La Villana Escapa

Eliana entra al gran templo del ducado del brazo de Aren quien ya está totalmente recuperado, llegó justo dos días antes de la boda, ya que su viaje fue lento por Susan quien tiene un embarazo de 5 meses.

-No puedo creer que esto esté pasando.

-Espero que no salgas corriendo porque el duque ahora sí irá detrás de ti.

-Oye! No haría eso.

-Jaja si lo harías.

Al llegar al altar el más emocionado es Arthur quien está con sus abuelos, ahora tienen una nueva vida, su padre le ha prometido que podra visitar a sus tios, cuando vaya al norte y cuando entre a la academia sus vacaciones seran entre el ducado y el norte.

Los padres de Bruno por fin ven a su hijo casarse, los nobles ya no hablan de él, solo de su historia de amor, sin saber los detalles y que Eliana fue la que se alejo de el.

Bruno por su parte sonríe al verla llegar, para el es la mujer que siempre amo, cuando se fue sufrió pero entendió por qué lo hizo, tal vez si la obligaba ellos no serían lo que son ahora, una pareja que se ama, quizas se odiaran y Arthur no habria nacido, ahora ellos son su familia, el toma la mano de Eliana para escuchar la ceremonia y jurar su amor.

-Yo Bruno Carter, prometo amarte todo los días de mi vida, ser un gran apoyo en tu vida y cuidar de nuestra familia.

-Yo Eliana Harris prometo amarte, ayudarte y ser un apoyo en tu vida.

La ceremonia termina sin contratiempos, ahora Eliana será la Duquesa, las jóvenes nobles la envidia, unas por qué desean un amor si y otras por qué piensan que fue inteligente en tener un hijo con él.

La recepción es un éxito se sirven platillos que solo Eliana sabe preparar, todos preguntan quién es quien cocino, pero se mantiene en secreto, el baile también es muy bonito, la madre de Bruno lo preparo todo muy bien, Arthur está presente y baila con sus padres, con Susan y Aren.

Eliana ve a Arthur y sonríe, él es un niño muy sociable, todo lo contrario a su padre.

-Él es muy sociable, no se parece a mí en eso.

-Jaja eso estaba pensando.

-Claro, a mí solo tú me agarrabas del brazo y me obligabas a bailar, a nadie mas se lo permití.

-Solo lo hacías porque yo era muy insistente, tu no eras un grosero, podías negarte pero jamás lo hiciste .

-Ahora mi hermosa esposa debemos irnos.

-Pero ya dormimos juntos.

-Si, pero ahora ya eres mi esposa.

-Eso en qué cambia.

-Haaa Eliana, matas la magia, ven vamos.

-Esta bien vamos, no creo ver nada nuevo.

Bruno solo se sonroja y mejor la carga, se nota que tomo vino, porque eso no lo diría en voz alta.

-Que tanto bebiste.

-No mucho, está vez tomé más de lo habitual, pero no estoy borracha.

-Jaja, deja de moverte o te voy a soltar.

Eliana pone su cabeza en su pecho, lo cierto es que si tomo y bastante, tanto que al llegar ya estaba dormida y Bruno no pudo despertarla.

-Es enserio, me siento estafado.

Solo le quitó el vestido y los zapatos, el también se cambió y solo la abrazo para dormir juntos.

Al día siguiente Eliana tenía resaca y náuseas, en el baño estaba vomitando y le dolía la cabeza.

-No volveré a beber, siempre que bebo algo pasa.

-Si, me has dejado sin mi noche de bodas.

-Lo siento, no volverá a pasar.

-Jaja, no, ya no me volveré a casar.

-Perdoname, no fue mi intención.

-Me lo vas a pagar.

-Y que quieres?

-Otro hijo.

-Heeee!!

-Que? Quiero tener más hijos, tu no?

-Si quiero más hijos, pero espera un poco, al menos un año, déjame terminar con la remodelación de la posada.

Bruno la abraza, acepta el trato, solo lo dijo para ver su reacción, no habían hablado de tener más hijos, ahora él la tiene a su lado, con los días pasando ella ayuda con el trabajo que no es mucho, después de unos meses Bruno le dice que viajarán pero no a la capital, sino al norte, Eliana está feliz pues así puede llegar al nacimiento de su sobrino, Bruno habla con su padre y ellos aceptan ir a la boda, mientras Bruno va a la frontera.

En cuestión de días ellos salen y llegan justo a tiempo para ver nacer a la pequeña, ahora todos están juntos, Susan está con su bebé y Eliana a su lado viendo como juega Arthur con Camila, el marqués la dejo con ellos en lo que ellos viajan a la ciudad, Camila los convenció para qué la dejarán ahí, ya que no verá en un buen tiempo.

Bruno regresa después de unos días y los ve jugar, Arthur corre hacia el con su pequeña espada, Bruno lo abraza y al fondo está Eliana, a quien ama, su vida ahora es plena, tranquila y sin amenazas, Camila también llega con él, para que la cargue.

-Duque, yo también quiero aprender a usar la espada, puede enseñarme

-Claro te mandaremos a hacer una más ligera.

-Si, yo quiero entrenar con Arthur, nosotros seremos fuertes y juntos defenderemos la frontera.

-Heee! Si, si.

Eliana solo ríe, esos niños parecen estar convencidos de lo que dicen, tal vez son ese tipo de parejas destinadas, sobre todo por qué Arthur no estaba destinado a nacer, es un alma que tiene una oportunidad, si al crecer es lo que quieren así será.

-Esos niños, mejor no digo nada.

-Jaja si no digas nada déjalos.

-Amor, mis padres ya están en la capital, la boda es en unos días, estaremos tres meses, después debemos volver, estaremos regresando dentro de seis meses.

-Está bien, gracias.

-Por qué.

-Por esperarme, por no olvidarme, gracias por estar aquí.

-Siempre estaré contigo.

Bruno la abraza por detrás mientras ven a los niños jugar, ahora los dos tienen la familia que deseaban, Eliana la villana ahora es feliz...

****Fin***

-Gracias por leer....