LA SIRENA DE LA COSTA

#ERIK BROWN

Con mi hermano quede en reunirme para almorzar, él queria conversar, como estaba agotado y solo queria dormir un rato, le propuse hacerlo a la hora de la comida, por lo que me vine al restaurante que él sugirió.

Para mi mala suerte me encontre con Linda que venia por un pedido, segun me conto, su padre la puso a trabajar como su secretaria, para que valore lo que tiene, como si me importara, me cuenta sus cosas y no pierde la oportunidad en rogarme y querer convencerme a que volvamos.

-Escúchame por favor, me equivoqué, cometí un error, lo siento, lo siento de veras, me siento perdida sin ti.

La voz quebrada y las lágrimas eran una clara señal de su arrepentimiento, pero lo que creí sentir alguna vez, ya no estaba ahí, ella se ocupó de destruirlo, de hacerlo añicos.

-Acepto tus disculpas.

Con la voz calmada anuncie.

-Entonces podemos volver.

Sus ojos se iluminaron ilusionados.

Levante la mano en señal de que no termine de hablar.

-Eso no quiere decir que volvamos, ya no quiero nada contigo.

Se quiso aproximar para aferrarse pero me aparte de ella.

-Te pedi disculpas, te dije que lo siento, que sufro por mi error, ya es tiempo que me perdones.

Ella creia que solo era mi modo de castigarla.

Me resultaba delirante que piense asi despues de haber estado comprometida con mi hermano, no hace mucho.

-No, no vamos a volver, no siento nada por ti, ya no quiero nada contigo.

Le repeti siendo mas claro aunque suene cruel, queria que entienda que lo nuestro no volvera a ser y nunca mas la aceptare.

-Es tu modo de castigarme, para que sepa lo mucho que te dolio, ya lo entendi, te necesito, tu me necesitas, se que me extrañas...

Levante la mano haciendo que se calle.

-No insistas, ya no siento nada por ti, no te extraño, no te necesito, olvidate, no volveremos.

-Es muy pronto, consideras que debo padecer mas para que aprecie lo que significo para ti.

La mire desconcertado, tenia cenizas en la cabeza en vez de cerebro que no entiende que no quiero nada con ella.

-Que te quede claro, no quiero nada contigo, si continuas fastidiando mereces una demanda por acosó.

-MAS DE UNO QUIERE QUE LO SIGA Y SUPLIQUE COMO LO HAGO CONTIGO, MAS DE UNO QUIERE TENER EL HONOR DE VERME DESNUDA...

Cambio el tono dulce y penoso por el agresivo.

-Por lo que supe se lo concedes al que lo pida...

Fue mi respuesta como una navaja filosa que corta un pelo en el aire, lo tenia atorado en la garganta y se lo solte al ser esa verdad la que mas dolia.

-ERES UN DESGRACIADO, INFELIZ...

La deje gritando sus groserías, vine para almorzar con Federico y me la crucé a la loca.

-Erik, perdona la tardanza.

 Apareció Federico en la entrada.

-Vamos a otro sitio.

Le señalé.

-De acuerdo.

Arrastro las palabras mirando hacia el interior del restaurante y descubriendo la razón de mi decisión.

-Por lo que veo te la cruzaste.

-Resulto más pesada que un container.

-Ja, ja, tu y tus frases.

Rio nervioso, pero note su fastidió.

Nos encaminamos hacia otro restaurante y lo note pensativo.

-¿Qué te molesta?

Le consulté para cortar el silencio.

-Este... No, nada... Olvídalo.

Suspiro torciendo la cara.

-Ya dime, algo te molesta.

Insisto.

-Es solo que cuando teníamos intimidad...

-Ah, ya veo, déjalo...

Lo interrumpo al no querer oír lo que tenga que decir, mientras nos sentabamos en un banco de un restaurante que tenia en la vereda las mesas, que quedaba en la esquina del anterior que habiamos elegido en principio.

-Me decía que no había nadie como yo, que era el único que le podía mover el piso.

Continuo y preste oído mirándolo directo.

-Frases típicas que se dice en esas ocasiones.

-Ya, si tú lo dices.

Suspiro contrariado.

-No me digas que ella fue la primera.

Caigo en cuentas al evaluar su tono.

-No lo digas asi, parecerá que soy una especie rara... Además no fue la primera como crees, si en que creí que sería mi pareja final.

Aclara de inmediato.

-No te critico, sino que me sorprende y a la vez no, porque ahora que lo pienso siempre estuviste más concentrado en el trabajo que en otra cosa.

