Ecos De Eos

El regreso a la base fue tenso, el silencio se extendía como un manto pesado entre Axel y Camila. La reciente victoria les había otorgado un breve respiro, pero el recuerdo de la mujer de armadura negra y la ominosa amenaza de Zarkoc seguía latente en sus mentes.

Cuando llegaron, encontraron a Lucas y Kai discutiendo animadamente sobre el próximo paso de la resistencia. Al verlos, Lucas levantó la vista, sus ojos brillaban con un destello de esperanza. "¡Axel, Camila! ¿Qué pasó? ¿Lograron vencerla?"

"Fue una batalla difícil," respondió Axel, sacudiendo la cabeza. "Pero sí, al menos por ahora. Sin embargo, Zarkoc está buscando la Chispa Karioli, y sabemos que no se detendrá hasta obtenerla."

Kai se acercó, la adrenalina aún corría por sus venas. "Necesitamos reunir a más personas, formar un grupo fuerte. Si Zarkoc está tras de nosotros, lo mejor que podemos hacer es prepararnos para una pelea real."

"Estoy de acuerdo," dijo Camila, recuperando el aliento. "Cada vez que enfrentamos a esos seres de sombras, se vuelven más poderosos. No podemos estar solos en esto."

Axel miró a sus amigos, sintiendo la energía de sus vínculos. "Comencemos a buscar a otros que puedan unirse a nuestra causa. Tal vez haya más como nosotros, aquellos que han despertado habilidades y desean luchar."

Con un plan en mente, el grupo se dispersó. Cada uno tenía sus propias tareas: Lucas buscaría a los elementales que conocia, mientras que Kai se enfocaría en reclutar a aquellos con habilidades de velocidad. Camila y Axel, por su parte, se encargarían de buscar a los jovenes que pudieran haber despertado.

Esa misma noche, la mujer de armadura negra, que se hacía llamar Eira, observaba a través de las sombras. Su conexión con Zarkoc le permitía sentir cada movimiento de Axel y sus amigos. "No se han dado cuenta de lo que realmente están enfrentando," murmuró para sí misma, apretando su espada. "Ellos son solo una pieza en un juego mucho más grande."

En ese instante, un susurro oscuro se materializó a su lado, formando la figura de Zarkoc. "Eira, los has subestimado. Axel y sus amigos son más fuertes de lo que aparentan. Sin embargo, no podemos permitir que crezcan. Hay que aplastarlos antes de que se organicen."

Eira sonrió con malicia. "Sé lo que hacer, Zarkoc. Pero primero, necesito hacer unos ajustes en mi plan. Te dejo a cargo a mi ejercito. No podrán defenderse contra la fuerza combinada de las sombras."

Zarkoc asintió, satisfecho. "Gracias, con este ejército seré imparable. La victoria será nuestra."

Al siguiente dia. Axel y Camila habían comenzado su búsqueda en un antiguo parque de la ciudad, un lugar donde muchos jóvenes se reunían. Habían escuchado rumores de otros que también habían despertado habilidades.

Al acercarse a un grupo de adolescentes que practicaban trucos de skate, notaron a una chica con cabello rizado y un aura intensa. Ella se movía con gracia y control sobre el viento, lanzando su patineta hacia el aire, donde giraba antes de caer suavemente en sus manos.

"¡Esa es una Elemental!" exclamó Camila, su mirada brillante de emoción. "¡Vamos a hablarle!"

La chica, que se presentó como Lía, escuchó atentamente mientras Axel explicaba su misión. "Hemos visto un aumento de las criaturas oscuras en la ciudad. Necesitamos a personas con habilidades como las tuyas para luchar contra ellas."

Lía se cruzó de brazos, mirando a su alrededor antes de responder. "He oído sobre lo que está pasando. Mi familia no lo sabe, pero he estado entrenando. Siempre he sentido que el viento me responde. Pero, ¿por qué debería arriesgarme a unirme a ustedes?"

"Porque juntos somos más fuertes," respondió Axel, mostrando la determinación en su voz. "Si luchamos en solitario, caeremos. Pero si nos unimos, podemos hacer frente a la oscuridad."

Lía consideró sus palabras, y luego asintió lentamente. "Está bien. Estoy dentro. Pero no seré la única. Conozco a otros que también tienen poderes. Puedo traerlos."

Esa noche Axel, Camila, Lucas y Kai se reunieron en la base, emocionados por las nuevas incorporaciones. Cuando Lía llegó, estaba acompañada de un grupo diverso: Tony, un chico que manipula la tierra, Maria, una chica capaz de crear ilusiones y Maho un joven que controla la electricidad. Ademas atras de ellos venian los dos Elementales que Lucas habia reclutado: Nina, una chica que controla la lava y Raul, un chico que controla el metal.

"¡Bienvenidos!" dijo Axel, sintiendo que la esperanza comenzaba a renacer. "Juntos, formaremos una resistencia que nadie podrá ignorar. Los Apátridas no saben lo que se le viene."

"Tenemos que estar listos para cualquier ataque," agregó Camila. "La mujer oscura no se detendrá por lo que debemos ser estratégicos."

Mientras la noche avanzaba, los nuevos reclutas se unieron al grupo. Axel sintió la fuerza de su unidad y supo que estaban listos para enfrentar lo que venía. La llama de la resistencia estaba encendida, y juntos se enfrentarían a las sombras que amenazaban su mundo.