La Bruja Y El Príncipe.

Ya que todo fue supervisado, cada sirviente y guardia, se retiro a descansar, ya que partirán desde muy temprano, Alexa regreso a la alcoba y se encontró a William aun despierto.

- ¿todo esta listo?

- sí, también ¿ya te despediste de la princesa?

- lo hice, ella estaba totalmente apenada por los problemas que causo su hermano.

- seguro, porque no te podrá ver más.

- ¿de que habla? Apenas me conoce.

- nunca se sabe. Vamos a descansar.

- si.

William apago la lampara que estaba cerca de él y se acostó en el sofá, mientras que Alexa se recostó en la cama, al igual que el chico, estaba por apagar la lámpara, pero se detuvo.

- deberías venir aquí, la cama es grande y más cómoda.

William se sentó y la miró sorprendido, no esperaba que Alexa le dijera algo así, como no quiere que ella se enoje, no rechaza la invitación, ya que el sofá también es incómodo; fue a la cama y se acostó, tratando de no estar tan cerca de la chica, Alexa apaga la lámpara, para ya poder descansar.

El sol ya le daba en la cara y cuando William abrió los ojos, lo primero que vio tan cerca de él, era el rostro de Alexa, lo que causa que un sonrojo en su rostro, pero cuando quiere apartarse, nota que la reina, tiene la cabeza sobre su brazo, así que cierra los ojos, esperará a que ella se despierte para después levantarse.

-"mi brazo"

William ya no sentía su brazo y Alexa no parecía despertar.

-"debe estar muy cansada"

Pensó. Fue cerca de casi media hora, cuando Alexa finalmente abrió los ojos, así que William solo volteó hacía otro lado y apenas la chica se sentó, apartó la mano, Alexa no le presto atención y se levanto, observando que ya el sol se había puesto.

- es tarde.

Se suponía saldrían temprano, pero no imagino que se dormiría, se cambia ahí mismo, por lo que William desvía nuevamente la mirada, ya que Alexa esta lista, William solo recoge su espalda y se pone los zapatos; salen de la alcoba y se apuran a llegar con el grupo, estos ya estaban listos, solo ellos faltaban, Alexa sube a su caballo y William al carruaje con Carol, como siempre Alexa encabeza la caravana, pero cuando van hacia la salida del castillo, un grupo de soldados les espera y tapa su camino, el grupo era encabezado por el Rey y el príncipe Edgar que aun luce todos esos moretones en la cara.

- cree que la dejaré huir después de lo que hizo.

- exijo entregue a mi agresor, no tenía derecho a golpearme, fue usted quien se me ofreció!

Alexa se acerca al príncipe, después de lo dicho, pero dos soldados atraviesan sus lanzas para evitar que se le acerque más.

- reina, usted y su gente es libre de irse, pero debe dejar al príncipe William para ser jusgado, no tendré represalias a pesar de que se le ofreció a mi hijo y por eso, causo todo esto.

- ¿yo? ¿Por qué me le ofrecía a un inútil? Su hijo fue golpeado, porque el muy estúpido creyó que podría hacerme suya usando droga.

- y-yo jamás recurriría a algo así, mujeres no me hacen falta.

- mi hijo no haría tal cosa. Ahora denme al príncipe William.

- ese príncipe es mío y lo mío, no lo comparto.

En el carruaje William escuchaba todo, lo que causó que se sonrojara con eso último que dijo Alexa.

- si no me deja pasar, me abriré camino, si eso provoca en usted ganas de guerra, adelanté, mi espada esta ansiosa por derramar sangre.

Alexa saco rápido su espada y la agito cortando las lanzas de los soldados que evitaban que se acerque al príncipe Edgar, al ver esto, Edgar se asusto e hizo que su caballo relinche tirándolo en el proceso.

- será fácil acabar con este reino, incluso su hijo, es un inútil para montar.

Edgar se puso de pié, siendo ayudado por los soldados, mientras que el Rey seguía sin querer dejarlos pasar.

- a un lado o aquí mismo mataré al Rey.

- insolente! Te atreves a amenazarme!

La mano de Alexa se movió rápidamente y en un abrir y cerrar de ojos, una daga se fue a clavar en la pierna del príncipe, que se alejaba de ahí, Edgar da un grito de dolor y rápidamente se apuran a cargarlo, el Rey no puede con su enojo, esa mujer es bastante descarada.

- oh! Error mío, apunte a la cabeza. Majestad, es su última oportunidad de dejarnos pasar.

Los guardias de Alexa se iban colocando en una posición que les fuese fácil atacar, incluso las sirvientas que iban con ellos, han tomado una espada, pues Alexa siempre se encargo de que incluso ellas aprendieran a defenderse. El Rey se puso nervioso, pero, no puede pelear, sus solados son pocos, ya que todo su ejército esta cumpliendo con otra misión.

- dejen que pase.

Los soldados se hacen a un lado, así que Alexa indica que pasen primero los carruajes y tras ellos los guardias, por último es Alexa quien pasa.

- no crea que este es el final, pienso vengar a mi hijo y este insulto hacia mi reino.

- lo estaré esperando, colgaré su cabeza en mi salón de trono después de acabar con su ejército.

El rey no dijo nada más, Alexa no se doblega ante nada, pero, de uno u otra manera debe vengarse, no puede dejar que esto pase sin tener consecuencias. El grupo de Alexa se va alejando y el Rey hace que cierren las puertas.

- manden un mensajero al ejército y otro al Rey de Granate.

Sus soldados asienten y rápidamente se movilizan, el Rey, piensa que si se alía con otro país, pueden fácilmente acabar con el Imperio.

Por otro lado, la caravana de Alexa ya va saliendo de aquella ciudad.

- la bruja nuevamente se busco problemas, hay que salir lo más pronto del Imperio.

Carol esta preocupada, si empieza una guerra, no quiere estar en el Imperio y espera que el príncipe William tampoco lo esté.

- no debió meterse, príncipe, usted lo escuchó, ella solo es una ofrecida.

- Carol!!! Te permito muchas cosas, pero no que insultes a la reina, entiendo que estes en contra de ella, pero es suficiente!

La mujer no había visto tan enojado al príncipe, pero eso no quita que siga creyendo que es por ella que se han metido en problemas.

- por todo esto, usted perdió una gran oportunidad.

- ¿de que hablas?

- usted y la princesa Lilian, ella era una chica adecuada para usted, además el Oriente pudo haber sido nuestro aliado.

- no digas tonterías, no me gusta ella. Además ¿como que adecuada? ¿Insinuas que lo único que merezco es una niña sumisa y débil?

- no, no es eso, pero la princesa Lilian era una dama, una verdadera chica decente.

- Basta Carol!!! Si lo que quieres es ser libre, dejaré que te vayas a Silver, pero yo, yo no dejaré a la reina, voy a esforzarme para ser digno de ella.

Carol no podía creer lo que estaba escuchando, cuando hace poco, el único deseo del príncipe William, era ser libre de Alexa.