-Ya, no digas más... Te dije que no fue la primera en lo intimo.

Vuelve a repetir nervioso.

-Busca a alguien más, sacúdete esa vibra extraña que debes tener, capaz tu pareja ideal esté a la vuelta de la esquina.

Me rio divertido.

-No se puede contigo, te hablo en serio y te burlas.

"¿YA ELIGIERON?"

Aparecio el mozo preguntando que ibamos a comer.

-Quiero el plato principal y acompañelo con ensalada, para tomar solo agua. Le señalo al haber elegido el bife de carne a la crema.

"MUY BIEN SEÑOR Y ¿USTED?"

Indago a Federico.

-QUIERO EL PLATO NÚMERO 17 CON EL 15 Y COMO SUSTENTO EL 20 PARA CERRAR EL POSTRE NUMERO 3 TAMAÑO GRANDE.

Anuncio Federico, pidiendo unos tallarines con salsa y albondigas, una sopa cremosa y para tomar un batido con un vaso de agua.

"EN SEGUIDA SE LOS TRAIGO"

Concluyo el mozo retirandose.

-Has pedido mucho. Le observo.

-YO PAGO, ASI QUE NO DEBES PONER NADA, TE INVITO.

Respondio de inmediato.

-No me refería a eso, sino que nunca te vi comer tanto. Le aclaro.

-Solo quise comer, es todo. Respondió como si nada.

-Y según se, siempre tomás un vaso de vino, no de licuado.

-UNA VEZ SALIMOS A COMER CON LINDA, PROPUSO COMER ALGO DIFERENTE, NOS FUIMOS A UN PUESTO, ESOS QUE SUELEN HABER EN LOS PARQUES, ESAS TIPO CASA RODANTES, LE DICEN RESTAURANTE MÓVIL, EN FIN, AHI COMIMOS ASÍ, Y NO SE, ME QUEDO, ME GUSTO. Conto.

Eso me recordo que yo fui quien le llevo a Linda a ese lugar y le enseño a comer algo diferente, no podia creer que compartio eso con mi hermano, de repente senti mi estómago pesado.

-Voy al baño. Le dije incorporándome.

Llegue al baño, tenía un mal estar general, siempre fui de estómago fuerte, pero ahora sentí extraño.

Linda no solo me traiciono en lo sentimental, sino que tuvo el descaro de compartir lo que hicimos juntos con mi hermano, habríamos dicho que era nuestro secreto, que solo compartíamos entre nosotros esa experiencia.

En eso mi celular sonó.

📱HOLA MAN.

La voz de Luis

📱¿Qué cuentas?

Respondo apenas

📱¿ESTÁS EN EL TRONO?

Indaga al querer saber si estoy en el baño.

📱Sí, dime que quieres.

Resoplo.

📱Era para avisarte que Aria regresa con su padre a la casa de la playa, van con tu abuelo.

📱¿Tan pronto?

Indago con sorpresa.

📱Al parecer pueden hacerlo e irán a limpiar para pasar la fiesta de fin de año.

Me aviso.

📱Gracias por avisar.

Le respondo.

📱Dejo que te liberes tranquilo.

Concluye.

📱Ja, ja, sos muy gracioso.

Le respondo y corto la llamada.

Al salir del baño me encamino hacia donde estaba con Federico y veo que Linda esta sentada ante él tomandole la mano y conversando con esos gestos coquetos que tanto conozco, la sangre me hierve, la bronca fluye por mis poros, me aproximo despacio para oir sin que me vean.

"Se que no fui sincera, pero entiende, no sabia como decirtelo"

La voz de Linda en un tono meloso y penoso mientras acaricia las manos de Federico.

"Me mentiste, no era verdad que él te acosó y me vengo a enterar de esto, ¿Qué más me ocultas?"

Federico se escucha herido y ofendido.

"Lo se, estaba entre la espada y la pared, me pasa lo mismo que te pasa, podemos llegar a un acuerdo, para que nos dejen en paz"

La escuche decir.

¿Qué negociaba con Federico?

¿De qué estaba hablando?

"No lo se, esto es mucho, tengo que procesarlo, no puedo decidir nada ahora, yo en verdad estaba interesado en ti"

Le respondio Federico.

" No debe cambiar nada, dejemos el pasado y enfoquemonos en el presente"

Escuche decir a Linda, no hace ni un momento me estaba rogando volver y ahora la escucho hablar asi a mi hermano.

"Debes entender mí posición, el porque me resulta dificil creer en tus palabras"

Le dijo Federico.

