreno, tres veces más grande que el de Eduardo, construyó una casa enorme que poca gente pudo conocer bien, pues se decía que las personas que entraban eran muy poderosas y si alguien común llegaba a entrar, no volvía a salir, muchos rumores supe en una semana de estar buscando el paradero del francés y estaba justo en mis narices, si no hubiéramos dejado de investigar sobre su pista, quizás Eduardo........ No, ya no hay hubiéramos ni quizas, ya todo lo que tengo que hacer es que mi plan salga lo mejor posible y que ese hdp, se arrepienta de haber matado a Eduardo..
Llegó la carta de mis padres, entendieron mi situación y les gustó que mi decisión fuera esa, no sabían lo que pasaría en realidad, pero así era mejor, al menos sabía que seguían con vida y no los iba a preocupar.
Esa carta dio salida a mi plan, el cual comienza con una salida al mercado, en un puesto de comida donde trabajaba Carmen, me vestí lo más extravagante que pude, me cargue de maquillaje y me empape de perfume, salí y entonces todo comenzó.
Yo: ¿Carmen? Así que ahora trabajas aquí, mira como son las cosas, tú ahorita deberías de estar mandando a la gente del rancho, y no recibiendo órdenes. Que patética
Carmen : eres una sin vergüenza, no tiene ni dos meses que Eduardo fue sepultado, y ya andas de fanfarrona, estás gastando el dinero de él en esas cosas que llevas puesta, él se murió sin conocer tu verdadera cara.
Yo: si así es, yo ahorita me estoy gastando todo su dinero, total ante la ley yo y Teresa somos las herederas de todo, pero sabes, la pobre anciana no lo sabe, cuando acabe con todo iré en busca de un pez más gordo, sabes de a quien me refiero verdad...
Carmen : eres una zorra, (me levanto la mano)
Yo: (agarrando su brazo) así es, me voy a enredar con el francés. Ya que Eduardo murió, y el francés es más poderoso y rico, no veo porque una mujer soltera y de buen ver como yo, no pueda estar con un hombre como él. Es más querida te dejo, es perder el tiempo con alguien insignificante como tú.
Deje a Carmen hablando sola, y me fui riendo tan patéticamente. La verdad es que no soy buena actriz, por eso me costó mucho decir todas esas tonterías y hablar tan horrible de Eduardo, pero esto es el paso que hará que todo mi plan salga bien y así fue... Por que Carmen comenzó a hacer lo que te tenia que hacer.