Mi Gordita, Mi Debilidad.

Alan no pudo esperar a que fuera mediodía y fue a buscar a Rut, para llevarla a comer.

Rut: amor! ¿No quedamos en que vendrías en dos horas?

Alan: no pude esperar ~~ con la cabeza baja~~ te extrañé mucho.

Rut: ven y dame un abrazo! Yo también te extrañé mucho.

Alan se acercó rápidamente a ella y le dio un tierno abrazo.

Respiro profundamente el olor de su cabello y la rica fragancia que salía de su cuerpo.

Alan: Tu olor es único y exquisito, mi muñeca.

Rut: no hagas cosas raras, amor.

Alan: contigo es difícil no hacerlo!

Se separó de ella y la quedó viendo a los ojos.

Alan: te confieso que he estado enamorado de ti, desde hace mucho tiempo.

Eres la mujer más hermosa que jamás vi en toda mi vida.

Eres simplemente perfecta y tienes un cuerpo de infarto.

Rut: amor! Cómo puedes decir eso? Muchos me ven gorda y fea.

Alan: Quienes? Porque a dónde vas o vamos, todos se te quedan viendo y botan la baba por ti.

Quisiera poder sacarles los ojos, para que no vean lo que es mío.

Rut lo abrazo y le dio un pequeño beso.

Rut: espera un momento aquí, ya regreso.

Después de estar lista, se fueron a comer y a disfrutar su día juntos.

Alan la ayudo con las tareas y pendientes rápidamente; luego la tuvo el resto del día, para él solito.

No paraba de hacerle mimos, de besarla, abrazarla y de hacerla reír con cada ocurrencia.

Al otro lado de la ciudad, una persona había llegado de visita, a una gran mansión.

Patricia: hola amiga, que bueno que me visites.

Marta: amiga! Cómo has estado?

Patricia: muy bien! ¿cómo está, Carla?

Marta: muy bien! Tú sabes, de compras.

Aprovechando su juventud.

Patricia: entiendo! Eso es bueno, debemos salir un día a un spa, las tres juntas.

Marta: excelente idea amiga! Pero lo que vengo a hablar contigo, es sobre el matrimonio de nuestros hijos.

Patricia: es verdad! Ya están en edad de casarse y eso fue un pacto que hicimos hace muchos años.

Marta: si! Mi Carla está contenta y solo está esperando que tú hijo le pida ser su novia.

Sabes que ella en la universidad es muy popular, es la capitana de las porristas.

Además, es buena estudiante.

Patricia: imagino! Carla es muy bella, y talentosa.

Marta: mi esposo está alegre y sobre el convenio de unir las empresas, espero y no haya marcha atrás.

Patricia: claro que no! Alan hará lo que yo diga, soy la CEO en estos momentos y el solo me debe obedecer.

Si él quiere el mando de la empresa, hará lo que yo le pida.

Marta: excelente amiga! Le diré a mi niña.

Sabes que mi hija fue criada como una princesa y solo merece lo mejor.

Patricia: lo sé! Además que el matrimonio de mi hijo, solo puede hacerse con una familia igual de importante.

Marta: entonces quedamos así! Hablemos de otras cosas.

¡Sabes amiga! Deberíamos planear un viaje a la playa.

Las mujeres seguían en su plática tan amena, haciendo todo tipo de planes; sin importar la opinión de Alan.

Mientras en un centro comercial, Carla se pavoneaba como toda una diva.

Carla era una chica de 22 años.

El sueño de todo hombre.

Delgada, buena figura, rubia y de ojos grises.

No había ningún hombre en la universidad que no se desviviera por ella.

Fue criada como toda una princesa. Al ser la única hija de sus padres, creció rodeada de lujos y excentricidades.

Nunca aceptaba un no por respuesta; y todo lo que quería, debía hacerse, si o sí.

Sus padres tenían una pequeña fortuna, pero nada comparada a la de la familia de Rut y Mary.

Solo que eran familias que siempre vivieron, bajo perfil.

Criaron a sus hijas de manera humilde, por esa razón, muchos creían que Rut era una becaria.

Ambas eran chicas que les gustaba vivir la vida a su manera, normal y sencilla; aunque siempre bajo el conocimiento de que eran las herederas del imperio tecnológico más grande del continente.

Al ser sus padres socios en este negocio, ambas quedarían al mando de la empresa.

Por esa razón no las habían apurado en hacerse cargo aún de la empresa.

Era una gran responsabilidad y ellos esperarían que cada una estuviera lista.

Ambas se preparaban para este importante suceso. Mary era bastante floja para estudiar, pero era consciente de su responsabilidad y por eso tuvo ese viajé a Italia.

Se preparó en sistemas, aunque fue difícil, fue de mucha ayuda.

Sin contar, que fue preparada en defensa personal, uso de armas y pelea cuerpo a cuerpo, entre otras cositas bastante peligrosas.

No parecía, ya que casi siempre demostraba ser una chica perezosa; pero era bastante letal.

Rut, no había recibido su preparación, debido a las crisis emocionales que había vivido. Pero sus padres ya estaban preparando el lugar donde sería enviada.

Todos conocían la empresa de los padres de ambas chicas, solo que ellas por años, mantuvieron un perfil bajo.

Mucho se debía a qué Rut sufrió demasiados episodios de depresión; ser expuesta al ojo público, solo iba a agregar más estrés a su vida.

Por esa razón, no las expusieron y casi nadie las conocía; por lo menos a Rut, que era la que menos se exponía.

Los padres de Rut se encontraban en un viaje de negocios en Japón, tenían muchos amigos en ese país.

Japón es conocido por su tecnología y ese sería el lugar donde enviarían a Rut.

Ambos habían notado que ella se encontraba mejor emocionalmente y estaban esperando el momento, para enviarla a estudiar.

Rut era consciente de que en algún momento tendría que irse a preparar, así como lo hizo su amiga.

Aún no sabía el momento; pero desde que comenzó a salir con Alan, se le había pasado por alto ese detalle.

Alan también fue preparado en defensa personal, uso de armas, pelea cuerpo a cuerpo, tortura, sacar información entre otras cositas.

muchos se preguntarán, porque?

No solo era una empresa de tecnología y sistemas. Era algo más profundo, que fue heredado por los abuelos de las chicas.

Tenían una organización secreta, de investigación y espionaje.

Eran contratados por organismos poderosos para investigar robos, personas, secuestros, analizar información, descubrir secretos, y otras cosas más.