Ahora Todos Aman A La Villana?

Alondra abre sus ojos encontrándose en una habitación desconocida de clase baja asi que se levanta mirando a sus alrededores, al parecer era la habitación de una posada.

"lo último que recuerdo fue haberme desmayado en los brazos de Darío mientras huiamos..."

Alondra se dirige al baño de la posada donde solo había una tina de madera llena de agua fría, una loción, algunas batas de baño y un pequeño y viejo espejo colgando en la pared.

Alondra se acerca al espejo notando su aspecto sucio y descuidado, sus ropas estaban llenas de sangre y tierra al igual que su rostro manos y cabello, además que su rostro estaba hinchado y ni hablar de sus ojos; era un desastre total.

ella comienza a desnudarse tratando de suprimir las lágrimas que rogaban por desbordarse,

"ya es suficiente Alondra... no hay nada que pueda hacer, ahora solo queda seguir adelante!"

ella se vuelve a mirar al espejo y se obliga a formar una sonrisa.

_asi es, la abuela no hubiera querido esto, debo ser fuerte, por ella y por mi... pronto superaré esto y seguiré adelante! voy a ser libre y viviré una vida tranquila y feliz!...

"eso haré... yo... voy a ser feliz..."

aunque le tomara algo de tiempo reponerse este golpe mortal, Alondra no estaba dispuesta a derrumbarse y renunciar a sus sueños, eso seria traicionarse a si misma y a su abuela que tantas veces le profeso lo feliz que se merecía ser.

poniendo su mente en blanco para evitar sobrepensar, Alondra procede a meterse en la tina y sumergirse sin importarle el agua helada; de hecho, eso era lo que necesitaba en ese momento.

luego de lavar su cuerpo procedió a lavar su desastroso cabello y trago en seco sacudiendo su cabeza y respirando hondo para no llorar al tener el recuerdo vivido de Crishta lavando su cabello con delicadeza mientras no dudaba en elogiar lo hermoso que era...

_no te preocupes Crishta... voy a cuidar mi cabello y lo mantendré siempre hermoso en honor a tí...

"lo siento Crishta... tú tampoco merecías ese final, solo eras una joven que comenzaba a vivir su vida y por culpa de ese demonio..."

pronto la nostalgia se transforma en ira y Alondra comienza a cepillar su cabello bruscamente.

_esos asquerosos demonios... juro por mi maldita existencia que los voy a erradicar! nuestras existencias no caben en un mismo mundo asi que uno de los dos debe ser borrado y esa no voy a ser yo!... de mi cuenta corre que su asquerosa especie.

al salir del baño en una bata, Alondra pensaba en llamar a Darío y pedirle algo de ropa limpia pero al parecer él ya se había adelantado, sobre la cama había un cambio de ropa limpia; botas, pantalones y una camisa sencilla de mangas largas.

Alondra no puede evitar sonreir levemente ante el detalle, pues esto era lo más cómodo posible para ella.

al ponerse las prendas, Alondra recoje su cabello en un moño alto atado el mismo y procede a salir de la habitación.

_gracias por el cambio de ropa_ dice ella a Darío quien se encontraba esperando fuera de la habitación.

_no tienes que agradecer... estas bien?..._ pregunta él mirándola a los ojos con algo de tristeza y culpa.

_no lo estoy, pero estoy dando lo mejor de mi para superarlo... asi que por favor no vuelvas a sacar el tema si?.

Darío solo siente sintiéndose peor pero Alondra se acerca acariciando su mejilla y diciendo _tambien deja esa mirada y mírame como normalmente lo harías... ya lo hablamos, no fue tu culpa... yo no te culpo asi que tu tampoco lo hagas si?.

Alondra lo mira son una tierna sonrisa desgastada y Darío aprieta su puño impotente forzandose a esbozar una sonrisa ladina _esta bien hermosa dama_ dice él tomando la mano de Alondra para inclinarse y dejar un beso en sus nudillos _solo me queda decirle que estoy a su entera disposición asi que si necesitas algo no dudes en pedirlo.

Alondra sonrie por la compré con de Darío y asiente _entonces no dudaré en hacerlo cuando necesite de ello su mejestad.

_estamos en la aldea fronteriza a las afueras del bosque, nos movimos sin descanso durante dos días hasta salir del bosque y nos hospedamos aquí para descansar, he mandado a buscar varios carruajes para transportarnos ya que no podemos continuar a pie o a caballo debido a la condición de Bruno de los otros... ellos cuatro y las dos sombras que quedaron atrapados con ellos resultaron gravemente heridos y aunque lo estaban soportando bien, debido a que sus heridas no recibieron un tratamiento adecuado, sus estados empeoraron..._ explica Darío _asi que una vez lleguen los carruajes nos moveremos de inmediato para cruzar la frontera y que ellos puedan recibir el tratamiento adecuado lo antes posible.

_eso no es necesario_ dice Alondra _llevame con ellos...

_pero tú debes estar exhausta, incluso yo en este momento me siento exhausto aun, asi como yo utilicé demasiada sangre, tú usaste demasiado poder y no quiero que te sobre exija-

Alondra interrumpe a Darío tomándolo de su mano para arrastrarlo dentro de la habitación y llevarlo hasta sentarse en la cama.

_estoy bien_ dice ella _este poder tamben me dio una especie de inmortalidad, las heridas aunque sean mortales serán sanadas en un instante, soy inmune a enfermedades o maldiciones y si pierdo sangre, esta sera restaurada en cuestion de minutos, incluso el cansancio y la fatiga física extremos desaparecen si descanzo algunas horas...

ella extiende su mano hacia Darío y continua _eres un vampiro no?, con algo de mi sangre te recuperaras por completo, tómala.

_lo siento Alondra pero no voy a hacer eso_ dice Darío mirándola seriamente _tu sangre es demasiado..._ Darío toma la mano de la alondra y la pone sobre su mejilla sintiendo su calidez _soy incapaz de describirlo con palabras pero te aseguro que si vuelvo a probar una sola gota de tu sangre... yo no seria capaz de dejarte ir, además de que no creo capaz de poder sobrevivir con otra sangre que no sea la tuya...

las mejillas de Darío se ruborizan levemente y traga en seco de solo recordar aquella sensación indescriptible, fue el exatacis definitivo que incluso lo hizo sentir aterrado por que por un momento sintió que enloqueceria.

_estas dispuesta a arriesgarte a que nunca te teje ir de mi lado por darme tu sangre?..._ Darío la mira a los ojos sin notar la expresión que el mismo estaba haciendo.

miraba a Alondra con ternura y una inmensa lujuria, como si estuviera suplicando por un sí a su pregunta.