Vendida A Un Enemigo

Alexander se sorprendió demasiado, al ver el rostro de Claudia, totalmente blanco... Nunca, en su vida, había visto a la chica tan asustada.

Alexander era un hombre frío y sin ninguna emoción dentro de su corazón, sin embargo, Claudia era la única mujer que había despertado en su corazón un sentimiento más allá que solo pasión.

Su manera en la que miraba la vida, la forma que se entregó a él, sin importarle que llevarán la misma sangre, fue algo, que volvió totalmente loco a Alexander...

__ ¿Qué pasa, mi amor?... ¿A caso has recordado algo del pasado, que te ha atormentado de esta manera?... _ Alexander se apresuró hacerle dos preguntas continuamente a Claudia..

Alexander estaba desesperado por saber, qué es, lo que ha hecho, qué su muñeca de cabellos negros, se haya asustado tanto...

Claudia seguía recordando la tomentosa que fue aquella noche, en la que estuvo a punto de perder su vida...

La chica agarró el brazo de Alexander, sus ojos comenzaron a arrojar agua salada. Eso asustó, más, a Alexander. Qué inmediatamente abrazó a la chica.

__ Tranquila, lo que sea debe tener una solución... _ Mencionó Alexander abrazando con fuerza a Claudia...

El hombre, no podía negar, qué lo que le sucediera a Claudia, lo dañaba también a él... Ella era su pequeña muñeca de porcelana, que si le sucediera algo, lo rompería a él, por completo

Claudia, poco a poco, se fue convirtiendo en su punto débil de Alexander, aunque Alexander se lo intentará negar al mundo entero...

__ Debo hablar con mi abuela, debo hacerle varias preguntas. Y solamente, ella y el abuelo me las pueden contestar ... _ Dijo Claudia, esperando que Celeste no sea la hija de las personas que salvaron su vida hace trece años...

¿Qué pasaría, si en verdad, Celeste fuera la hija, de la pareja que dio su vida, para salvarlos a ellos?... Ella, se había portado como toda una villana al obligarla a casarse con Alexander, únicamente, para su beneficio personal...

__ Cariño, no puedes hablar con los abuelos en este momento... La abuela, ha sido sedada, hasta mañana, y el abuelo, dudo mucho que esté de humor, para hablar contigo en este momento...

Claudia movió la cabeza con desesperación, tenía que hablar con los abuelos, antes de cometer otra locura, de la que después se pueda arrepentir...

__ ¿Mi amor, sucede algo?... Qué te esté ha atormentado... _ La voz que Alexander uso, para preguntarle a Claudia, era muy suave y dulce.

Claudia levantó la mirada, para mirar los ojos azules de Alexander, la chica mojó sus labios, para comenzar hablar...

__ Recuerdas que te hablé del accidente, qué pasamos cuando mis abuelos nos dejaron solos, y un corto circuito, ocasionó que la mansión Slod ardiera en llamas... Y que si no hubiera sido por la pareja de matrimonio que vivía al lado de la casa de los abuelos; Esteban y yo hubiéramos muerto calcinados...

__ Lo recuerdo perfectamente, esa noche, mis padres; fueron temprano por mí, y solamente ustedes dos, se quedaron con los abuelos. ¿Qué tiene que ver eso, con la reacción de la abuela?... _ Preguntó Alexander, sin entender...

__ Te puedo asegurar que esa niña, puede ser Celeste..._ Mencionó Claudia.

Alexander se separó de Claudia, no podía creer, la tremenda casualidad, qué sería, que Celeste, resultara ser la hija de esa familia...

__ Ella, no es la hija de esa familia... Debes de dejarte de preocuparte por algo tan insignificante como eso... _ Respondió Alexander.

__ Debe hablar, con mi abuela... Ella es la única que me puede aclarar eso, ya que si en verdad, que Celeste, resultó ser la hija de esa familia... Sería horrible, lo que hemos hecho...

Alexander colocó su mano en el hombro de Claudia, para entrar los dos a la mansión... Celeste, que estuvo, escondida por mucho tiempo...

Aprovechando qué Claudia y Alexander entraron a la mansión caminando, Celeste se apresuró a salir de la mansión, sin que los guardias la vieran...

La chica salió a la calle, pero, todo era demasiado extraño para ella. Además, la mansión de Estefanía y Leandro, estaba ubicado, en una zona demasiado exclusiva; qué muy difícilmente, podía pasar algún taxi o algo, parecido...

La mirada de desconcierto de Celeste, se quedó mirando para todas partes. No sabía cuál camino debería tomar, sin más, Celeste se fue hacia el lado derecho...

Parecía ser más tranquilo, y pudiera ser que pasaran más automóviles cerca de allí... Celeste comenzó a caminar, se encontraba más descansada, ya que había dormido por mucho tiempo...

