Drama
NovelToon tiene autorización de More Jim para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
AMARGURA
A July, se le formó un nudo en la garganta mientras dejaba caer algunas lágrimas.
- ¡esa maldita!, es la hija de Macario, aquel hombre despreciable que me dejó abandonada hace 36 años sin importarle mi desgracia. - explicó July con amargura.
- ¡¿qué?!, me estas diciendo que ese viejo que llegó con Jazmín del hospital aquel día, es Macario. - pregutó Petra incrédula.
- sí, el mismo. - contestó July.
- vaya que se ve muy cambiado, se ve que no le ha ido muy bien, esta muy acabado. - expresó Petra.
- no me importa cómo le haya ido todo este tiempo, ¡lo quiero ver humillado, hundido en la peor de las desgracias! - escupió July con ira.
- espera, ¿desde cuando descubriste que Jazmín es hija de Macario? - pregunto nuevamente Petra.
- en un viaje a la ciudad, vi por casualidad a Jazmín, que en ese momento estaba recién casada con mi hijo. Desde el principio algo en ella no me gustó, y ese día lo comprobé, cuando salió acompañada de unos señores que aparentemente eran sus padres, me quedé atónita al ver el parecido entre ella y el hombre que estaba a lado; no podía creer que después de tanto tiempo volviera a ver a Macario. - expresó July.
Si mi pequeño José no pudo tener una vida feliz a lado mío por culpa de Macario, su hija tampoco tendrá paz mientras esté en mis manos, ella va a sufrir todo el desprecio y la humillación por la que yo tuve que pasar. - prosiguió.
- no puedo creerlo, el mundo es tan pequeño, que coincidencias de la vida que la hija de tu enemigo se casara precisamente con tu hijo. - dijó Petra asombrada.
- lo sé, hasta parece una mala broma del destino. Porque en lugar de traer de vuelta a Macario, no me devolvió a mi hijo, a mi José. - siguió llorando July.
- lo siento mucho July, pero por más que hemos buscado nunca hemos encontrado ni una pista del paradero de tu hijo, has contratado varios investigadores privados y nadie ha podido darte una pista, yo creo que es momento de que te olvides de ese niño.- comentó Petra con una mueca de lástima.
- no, eso nunca, tengo que verlo tan siquiera una vez, debo saber si él está bien, si fue feliz, si ya tiene hijos, necesitó saberlo, abrazarlo de nuevo. Es un sentimiento de incertidumbre que me quema por dentro. - continuó July desahogandose.
En otro lado Don Carlos, bajó de un lujoso auto acompañado de una mujer visiblemente menor que él, pero poco le importaba lo que dijeran los demás, el era feliz.
Ella era Ana, una mujer de 30 años, hermosa y carismática. Conoció a Don Carlos en una conferencia sobre Derecho Penal; en cuanto los dos se vieron quedaron flechados el uno del otro, y en cuestión de meses Carlos le propuso matrimonio a Ana. Aunque su prometido fácilmente le doblaba la edad, a ella no le importaba, el físico no lo era todo, además Carlos no era viejo, todos estos años se había dedicado a conservarse muy bien, se ejercitaba y comía saludable, y lo que era mejor, no tenía ningún vicio. Si había algo a lo que Don Carlos se había vuelto adicto, era a ella.
- ¡ay amor, por fin llegamos!, me emocionaba tanto conocer tu empresa. - exclamó Ana Martinez.
- te daré un recorrido para que te familiarizes con los diferentes departamentos y los empleados, así estarás más preparada para hacerte cargo de la gerencia en la sede de Tuxtla. - dijó Carlos con un tono dulce a su prometida.
Mientras iban recorriendo los pasillos de la empresa, Carlos propuso a Ana, ir a conocer a sus nietos, que fueron el principal motivo por el cual regresó a San José. Ana aceptó sin dudar, ya que estaba encantada de que la integrarán a la familia.
Llegando la noche, Carlos y su prometida estaban en el departamento de Alejandro. Jazmín los recibió cálidmente, el que no estaba muy contento era Alejandro, ver a su papá llegar con una mujer como su futura esposa, lo hacía hervir de rabia, 《cómo era posible que sin ningún remordimiento, él ya estuviera rehaciendo su vida, cuando bien sabia que por su culpa él, su hermano y su madre habían sufrido su abandono》, pensaba Alejandro.
- ¿donde están mis nietos?, preguntó Carlos euforico. - traje muchos regalos para ellos. - continuó muy contento.
Jazmín los dirigió al cuarto de los niños, los dos parecían unos angelitos durmiendo. Don Carlos y Ana se dedicaron a abrazar y colmar de cariño a los pequeños. Luego con gran emoción comenzaron a destapar los regalos, ropa, juguetes, colchas, pañales, cremas y demás cosas de las mejores marcas, se amontonaron en el cuarto.
- Alejandro, hijo ahora que lo veo, no es conveniente que sigan en este pequeño departamento, mis nietos necesitarán espacio para jugar. - exclamó Carlos.
- mañana mismo, buscaré un lugar más adecuado para ustedes. - continuó muy feliz.
- esta bien papá, gracias por tu ayuda. - contestó Alejandro sin mucho ánimo.
- querida, ya que debes conocer a todos los empleados, te voy a presentar a la mejor secretaria que la empresa ha tenido, mi nuera. - dijó Carlos a Ana. - es muy eficiente y responsable con el trabajo. - continuó.
- me parece excelente, espero que puedas enseñarme las actividades de la empresa.- comentó Ana con una sonrisa.
- por eso en cuanto regreses a la empresa te tengo una sorpresa, pero por ahora tomate el tiempo que quieras, no te preocupes por tu sueldo hija. Te estoy muy agradecido por darme estos nietos tan preciosos. - exclamó Carlos.
Jazmín estaba muy conmovida con la manera en que su suegro y Ana, la trataron, y en como se habían preocupado por sus hijos llevándoles regalos, pues ella con su sueldo no había podido comprar mucho y Alejandro ponía excusas sobre que su padre no le estaba pagando.
Al día siguiente mientras Jazmín y Alejandro desayunaban, no pudo evitar comentar positivamente sobre la actitud de Ana, diciendo que le parecía muy bien que Don Carlos estuviera rehaciendo su vida a lado de una buena mujer.