El Omega Y El Demonio.

Riley había salido de compras al pueblo, Susan le dijo que debe de conseguir un buen atuendo para la fiesta, no puede ir una ropa pasada de moda, no cuando es el príncipe y un hermoso omega. Llegaron a una boutique muy concurrida, en el lugar habían varias mujeres y jóvenes omegas de familias nobles, eligiendo sus atuendos o les tomaban sus medidas para sus encargos personalizados. Rápidamente se fijaron en Riley, él solo observa las ropas mientras que Susan habla con una empleada, pidiendo les muestre la ropa disponible, Susan pide sea elegante y linda, ya que irá a una fiesta importante.

Los presentes en ese sitió ya han empezado a murmurar entre si, nunca han visto a Riley, no saben quien es o de donde viene, solo pueden notar que se trata de un omega con buen estatus.

— esta boutique es solo para gente prestigiosa, ¿de que familia proviene?— pregunta una joven dama.

La chica era de cabello cenizo y ojos verdes, bien vestida, Riley supone que se trata de la hija de algún noble de gran estatus. La joven lo observa con un gesto de desagrado.

— no la conozco lady, no tengo porque responder a su actitud tan arrogante.— responde Riley con molestia.

— ¿como se atreve? Debería ser más educado, un omega no tiene derecho a hablarle así a una dama de alto estatus.— menciona de manera presumida.

— omega o alfa, no tengo porque mostrar educación a quien no la muestra.— sonríe burloso.

Los murmullos no se hicieron esperar, era una sorpresa que alguien se atreviera a hablarle así a esa chica, la cual ya se veía bastante molesta.

— no tiene caso perder mi tiempo, pero mi padre sabrá esto.— le amenaza.

La chica se va de la tienda, mientras que Riley solo sigue en su suyo, tratando de encontrar un traje para él.

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En la noche, todo estaba listo para salir, Susan termino de peinarlo y le coloco un lindo listón purpura en el cabello para que hiciera juego con su traje.

Fuera de la mansión, Hayden le espera cerca del carruaje, este viste como siempre un traje negro y con detalles en dorado. Hayden le ofrece la mano y le ayuda a subir, poniéndose en marcha.

— ¿negro? Debería intentar otro color.— lo observa de arriba hacía abajo.

— me gusta este color, va con todo, es elegante, funciona para un funeral y no ve la sangre si salpica cuando yo asesine a alguien.— responde con burla.

— ¡tch! — chasquea la lengua.— que mal gusto tiene.— desvía la mirada.

No va a admitir ante él que se ve realmente atractivo con ese color, sin duda el verdadero Riley tenía buen gusto en hombres. Tras un par de horas de viaje, finalmente llegan a una mansión lujosa donde van desfilando los carruajes de los nobles y por supuesto, el carruaje de Riley no demora en llamar la atención debido a la insignia de la familia real. Dentro de la mansión, se escucha la suave música y sonido constante de murmullos de las personas hablando, mientras los sirvientes van de un lado a otro con bandejas de vino y bocadillos, el guardia de la puerta no demora en anunciar la llegada de Riley.

"Su alteza el segundo príncipe de Vanth, Riley Skyler en compañía del gran general, Hayden Shadows."

Enseguida todos dirigen sus miradas a las escaleras, donde los recién llegados van bajando. En un grupo de jovencitas, estaba aquella joven que vio en la boutique, quien mira fijamente a Riley, estaba sorprendida que ese omega fuese el príncipe de Vanth, sabía que el segundo era un omega, pero nunca imaginó que fuera ese omega que le falto al respeto. Las chicas a su lado murmuran ante la llegada de Riley, pero más que nada, se han fijado en Hayden, un hombre que sin duda llama la atención, aunque era un pena, porque su estatus era solo de general.

Las mujeres y omegas mayores, se acercan a Riley para saludarlo, en especial la duquesa que ha organizado la fiesta, Idara Ferguson, una duquesa muy importante de la zona, la mujer estaba ansiosa porque Riley aceptará su invitación, ya que deseaba presentar a su hijo menor, pues aunque el rubio es un omega divorciado, sigue teniendo un buen estatus, pero verlo llegar con el general fue molesto, aunque duda que el rey deje que su hijo se mezcle que un general, así que aún le queda esperanza.

— por cierto alteza, este es mi hijo, Mason Ferguson, es un joven trabajador y tiene buenos negocios.— presume.

— mucho gusto alteza, es sin duda tan hermoso como dicen.— observa a Riley con obvia morbosidad.

El hombre era algo robusto, de cabello negro, nada agraciado y una expresión arrogante. Este sostiene la mano de Riley para darle un beso en el dorso, pero Riley retira la mano y se sostiene del brazo de Hayden.

— un gusto joven Ferguson. Debo presentar a mi acompañante, el general Hayden Shadows, él y yo somos muy unidos.— apoya su cabeza en el hombro del demonio.

La duquesa y su hijo fruncen los labios al notar la cercanía de los dos.

— un gusto madam, joven duque, agradezco la invitación a tan distinguida fiesta, ya nos hacia falta salir a divertirnos un poco.— Hayden acaricia la mano de Riley.

— p-por supuesto...espero puedan divertirse.— sonríe de manera forzada.

Riley solo se despide y se lleva a Hayden lejos de esa mujer, aunque esta le pide a su hijo esperar a que el omega este solo, si logra seducirlo, Riley será obligado a casarse con él para no manchar el nombre de la familia.

Hayden aprovecha que Riley esta con él y le lleva hasta la zona de baile, aunque este se queja.

— hemos venido a divertirnos y que vean que no es un omega al que pueden usar, ¿cierto?—

— por supuesto, ya actuamos, con eso debe ser suficiente.— se queja.

— no es suficiente, deben creerlo. Ven, te guiare si no sabes...—

Hayden le sostiene desde la cintura y de la mano para comenzar a guiar a Riley al ritmo de la música, ante esto, enseguida fijan su mirada en ellos. Al principio Riley se negaba, pero poco a poco comenzó a agarrar el ritmo y comenzaba a dejarse guiar por el demonio, ambos danzan de manera sincronizada.

Tras acabar la música, Manson se acerca para pedir un baile a Riley, pero el rubio se disculpa negándose, porque no siendo omega, las personas pueden mal interpretar la situación, esto solo hace enojar a Mason, quien se retira furioso, pero no piensa darse por vencido. Hayden puede notar las intenciones de aquel hombre, por lo que durante toda la fiesta, permanece cerca de Riley, sabe que él puede defenderse, pero a veces esa clase de hombres suelen ser crueles usando métodos inhumanos para conseguir lo que desean. Tras un par de horas, ambos se retiran de la fiesta, Riley estaba aburrido, esa clase de cosas no son lo suyo, aunque antes de irse, la duquesa invita a Riley a una fiesta de té, para conocerse mejor.

Tras eso, ambos se dirigen al carruaje, estando ahí, Riley deja salir un largo suspiro, finalmente salieron de ese molesto lugar.

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