Por mucho tiempo, Celeste caminó por la carretera, su cuerpo se comenzó a cansar, las gotas de sudor comenzaron a caer por su rostro...

__ Debes descansar, no puedo continuar caminando. Si no descanso un poco, puedo volver atender otro intento de al aborto.

Celeste se dejó caer a una orilla de la carretera, se sentía demasiado cansada, sus labios estaban secos, y no podía continuar caminando...

No obstante, en el momento en que se detuvo a descansar, un auto negro, se estacionó detrás de ella.

Esteban iba regreso a la mansión, cuando vio a lo lejos a una chica que se parecía mucho a Celeste.

Esteban pensó que era una locura de su parte, sin embargo, se dio la vuelta... Al estar muy cerca de Celeste.

Esteban bajó el cristal del auto, apresuradamente, al darse cuenta. Que, efectivamente, era Celeste, la chica a su lado, Esteban se bajó inmediatamente de su auto...

Esteban agarró a Celeste del brazo, con mucho cuidado, girando su cuerpo, para quedar cara a cara con Celeste...

Celeste se sintió extremadamente feliz al mirar a Esteban allí... El chico se estaba convirtiendo en un ángel para ella...

Esteban extendió sus brazos, para envolver a Celeste, en un acogedor abrazó... Celeste se abrazó fuertemente a Esteban, dejando caer sus lágrimas en el torso del chico.

__ Vamos de regreso a la mansión de los abuelos... _ Las palabras de Esteban, sonaron muy dulces.

Celeste estaba por negarse a ir con Esteban de nuevo a la mansión, cuando todo se volvió negro, para ella...

Celeste cerró los ojos cayendo en un profundo sueño, Esteban rápidamente, levantó a Celeste entre sus brazos, e inmediatamente, la subió a su auto...

En poco tiempo, Esteban volvió a la mansión, por suerte, Claudia todavía no se iba, en cuando vio a su hermano, subir con Celeste a la habitación.

Claudia los siguió, para atender a Celeste. Al entrar a la habitación de Esteban, el chico dejó a Celeste, con mucha calma en su cama...

__ Esteban ¿Qué le ha sucedido?... _ Le preguntó Claudia acercándose a Celeste...

_ No sé, pero creo, que estuvo caminando por mucho tiempo...

Claudia, inmediatamente, soltó la ropa de Celeste, el vestido que estaba usando era muy apretado y podía dañar al bebé, que la chica estaba esperando...

__ Celeste, es una inconsciente, ¡Cómo se lo ocurre, ponerse a caminar tanto, y sabe que está embarazada!...

Al escuchar lo que su hermana dice, el corazón de Esteban dejó de latir... Sus ojos se clavaron sobre el vientre plano de la chica...

__ ¿Puedes repetir lo que acabas de decir?... _ Le preguntó, Esteban en voz muy baja.

Claudia miró a su hermano de reojo, era la primera vez que notaba a Esteban tan nervioso...

__ Dije que ella está embarazada, tiene a aproximadamente unos dos meses..._ Respondió Claudia, ocupándose de atender a Celeste lo antes posible...

El tiempo se congeló, para Esteban, no podía creer que sería padre, en unos cuantos meses... Había dejado embarazada, a Celeste, con tan solo una noche de placer...

Eso, era algo, que no se esperaba, sin que Esteban lo pudiera evitar. La emoción que sentía al saber que Celeste estaba embarazada, lo invadió por completo...

__ ¡Vamos a tener un hijo!... Está esperando un hijo mío!... _ Gritó Esteban en voz muy alta, olvidando por completo, qué su hermana estaba allí presente...

Inmediatamente, Claudia volteó a ver a su hermano. Se sacudió, la cabeza con incredulidad...

__ Qué has dicho... __ Preguntó Claudia, con los labios temblorosos...

__ El hijo que ella, está esperando es tu sobrino... Ella fue la mujer con la que me acosté hace dos meses y no fue Sonia, cómo todo este tiempo lo he pensado...

Claudia perdió todo el color en su rostro, su hermano le estaba diciendo, que el hijo de Celeste era su hijo... Todo era una locura, para la mente de Claudia...

_¿En que momento, todo se salió de control?... _ Pensó Claudia, mirando a Celeste...

__ Esteban, sal ahora mismo de la habitación, necesito estar a solas con Celeste... _ Ordenó Claudia...

Esteban no se negó a salir de la habitación, sin embargo, antes de salir se acercó a Celeste, y le dio un beso en la frente y en el vientre...

Esa acción ocasionó que las lágrimas cayeran por el costado del ojo de Claudia... Lamentaba, lastimar a su hermano, pero, era lo mejor que podía hacer, por el bien de Celeste...

Claudia pensó que lo mejor, para Celeste, es que se vaya lejos de todos, y que nunca se llegue a enterar de que por su culpa, sus padres murieron...

Eso, solamente haría odiar a Esteban, y al bebé que lleva en su vientre...