MI AMAZONA

Natalia miró como Capricho tenía la primera aparatosa caída, y estar lejos de él le hizo el corazón pedazos. Pero verlo recuperarse le tranquilizó un poco; pensar en que perdió la carrera era lo último, solo pensaba en ir al lugar acordado con Rick después de terminar la carrera.

____ Rick, ¿Está bien?, dime que no estas herido___ preguntó Natalia apenas miró a su amigo, que la veía con desesperación y vergüenza.

___ Lo siento, Natalia... no sé que sucedió, una piedra en el terreno nos jugó una mala pasada ___ dice Rick, con la voz entrecortada.

___ Capricho está bien, no está herido, eso es bueno ___ dice Natalia, buscando cualquier herida en su valioso caballo.

____ ¿Qué fue lo que acostaste?___ preguntó Rick, conocía a Natalia y algo le decía que no era bueno. Natalia despertó de la impresión y del susto para caer en una realidad que le generaba angustia, miedo e incertidumbre; hasta ese momento no se había dado cuenta de la magnitud se lo acababa de suceder.

___ Lo mismo que apuesto en todas, no tienes que preocuparte ___ miente Natalia. Para Rick, esto no era del todo cierto, pero no quiso incluirla insistir más.

____ Natalia por fin te encuentro, ¿Qué carajos pasó?___ dice Richard, entrando a las caballerizas muy preocupado.

___ Las caídas suelen pasar en las carreras, no sé que es lo que te asombra tanto ___ dice Natalia, disimulando un poco la tormenta que sentía en su corazón.

___ No es solo la carrera, ¿Qué fue eso de montar un caballo salvaje?, papá está furioso buscándote ___ agregó Richard, exaltado.

___ ¿Cómo que montaste un caballo salvaje? Natalia, ¿Olvidaste lo que ocurrió la última vez?___ interrumpió Rick.

____ Hermano, puedes llevarte a Capricho, necesita descansar, más tarde iré a verlo ___ dice Natalia, cómo siempre desviando la conversación. Richard hizo un gesto a su empleado de confianza para qué sacará a Capricho del lugar.

___ ¿Natalia, te parece que todo esto es un juego?___ preguntó Richard a su hermana, quien no mostraba ni una sola reacción de arrepentimiento.

___¿Te parece que soy una mujer inmadura?, ¿Crees que una niña que fue abandonada por su familia toda su vida, y creció sola, defendiéndose de un mundo cruel y machista, a estas alturas de la vida, ¿Crees que no sé lo que hago?, no tienes derecho a cuestionar mis acciones___ dice Natalia, cómo si estuviera desahogándose de algo que la atormentaba.

Mientras ellos discutían en las caballerizas, llegaba Osvaldo Jiménez, quien la había estado buscando por todos lados, su mirada no era amable ni tranquila.

____ ¿Dónde diablos estabas metida?, no te dije no hicieras nada estúpido___ dice Osvaldo, dándole una fuerte bofetada a Natalia, que resonó en el silencio de las caballerizas, pero Natalia no mostró reacción alguna ni resentimiento.

Rick de inmediato se interpuso entre Osvaldo y Natalia para protegerla, pues parecía que no estaba satisfecho con solo una bofetada. En ese momento entraba a la puerta de las caballerizas Santiago y Ricardo, y mirar como Natalia era abofeteada Santiago sintió como se le calentaba la sangre, y más siendo su propio padre. Muy decidido, quiso intervenir, pero Ricardo lo detuvo.

___ Tranquilo, ella ya tiene quien la defienda, su hermano y amigo están allí, no has pensado que la última persona a la que ella quiere ver en este momento, eres tú ___ dice Ricardo sacando a Santiago a la fuerza de allí.

___ Papá, lamentó darle molestias a tu perfecta familia, no es mi intención, solo hice lo que creí correcto, estaban torturando a un animal, eso no es de humanos ___ dijo Natalia con determinación en su voz.

La mirada de Osvaldo se endureció aún más ___ Eso no es tarea de mujeres, es para hombres ___ respondió, su voz era llena de desaprobación.

Richard intervino, intentando calmar la situación ___ Papá, tranquilízate por favor, ya vamos para la casa __ Richard salió con Osvaldo, pero antes le hizo una señal discreta a Natalia, indicándole que también debía irse con ellos. Sin embargo, Natalia movió su cabeza en señal de desacuerdo.

Natalia quiso salir corriendo de aquel lugar, pero Rick la detuvo ___ Natalia, paga tu deuda y vámonos de aquí, por favor ___ suplico con voz llena de preocupación, inocente de que aquella carrera que acababa de perder, marcaría para siempre la vida de Natalia.

___ No me sigas, necesito estar sola, vuelve al hotel donde te hospedás, te llamaré más tarde ___ dijo Natalia con firmeza.

La noche en el pueblo llegaba con celebraciones por todos lados, un contraste cruel con el estado emocional de Natalia.

Natalia montó su motocicleta, decidida a dejar atras el bullicio y el do, pero no era mujer que huía de los problemas, no faltaría a su palabra respecto a la apuesta. Secándose lágrima que rosaba su mejilla lastimada, dio vuelta a su motocicleta, pero decidió no regresar a su casa, estaba cansada de tantos rechazos y desaprobación. Pasaría la noche en el primer hotel que encontrará, en busca de refugio y tranquilidad. Al día siguiente pensaría que hacer.

Mientras que en otro lugar Santiago no podía dejar de pensar en Natalia, la imagen de ella le hacía preguntarse donde podría estar y en que estado, lo que lo hacía sentir una punzada y anhelo.

___ Amigo, para alguien que ganó la carrera, no pareces feliz ___ preguntó Ricardo.

___ ¿Qué esperabas? ___ respondió Santiago, con una sonrisa débil.

___ ¿Dime de una vez que carajos fue lo que apostaron?, ya me estoy preocupando, no has querido responder.

___ Si yo ganaba, Natalia se casaría conmigo___ dice Santiago.

__ ¿Qué? ¡Es una broma!, ¿verdad?__ contesta Ricardo, tomando un trago de su bebida.

___ Crees que jugaría con eso ___ responde Santiago.

____ ¿Qué te pidió ella en caso de salir ganadora? ___ preguntó Ricardo.

Santiago sonrió y respondió: ___ Si ella ganaba, yo tendría que dejar este pueblo para siempre.

___ ¡ja !, ¡increíble!, te casas con el enemigo, ¿A quién se le ocurrió la idea? ___ preguntó Ricardo.

___ A ella, por supuesto ___ responde Santi.

___ ¿Y la cara que traes es porque te arrepientes de aceptar el trato?, o tienes miedo que la novia haya ___ comentó Ricardo burlándose de su amigo.

___ ¡No seas imbécil! si hay algo que quiera en este momento es casarme con ella. Lo que me preocupa es su familia y todo el pueblo ___ dijo Santiago.

____ Escuchate... y pensar que antes de conocerla ni mencionabas el matrimonio. ¿Pero qué tiene que ver el mundo y su familia?__ dijo Ricardo.

___ Ella es una mujer diferente, y eso es un problema en este pueblo. Tú los sabes. Y su familia, hay un conflicto que no conozco, pero no es sencillo. Eso significa que si nos casamos, estaría expuesta a todo este enredó ___ explicó Santiago.