Alexandra fue engañada creyendo que firmaba un contrato laboral y acabó siendo uno matrimonial.
En tanto que para Christopher la situación también ha sido complicada, ya que como presidente de la empresa familiar, al momento de firmar los papeles para asumir el cargo de manera oficial, dos cláusulas cambiarían su vida para siempre: casarse y ser padre.
Por obligación ambos debieron aceptar la situación; sin embargo, jamás pensaron que la llegada del otro cambiaría muchas cosas para ellos.
¿Podrá el amor surgir con base a un contrato dado por mentiras?
¿Pueden dos personas, con perspectivas de la vida tan distintas, llegar a llevarse bien?
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Capítulo 14 LÁGRIMAS
Alexandra
Los días pasaron y se me hicieron demasiado cortos, la boda ocurriría en un parpadeo.
Mí vida pasaba frente a mis ojos y no paraba de recordar las conversaciones que tuve con mis padres en el pasado acerca del amor y la familia. Que debía casarme con un hombre al cual ame y tener hijos cuando me sintiera preparada, eso era lo que más remarcaba mí madre y mí padre bueno, que jamás dejé que nadie me maltrate y que sea independiente, que luche por mis sueños y este con alguien que me motive a salir adelante.
Llamé a mis padres con un nudo en la garganta y con lágrimas bañando mis mejillas.
-Cariño, ¿Cómo estás? Hace unos días que no llamas, ¿Estás bien?
-Mamá, escúchame esto no es fácil pero perdóname porque les he fallado
-¿Que pasó? ¿Por qué lloras?
-Mamá firmé un documento sin leerlo, en estos días me caso por eso
-¿Te... casas?
-Yo no lo amo ni el a mí, se que necesitaba una esposa y que en la renovación de contrato firmé una hoja sin saber que era. Ahora me casaré, o tendré que pagar una deuda que no podré juntar en ésta vida
-¿No hay nada que puedas hacer?
-No mami, es todo legal. Pero él necesita además un heredero, solo dejándoselo seré libre
-Tal vez con el tiempo se enamoren y puedas quedarte con el niño
-Eso no sucederá nunca, solo llamaba para que lo supieran porque saldremos en las noticias. Desearía tenerlos aquí pero sería más doloroso, por favor perdonenme. Dile a papá, yo no tengo el valor de hacerlo. Los amo, debo colgar
Termine la llamada llorando aún más mientras abrazaba mí almohada y veía la foto de los tres, donde aún era feliz y vivía sin preocupaciones siendo una muchachita apenas.
Alguien llegó y golpeaba la puerta, cada vez con más fuerza pero no estaba presentable para abrir, tampoco quería ver a nadie
-¿Que está pasando aquí?- Christopher intentaba saber que estaba sucediendo
-Vete por favor, hoy no quiero discutir contigo
-¿Por qué lloras?
-Porque me casaré, defraudaré a mis padres, tendré que tener un hijo con quién no quiero y además debo abandonarlo
-No es tan malo, tendrás una pequeña fortuna
-Puedes quedartela. Jamás pagarás suficiente por mi
-No estemos mal, debemos parecer enamorados y tú feliz
-Si no vas a irte quedate callado. Si no vienes a solucionar nada puedes marcharte, ya conoces el camino
-Venia para dejarte los horarios, la señora Dumois intentó comunicarse contigo por el vestido pero no pudo hacerlo, además tienes cita en el salón de belleza
-¿Que más?
-Debes alistar tus cosas para la mudanza
-¿Por qué?
-Porque estaremos casados, debes vivir conmigo
-Por que casarte, por qué tener un hijo, por qué yo
-Cuando tomé la presidencia firme unos papeles pero uno de ellos tenía clausulas que no leí, era mi abuelo, jamás imaginé que algo tramaria. Los años pasaron y acabé por enterarme hace poco de lo que había firmado, necesitaba casarme antes de los 36 y tener un hijo antes de los 40
-Así que no fui la única que firmó sin leer, aunque sabes bien que me apuraste para hacerlo
-No sabía de dónde sacar una esposa en dos meses, se me ocurrió aquello y así llegamos hasta aquí, no fue personal
-Nunca te amaré
-Eso es bueno, yo a ti tampoco. Toma esto como un acuerdo de negocios, así será más fácil
-Un acuerdo donde mi cuerpo es requerido, me tomas por prostituta, vete Price
-Estas exagerando las cosas Alexandra, podemos divertirnos mientras buscamos al niño
-Te vas o hago que te vayas de aquí
Él me robaría lo más preciado, me usaría para saciar sus deseos y arrancarme un niño. Mi opinión no era tomada en cuenta, mis sentimientos mucho menos. Jamás tendrá más que desprecio por mi parte. Seguiré estudiando para poder defender causas injustas, algo bueno sacaré de esto