Ella le tomo la mano y la poso en una de sus lomas.

"Sientes como late, me arme de coraje para confesarte esto, si no quisiera no te lo diria, procésalo, averigua sino confías, pero te digo desde ya, es verdad todo lo que acabo de decirte"

Cerre los puños con bronca, Linda sin pudor alguno hace que Federico la toque en público.

Me regrese al interior fui al bar a pedir un trago.

-Erik. La voz de Aria a mi espalda.

Me gire despacio y ahi estaba parada.

-Hola. La salude en un suspiro, ella se me prendio en un abrazo fuerte.

-Te extraño. Me susurra al oido.

-Solo pasaron unas horas. Le dije.

Aria se retira sosteniendome la mano, me mira con un brillo unico, como si solo fuera su unico idolo.

-¿Qué haces? Me pregunto.

-Vine a comer con Federico. Le respondo.

-Yo retiro un pedido, vamos a ir a la casa de la playa. Me cuenta.

-¿Estas sola? Le pregunto

-No, mi padre fue al baño. Me responde.

Al tenerla asi de cerca y sentir como late mi corazón, me doy cuenta que gasto coraje con Linda, no deberia afectarme lo que haga o deje de hacer, tengo a Aria que me valora y por como me mira solo a mi quiere.

-JOVEN BROWN. La voz grave y potente de su padre me sobresalta, pero no suelto a Aria.

-Buenas, que casualidad encontrarnos. Le respondo.

-FUE UN GUSTO, ARIA YA NOS VAMOS. Le indica a Aria.

-Me dijo Aria que regresan a la casa de la playa, me ofrezco para ayudarlos en lo que necesiten.

-NO HACE FALTA, NOS ARREGLAMOS BIEN.

Fue cortante su respuesta, mirandome de una manera que helaba la sangre.

-Si, que venga, una mano mas nos vendría bien.

Insiste Aria con una sonrisa.

-DEBE TENER SUS OCUPACIÓN... ¿QUÉ ESTABA HACIENDO?... SEGUN SUPE ESTABA REUNIDO CON SU HERMANO.

Me mira serio como empujandome a que me reusé a ir.

-Asi era, pero como ve salgo sobrando, mi hermano ahora esta ocupado.

Le señalo en dirección a la mesa donde esta hablando con Linda que a la vista de todos se los ve muy intimos.

-Ves padre, ya no esta ocupado, puede venir con nosotros.

Aria le habla de una manera como para convencerlo.

-SI VAS A AYUDAR QUE SEA ASI, NO QUIERO NINGUNA QUEJA. TU SOLO TE OFRECISTE.

Al final accedió, sus palabras me hicieron temblar las piernas al presentir que no tendría compasión en sus exigencias.

-ENTENDIDO.

Le respondí.

Aria sonrió ampliamente y su mano aferrada a la mía me daba seguridad.

-QUE ME ENVUELVAN PARA LLEVAR LO MÍO. Le señalé al mozo que asintió.

Al salir me encamino a la mesa donde está Federico hablando con Linda.

"Podemos hacerlo las veces que quieras" Escuche que ella le afirmó acariciando su mejilla.

-FEDERICO, ME VOY. HABLAMOS OTRO DÍA. Le dije sobresaltándolos, como si los pescara infragantes.

-Erik. Susurro Linda con los ojos muy abiertos.

-CLARO. YA VEO QUE ME CAMBIAS. Respondió Federico al ver mi compañia.

Aria aferrada a mi mano solo sonrió en señal de saludo, bajo la mirada evaluativa de mi hermano y de Linda.

-AHÍ NOS ESPERA TU ABUELO. Me señalo Aria con una sonrisa y veo a mi abuelo aparecer con unas bolsas de compras.

-CONSEGUÍ LO QUE NOS HARA FALTA PARA LIMPIAR. Dijo enseñando las bolsas.

-HOLA ABUELO. Lo saludé.

-TE NOS UNE. Dijo mirando serio.

-SI, LOS AYUDARE.

Nos miramos, con un gesto me señaló que tome las bolsas y las llevamos a su camioneta. Me sente atras con Aria, mientras adelante manejaba mi abuelo y a su lado el señor Delmar.

Aria sonreia aferrada a mi mano y se apoyaba contra mi brazo mientras mirabamos el paisaje.

Al llegar fui testigo de las maquinas trabajando, algunas limpiaban la playa otras rellenaban con arena y la casa de mi abuelo soporto la tormenta al igual que la de Aria, solo estaba la marca del agua a unos pocos metros en la pared.