EN BUSCA DE LA FELICIDAD

Aun que me divierte en la fiesta no nos quedamos mucho tiempo, al día siguiente debíamos trabajar, pero acepte volver a salir con Amada, llegue a trabajar y no tenia mucho tiempo de a verme sentado a revisar documentos cuando me informaron de una visita, le había pedido a mi secretaria que no dejara pasar a nadie a menos que se tratara de una verdadera queja, estoy cansada de atender personas que solo quieren tomarse fotos o quieren pedirme una cita para salir.

Me dijo que era un hombre mayor y decía ser mi padre, pero que si yo no quería verlo, ella podía decirle que no estaba, ella escucho parte de la discusión que tuve con mi madre, pero le dije que lo dejara pasar, si se tomo el trabajo de venir lo escuchare, ella le permito el acceso al área de oficinas y lo trajo a la mía.

- Siéntate por favor, le digo a mi padre.

- Disculpa llegar sin avisar, pero no tengo tu teléfono y tu madre me dijo que te podía encontrar aquí.

- Ella vino a verme y de una vez te digo que no pienso volver a su casa ni de visita.

- Te entiendo Laia, tu madre fue demasiado cruel contigo, siempre se lo dije, pero sabes que ella siempre imponía su voluntad y cuando quise detenerla fue demasiado tarde pues ya había perdido una hija.

- No te culpo papá, pero me hubiera gustado que alguna vez me hubieras defendido de su maltrato.

- No me va a bastar la vida para pedir tu perdón y por eso estoy aquí, perdóname, soy el culpable de tu sufrimiento.

Mi padre se arrodilla en medio de la oficina llorando y suplicando.

- No hagas esto, no es necesario, yo ya te perdoné al igual que a mi madre, solo quiero que me den mi espacio aún no estoy lista para tenerlos cerca, le digo ayudándolo a levantarse.

- Gracias hija, prometo respetar tus decisiones y no entrometerme en tu vida, me conformo con verte de vez en cuando.

- Muy bien, yo te llamaré cuando esté dispuesta a verte, dame tiempo.

- Si, te dejare mis datos a notados como ya sabes me divorcié de tu madre y vivo solo en un apartamento.

- Te daré mi teléfono, pero solo llama si es una emergencia y no se lo des a mi madre.

- Gracias hija, te prometo que no lo hare.

Converse un poco más con mi papá y me conto que ya tengo dos sobrinos, pues mis hermanas ya tienen hijos, me mostro fotos y son más pequeños que Estrella, le mostré una foto de mi niña y solo le dije que la adopte pues su madre la abandono en la pensión donde yo vivía, el parecía encantado pues era su primera nieta, mis hermanas tenían barones, me informaron que había un problema con un cliente y tuve que dejarlo, pero le prometí invitarlo a comer con Estrella.

No tuve tiempo de pensar mucho en mi papá pues el problema en el supermercado era grabe, dos clientes estaban peleando en uno de los pasillos, al parecer los dos querían un videojuego en oferte y era la última unidad, la discusión subió de tono y los dos terminaron agarrándose a los golpes por el objetó, el guardia trato de separarlos, pero solo no pudo y uno de los cajeros tuvo que ayudar y recibió un golpe, la pelea fue gravada por otros clientes y todo era un caos, varias cosas resultaron rotas en la pelea.

La policía no tardo en llegar y se llevaron a los hombres, me toco ir con ellos para presentar cargos y obligar a ese par de trogloditas a pagar los daños, les colocaron cargos por agresión y daños a propiedad privada con multa y podían ser liberados si pagaban los daños, como no tenía un estimulado llame a mi secretaria para que me enviara el dato de todo lo que ellos habían roto en su pelea absurda pues si me hubieran informado yo podía pedir el videojuego de otra sucursal y respetar el descuento para que ambos lo tuvieran.

El tramite me llevo mucho tiempo y ya tenia trabajo atrasado debido a la visita de mi padre, tendré que trabajar horas extra esta noche y no me gustaría incomodar a la niñera pues ayer se fue tarde a su casa, así que le pedí llevar a Estrella donde doña Ramona y la llame a ella también para que la cuide hasta que yo pueda pasar por ella esta noche, ya con todo eso resuelto puede volver al supermercado a terminar con mi trabajo.

Estaba concentrada revisando las ventas de ultimo mes cuando mi celular comenzó a sonar, reviso a ver de quien se trata y al ser doña Ramona contesto de inmediato.

- Hola Ramona, ya está Estrella en la pensión.

- Sí, llego hace rato, la tengo en mi habitación cenando.

- Gracias por ayudarme con ella, aún me falta trabajo, pero creo que en dos horas puedo pasar.

- No te preocupes, pero no es ese el motivo de mi llamada, tenemos un problema muy grave.

- No me asustes, que está pasando.

- Ella esta devuelta, no tardes tenemos que hablar.

Cuelgo la llamada y me dejo caer en la silla, suelto un largo suspiro mientras me sobo la cien, esto no puede ser, últimamente tengo problemas a diario, me pregunto a que volvió y porque ahora, esto es una locura, pero algo si tengo claro no pienso permitir que mi hija salga lastimada, sin importar que, debo protegerla.

Después de esa llamada no pude concentrarme en el trabajo, dejé todo y me fui a la pensión, moría de angustia, sé que doña Ramona la cuida, pero ya no soporto la intriga, creo que es la primera vez que conduzco a mas de 80 km, pero quiero llegar lo más rápido posible, cuando llegué a la pensión doña Ramona me esperaba en la puerta, eso prendió más mis alarmas pues me imaginé lo peor, estacioné el auto y bajé casi corriendo.

- ¿Dónde está mi hija? dije con desesperación.

- Tranquila ella está durmiendo en mi habitación, como te dije por teléfono tenemos que hablar y en este lugar no es seguro.

Fuimos al café que estaba en la esquina muy cerca de la pensión nos sentamos en una mesa al fondo del lugar y pedí dos cafés noté a Ramona algo intranquila parecía preocupada, una vez nos sirvieron el café comenzó a hablar.

Esta mañana apareció Sofía en mi puerta, al principio me sorprendió, no parece ella, cambio muchísimo, le pregunte a que había regresado y la muy descarada dijo que venia por su hija, le dije que te marchaste de la pensión hace años y que yo no sabía nada sobre ustedes, pero ella me dijo que te vio en televisión y una de sus amigas le conto que venias a verme de vez en cuando con la niña, quise negar lo que le contaron, pero en ese momento llego Estrella con Clementina y lo único que pude hacer fue evitar que se acercara a la niña, pero antes de irse me dijo que volvería y que te dijera que debías devolverle a su hija o tendrás serios problemas.